Capitulo 3♥

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Sólo que él había existido, gimió en silencio. Y continuaría existiendo en el corazón de Isabella por largo, largo tiempo.

Levantó las manos para limpiar la humedad de sus ojos.

«Maldición», pensó abruptamente. «No puedo seguir llorando. ¡No deben quedarme más lágrimas!» Enojada consigo, se volvió y entró en su habitación del hotel.

— ¡No más! —murmuró—. ¡Ya no más!

Y ya no lloró. Pero todavía sufría, sentía una opresión en el pecho al pensar de nuevo en Jake, y comenzó a transformarse con tanta rapidez, como lo había hecho Bradford.

A las 6:55, el milagro estaba casi completo. El pantalón de algodón azul pálido y la sencilla camiseta blanca, fueron reemplazados por un vestido de baile sin tirantes. Soltó su espeso y castaño cabello y se maquilló poniéndose rubor en sus suaves mejillas, convirtiendo sus ya impresionantes ojos marrones en pozos aún más oscuros de exótico misterio: enfatizando su boca, ampliamente sensual, con una capa de brillo.

Tenía una buena excusa para arreglarse, pues los asistentes al baile debían ir vestidos de etiqueta. Y debía maquillarse para ponerse ante la cámara de televisión.

Oyó un rápido golpe en su puerta.

—¿Isabella? ¿Estás lista? —preguntó Niall.

—Voy —respondió bruscamente. Y deslizando sus pies descalzos en las sandalias negras de tacón alto, salió de la habitación.

A las diez, el baile estaba en su apogeo. La orquesta de rock, traída desde Atlanta, tocaba su estridente ritmo a una amontonada multitud de enérgicos bailarines. Isabella se abrió paso entre los cuerpos ondulantes, con un micrófono y el cámara a la zaga, haciendo fugaces entrevistas al pasar, además de un comentario general que probablemente no usaría, excepto como base para su trabajo final.

La mayoría de los asistentes eran cooperativos y tolerantes, y cuando ella comentó a un grupo, que algunos de los atuendos «formales» de los jóvenes no eran de la mejor calidad, le dijeron que los asistentes «experimentados» al baile, siempre compraban sus vestidos en establecimientos de ropa de segunda mano.

—Estoy cansado y acalorado, Iss —repuso Niall, poco antes de las once—. Me vendría bien comer algo y una bebida fría.

—Está bien. Nos encontraremos aquí, cerca de la orquesta, a medianoche —sugirió.

—Lo haré. Dame el micrófono —enrolló el cable, lo colgó sobre su hombro, junto con su cámara, y desapareció en segundos, tragado por la multitud.

De repente, a pesar de estar en medio de una confusión, Isabella se sentía increíblemente sola. Con un suspiro de cansancio, miró alrededor, tratando de decidir a qué salida se dirigiría, y fue entonces cuando recibió la sorpresa de su vida.

Ahí estaba Jake, apoyado contra uno de los postes de la tienda, vestido con un elegante traje negro.

Isabella jadeó y lo miró más detenidamente. Entonces se dio cuenta que no era Jake, sino un hombre que se parecía muchísimo a él.

No pudo evitar mirarlo fijamente, y fue entonces cuando los ojos de él se volvieron con lentitud, atraídos sin duda por el intenso escrutinio. Y entonces, la miró de frente.

¡Era la viva imagen de Jake!

Tal vez debería haber desviado la vista, pero no pudo hacerlo. Era como si estuviera hipnotizada por el extraño parecido de ese hombre y quien había sido su amante los dos años anteriores.

Él frunció el entrecejo cuando intercambiaron miradas. De repente, se irguió y, sin apartar los ojos de Isabella, se dirigió hacia donde ella estaba.

Atracción Irresistible♥ |Z.M|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora