Abroad

XIX

/El Ministerio, ???/
/Año ???/

- Venga, mantén el ánimo arriba... ¿A quién estuviste apunto de tener? - Alis habló con su compostura habitual.

- A padre... A padre... Tenía a padre, noté su aura maligna... Joder, me habló. Pero no hice nada... Nada de nada...

- Tranquila, tranquila... - Oculem le acarició la espalda lentamente.

- Y lo peor fue cómo no pude ni verle la cara... No pude...

Joanne miró con atención a su desconsolada jefa.

- Bueno, esperemos a que se le pase...

- Si te digo la verdad, yo también ví a alguien y no pude hacer nada...

- ¿Era Danna?

Alis sonrió y asintió con algo de pena.

- Tú y yo sabemos que no es mala... Sólo está confusa. Tengo miedo de que se ofrezca... Y acabe muerta.

Brazaka agachó la cabeza y le posó una mano en el hombro de Alis.

- Ten cuidado... Él sabe de vuestro amor, y de seguro que lo usará en tu contra... Por favor, manteneos seguros todos.

Joanne intercambió miradas con el querubín, quién en efecto cayó en una trampa por ese motivo.

- Hey, ¿podemos hablar un segundo sobre lo que hemos visto? - Kobold preguntó con el semblante distraído.

- Ahora no es el momen-

- Me encantaría. - Brazaka respondió con firmeza y se acopló alrededor del grupo. - Bueno, ¿quién empieza?

- Si no os importa... - Tisnoc carraspeó y se ganó la atención de todos. - He llegado a para a un rincón de Asia, diría que fue Azerbaiyán, pero no estoy segura. He encontrado cantidad de pastillas en una duna, y las he destruido. Me he asegurado de que no quedara ni una por ahí. Pero también encontré algo más. Mirad... Son rastros de mkivern...

- ¿Mkivern? - Kobold gritó sorprendido.

- Sí, como lo oyes. Eran huellas de patas como las que tenían. Mirad.

Todo el grupo se acercó a mirar la evidencia que Noxis fotografió.

- En efecto, son de mkivern...

- Extraño... ¿No se extinguieron? - Alis cuestionó.

- Quizás esos monstruos y los mkiverns tengan algo que ver. - Tisnoc se cruzó de brazos.

- Lo dudo. - protestó Oculem. - ¿Hemos visto los mismos monstruos? Porque los que ví no se parecían ni a un mkivern, ni a un humano, ni a un cíclope... Ni a nada que haya visto antes...

- Quizás nuestro error es ese. - Joanne finalmente intervino.

- ¿Cuál?

- El de intentar clasificar a esos monstruos en una categoría. Quizás sean algo nuevo, algo que ha sido creado por Lucifer recientemente...

- Tienes razón... Empecemos a verlos como algo nuevo.

Brazaka miró al suelo y asintió.

- Bien, pero necesito encontrar el por qué esas huellas aparecieron. Quiero pensar que Lucifer no está reviviendo a muertos... Pero podría ser posible...

- ¿Qué es... Un... Mkivern? - Joanne preguntó confusa con el dedo entre sus labios.

- Cierto, tú no los has llegado a conocer.