¡I Hate You! But... I love you.

10.

-¿En que piensas?- pregunto Ezra sacándome de mis pensamientos.

-En nada- dije con la voz algo triste.

-En tu chico ¿verdad?- dijo agachando la cabeza.

-Yo... si un poco- dije agachando la mirada.

El se acerco a mi y me alzo la cara, la cual ya tenia algunas lagrimas corriendo por ella; seco mis lagrimas y me abrazo.

-Yo, me siento impotente con esto, porque no se que hacer para ayudarte a que lo olvides- dijo preocupado

Me soltó y siguió hablando.

-No me gusta verte así, me da coraje y me duele, quisiera poder hacer algo- dijo

-Estas haciendo todo, te estas convirtiendo en un amigo... Y ahora es cuando mas lo necesito Ezra- le dije mirándolo a los ojos

El me miro fijamente y sonrió.

Narra Ezra.

Desde que lo vi entrando al bar, llamo mi atención, sentí algo tan raro al verlo, no pude evitar hablarle...

Ahora, estoy caminando con el a su casa, y voy a negar que sentí algo de miedo cuando me contó su vida, pero vi sinceridad en su mirada... Y vi que el tampoco a sido aceptado por la sociedad como yo, solo que el fue valiente y se abrió paso por el mismo y por algún momento trato de encajar y no se dejo... No como yo que siempre me e ocultado de todo y voy con la cabeza abajo.

Cuando llegamos a su casa, entre, me dirigí a sentarme en el sillón, el tomo el teléfono y escucho demasiados mensajes de voz de un amigo, sentí un poco de celos pues el sonreía al escuchar su voz.

Luego fuimos a la cocina y yo trate de hacerlo reír, y lo logre pero de repente el se quedo pensando y le pregunte que en que pensaba, el me dijo que nada...

Yo sabia que era en su novio o la persona que quería, me dolió y agache la cabeza.

Le pregunte si era en el, y me dijo que si.

Agacho la cabeza, supuse que estaba llorando o por hacerlo y le levante la cara, le limpie las lagrimas y le di unas palabras de aliento, y tenia ganas de decirle qué me gustaba, pero es muy pronto...

Mire sus ojos, y sentí algo... Algo que no había sentido, sentí tanta profundidad en ellos y estaba seguro que me quería perder en ellos. Me podía tirar al precipicio siguiéndolos y no me importaba nada mas que seguirlos viendo.

Me quería perder realmente en ese paraíso de sus ojos, luego mire su boca y sabia que el besarlos seria como probar la gloria, esos ojos azules claro, podrían ser mi salvación.

Me estaba enamorando, fue amor a primera vista.

El también me veía, y sonreía, se sonrojaba y eso me ruborizaba a mi también, el pensar que se apenaba por mi.

-¿Que pasa Ezra?- dijo sonriendo

Mi nombre en su boca y con su voz se escuchaba tan bien, lo que provoco una sonrisa en mi.

-Nada, solo que me gusta pasar tiempo contigo, ¿Te puedo decir Oswald? Es que me gusta ese nombre- dije cambiando el tema

-Dime como gustes Ezra, cualquiera esta bien- sonrió

Le devolví la sonrisa, y termine de cocinar.

fue a poner la mesa y yo ya había servido y estaba preparando mi plato y tome un envase con lo que supongo que era salsa, era entre roja y rosa. Le comente a echar.

Oswald regreso y me dijo riendo

-¿Que haces?-

-Echándole salsa a mi comida, es que me gusta en picante- dije confundido

-Eso no es salsa- dijo comenzando a reír mucho.

Abrí mis ojos y deje de apretar, mire el plato y tenia cachos de fresa.

-Mierda- dije y fui a cambiar el plato.

Escuchaba su risa y eso alegraba mi vida.

Regrese y comimos, el era tan bueno, me encantaba hacerlo reír.

En sus ojos se hacia tarde y me olvide por completo del reloj.

Ya eran las 11:00

-No puede ser- dije, me levante del sillón y tome mi chamarra

-¿Que ocurre?- pregunto Oswald haciendo lo mismo.

-Ya son las 11, y debo ir a mi casa aun- dije con un poco de tristeza

-No, ya es muy tarde... ¿Por qué no te quedas y ya mañana te vas- dijo amable.

En mi mente pasaron muchas imágenes no tan sanas, el y yo en una cama, besándonos, tocándonos.

Agite la cabeza y el dijo

-¿No?-

-No, no solo estaba agitando la cabeza, y a tu propuesta claro, me vendría bien- sonreí después de decir eso.

-Bien, siéntate de nuevo... Veamos una película- dijo feliz...