Complicado es sólo una palabra

Epílogo.

—Por los novios —Channing sonríe hacia nosotros mientras levanta su copa y todos le siguen.

—¡Por los novios! —todos corean.

Laurelié y yo sonreímos mientras ella cruza su brazo y el mío para beber de la copa. Después, todos están invitados a la pista de baile y nosotros aprovechamos para tomar a Murphy en nuestros brazos. Es un niño de tres años que nos tiene encantados mientras corre de un lado a otro y Laurelié está más que feliz de perseguirlo para que no se de unos buenos golpes.

Era el día de nuestra boda, apenas y habían pasado dos meses desde que me gradué de la carrera de Medicina y había entrado a trabajar, pero queríamos estar casados lo antes posible y Laurelié ya tenía todo planeado junto a su madre y la mía, yo sólo colaboré con mi presencia y mi amor por ella. No creo que sea necesario decir que se ve hermosa, más que cualquier otro día en donde deslumbra. Su sonrisa mientras baila con Murphy me trae de vuelta a la vida, pero no el lado de la vida en donde están las pruebas y las complicaciones. Si no, el lado bueno de la vida. En donde está ella, en donde está Murphy.

El niño me sonríe mientras extiende sus brazos hacia mí, así que tomo su pequeño cuerpo y puedo sentir la loción de algodón que Laurelié le pone todos los días. A todos les encanta ese olor y no soy la excepción porque se trata de mi hijo. Murphy era bastante risueño, aunque al principio fue duro, porque a pesar de que éramos rostros familiares para él, dormir en un lugar diferente nos costó tanto en su lugar. No fue hasta que, en una mañana, hace poco en realidad, Murphy se levantó sonriendo mientras llamaba "mamá" a mi ahora esposa.

—Estoy feliz de verlos juntos, Laurelié es la prueba de que ser arrebatada tiene sus ventajas —la risa de Channing nos distrae.

—Nunca sabes cuándo puedes conseguir al chico —ella bromea.

Crystalie viene hacia nosotros con una sonrisa, ahora está dentro de los veinte y está construyendo una relación formal con Channing. Al inicio se armó un despelote cuando se enteraron, pero me alegra que ellos finalmente hayan ido hacia su felicidad. El brazo de Crystalie se enreda junto al brazo de Chan.

—Estoy profundamente enamorada de su hijo —nos dice.

—Murphy nos tiene babeando a todos —admite Laurelié mientras le hace cariño a Murphy en mis brazos.

Channing y yo sabemos que es cierto, las tiene enamoradas. Murphy es castaño y con la piel muy clara, su risa es bullosa y le encantan los dinosaurios.

—Me alegra que hayan podido venir —les dice mi esposa.

—Bueno, no es fácil vivir lejos de la ciudad, pero a mis padres les gusta el ambiente en nuestro pueblo, especialmente a papá. Y estoy segura de que Zach no dejará pronto nuestra casa allí.

—Deja que encuentre a una chica que le guste por aquí y verás cómo se quiere regresar a la ciudad —bromeo. Ella gira hacia Zach, quien está riéndose junto a su mejor amigo en la mesa mientras todos bailan.

—No lo creo —ella murmura.

—De todas formas, estoy tratando de convencer a Baxter para que Crystalie se mude conmigo en un par de meses, porque he comprado una casa —Chan admite como si nada, pero sabemos que cuando la casa viene incluida es porque la cosa es seria.

—¡Dijiste que sería sorpresa! —Crystalie ríe.

Laurelié se pone tan contenta por ellos que es capaz de contagiárselo a todos aquí. Dejo a Murphy en brazos de Laurelié mientras voy a bailar junto a Spring. Se me apachurra el corazón cuando la veo porque ella no es más mi bebé. Es una mujer, y es preciosa como mamá. Gracias a Dios ella no ha llevado un novio a casa todavía y eso me tiene muy contento, no sólo a mí, si no también a papá, Autumn y aunque no lo quiera admitir, también a August.

—Yo sé que cuando ella apenas llegó no la acepté, pero ahora debo decir que no pudiste escoger a mejor mujer para casarte y formar una familia —me dice mi hermana—. Te dio tanto apoyo cuando estabas tan consumido por la fobia.

—Tanto apoyo como el suyo, Spring —murmuro—. Estoy orgulloso de la mujer que eres ahora, incluso tienes el mejor promedio en tu universidad.

—Tú siempre fuiste el mejor incluso con la fobia —ella bromea un poco—. No podía quedarme atrás.

De un momento a otro estoy con cada miembro de la familia, incluso con los parientes de Laurelié. Crystalie saca a bailar a Chan mientras su amiga Leela -la cual aceptamos e invitamos por educación- sonríe para ellos. Parece una persona agradable, pero ella, por alguna extraña razón, siempre busca incomodar a Zachary Lawler. Spring en estos últimos años se ha llevado bastante con Zachary como buenos primos y con el mejor amigo de Zach, Kai.

Todos bailan y todos festejan, veo como August se divierte comiendo chocolate de la mesa dulce del salón. Mi padre trata de despegarlo de allí, pero August se rehúsa a hacerlo.

Laurelié me invita a bailar junto a Murphy y me les uno, robándole un par de besos en el acto. Ella hace su mejor esfuerzo con su vestido largo y pegado al cuerpo, color blanco. Mi madre se lleva un momento a Murphy para que podamos estar un rato a solas, incluso cuando estamos entre la multitud. Hace ocho años yo no me hubiese imaginado celebrando mi matrimonio con la mujer de mi vida en medio de tantas personas.

—No tengo palabras para agradecerte todo lo que has hecho por mí, Laurelié Bass.

—Con que me soportes en el matrimonio, me basta —ella bromea un poco. Pasa sus manos por mis hombros y luego entrelaza sus manos en mi cuello—. Estamos casados, tenemos una bonita casa y tenemos una familia... estoy más que agradecida con la vida.

—Todavía falta la luna de miel, no te olvides de eso —nos reímos—. Porque Venecia debe lucir hermosa cuando estás en ella.

Ella toma mi mano mientras gira su cuerpo como un paso de baile. La amo tanto, tanto que a veces me cuesta creer que se puede llegar a amar de esta manera. Años atrás me hubiese asustado la magnitud de mis sentimientos, pero ya no soy ese Nathan. Ahora tengo veintiséis años, superé la fobia, estoy casado y tengo un hijo. Es más de lo que un día imaginé.

—Te amo —le digo.

—Te amo también, Nate. Te seguiré amando incluso cuando las cosas sean complicadas.

—Complicado es sólo una palabra.

Ella sonríe mientras vamos a buscar a Murphy, en medio de personas que nos han apoyado y de decoraciones casi navideñas que Laurelié eligió para la decoración del salón.

En medio de todo eso, sigue siendo ella y yo... la sigo amando.

Y se acabó, muchísimas gracias por apoyar esta novela, espero no haberlas decepcionado.