Complicado es sólo una palabra

Fobia social: Trastorno mental crónico en el que las interacciones sociales causan una ansiedad irracional.

Mis padres habían intentado de todo para que no sigan quitándome el almuerzo en la escuela y que dejen de golpearme, claro, con fuerzas de niños pero lo suficiente para tenerme con miedo cada noche rogándole a mamá para que me deje faltar al día siguiente.

En la secundaria no fue tan diferente, los golpes eran más fuertes pero ya no se metían con mi almuerzo. Hasta ese entonces, solía ser bueno en el primer año para debate y exposiciones, pero las burlas y las constantes ideas de como me confundía en lo único en lo que parecía ser bueno acabaron con mi confianza... y conmigo. Cada vez que terminaba de hablar, solía ponerme tan rojo que terminaban gritando que era una niña y empezaban a lanzar bolas de papel, comida y cualquier tipo de cosas que se encontraran en el camino.

Entonces, pasaron un par de años así, en mi derrotado ser no cabía la idea de decirle a mis padres lo que pasaba porque... vamos, era una completa vergüenza que su hijo de secundaria no sepa defenderse de sus compañeros de clases que acabaron con su autoestima, su debate, sus exposiciones y por supuesto... con él.

Entonces, si entré a secundaria con miedo por lo que pasó en la primaria, ¿qué clase de miedo debía sentir al entrar a preparatoria?

Me llevaron a muchísimos doctores que sólo me hablaban de lo maravilloso que es vivir rodeado de gente que también es "muy, muy maravillosa". No era tan sencillo, algunos ni siquiera entendían que sufría de un miedo irracional hacia la gente que me rodeaba y que no era mi familia, gente que tenía que ver todos los días. No sé de que otra manera explicar lo que me pasa o que tanto me afectó todo lo que pasó en primaria y secundaria pero me causa gran ansiedad pensar que tengo que convivir con ellos, me causa malestar que vengan a hablarme o peor aún... hablarle yo a ellos. Me causa un malestar peor que me pidan leer o recitar algo frente a la clase, es terrible. Me resulta un martirio y ahora voy al último año, así que debería estar más tranquilo, pero no es así porque es todo un año más de sufrimiento. No pienso en que es el último año de sufrimiento, pienso en que es otro año más de sufrimiento. ¿Qué tan negativo tiene que ser tu estado para que incluso así no puedas pensar en algo positivo?

El diagnóstico le pinchó a lo que mi mamá ya había sospechado: fobia social. No era nada del otro mundo, muchísimas personas de mi edad lo han de sufrir... es sólo que ellos no han de contar con una Laurélie Bass recién llegada en sus vidas.

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Yo en lo personal no sé mucho de lo que llamamos psiquiatría pero no es como si sea una novela médica esto. Así que si ven algún error, no juzguen, recuerden que hago lo mejor que puedo y que no soy psiquiatra.

Disfruten del nuevo bebé que les traje❤

Anahí x