18. (Mini Capítulo)

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-Son muy buenos amigos ¿Entonces?-dijo Ed sacando de sus pensamientos a Oswald.

-Bastante- dijo Oswald.

-Bueno pues, que mal entonces que se halla molestado, lo lamento Robin- dijo Ed agachando la cabeza.

-No fue tu culpa Edward-

-Si lo fue, te vi con el y no pensé en como se sentiría tu amigo.- agrego El mas alto.

*VARIAS HORAS DESPUÉS*

Ya eran las 5:00 pm aproximadamente.

Edward Nygma y Oswald Cobblepot, fingiendo ser Robin Taylor se habían despedido y cada quien había tomado su camino a casa.

Después de una larga explicación del porque no podía ir a casa de Robin, Ed acepto verse otro día.

Ed, después de casi un mes de lo que le paso a Oswald aun le hacia mucha falta y le Extrañaba demasiado, pero ahora conociendo a una persona idéntica a el físicamente se sentía mejor... Pues al estar con Robin imaginaba que era Oswald el que estaba a su lado.

Narra Edward Nygma.

Llegue a mi departamento, sonreía.

-Hay Oswald, como quisiera que estuvieras aquí, me parece una muy rara casualidad de la vida que este pasando lo mismo que con Kristen ¿Lo recuerdas?- Dije

-Lo recuerdo- dijo una voz desde el fondo de la habitación.

-¡Ahh!- solté un grito de espanto -Que haces aquí, pensé que te había sacado de mi Mente-

-Ya vez que no-, jaja- dijo Oswald Algo burlón

-Te Extraño tanto, con tu cabello negro, con tu caminar extraño- dije mirando al suelo- No es lo mismo ver a Robin... Y el soñar estar contigo de nuevo-

-Creo que cada día estas tan loco- dijo Oswald o mas bien su fantasma de El.

-Te extraño- dije Dolido.

Espere respuesta de el, pero cuando voltee a buscarle ya no estaba.

Estas visitas inesperadas de el, me revuelven todo.

Estas últimos días, me han confundido mucho, en verdad yo creí que era Oswald... Pero no.

Mi corazón Estaba destrozado. Hoy fui en la mañana a ver a Oswald, y le conté sobre lo que vi, le pedí disculpas por irme el día anterior tan repentinamente.

Lo extrañaba demasiado, pero sabia que tenia que seguir adelante sin el. Me recosté en la cama. Y me quede profundamente dormido.

*AL OTRO DIA*

Desperté por el sonido de mi teléfono era la alarma. Me metí a bañar rápido pues era tarde ya.

Acomode mi ropa en el sesto de ropa sucia. Deje mis lentes acomodados en el mueble.

Abrí el agua caliente Exactamente a la mitad, y el fría un cuarto.

El agua salió a la temperatura que me gusta, me moje el cabello durante un minuto, y tome el shampoo,

eche un poco en mi mano, y comencé a tallar en circules... Un, dos, tres, cuatro. Y otra vez un, dos, tres, cuatro. Y así hasta que talle toda mi cabeza , enjabone el zacate, y te talle el cuerpo.

Salí de bañarme, y me seque rápido. Me puse la toalla en la cintura bien atorada, mientras buscaba un traje.

Mire los colores, azul fuerte, azul marino, azul rey, negro, negro opaco, negro brilloso, verde, verde esmeralda, verde brilloso, verde pasto. Ah...

-Hoy me pondré Azul Marino, ¿Pero cual? ¿Rallado o liso?- dije

Tome el Liso, ya estaba planchado y con la camisa y la corbata que ya tenia elegida.

Me lo puse, Me cepille el cabello y lo acomode al mismo lado que siempre lo ponía.

Me mire en el Espejo. Me veía tan apagado... Tan correcto como siempre lo era.

Me quite el Saco y lo avente a la cama.

Busque en mi armario hasta encontrar algo que no fuera formal.

Tome una playera negra con letras, una gorra negra y un pantalón verde militar.

Me lo puse y me vi en el espejo... Me sentía bien. Aunque me veía diferente.

Sonreí en el espejo, y me quite los lentes... Los deje ahí y salí cerré la puerta.

¡I Hate You! But... I love you. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora