49.

144 15 2
                                    

Narra Edward.

Desperté abrazado de Angélica, estaba confundido... Hace un rato le dije que quería estar con ella, y en realidad no pensé en lo que quería con Oswald o mas bien siento por el... Pero ahora no puedo echarme para atrás.

Ella es bonita, y dulce. Y Me gusta pero es Oswald quien en realidad tiene mi corazón.

Me levante de la cama, fui hacia la cocina y prepare algo con las primeras cosas que vi.

Escuche desde la cocina un sollozo. Y fui al cuarto.

Ahí estaba Angélica con las manos tapándose la cara, estaba llorando.

Me conmovió verla así.

-¿Que pasa?.

Ella me miro, y me abrazo fuerte.

-Pensé... Que te habías ido como los demás.- dijo entre sollozos.

Sentí un nudo en la garganta.
-No seria capas de hacerte eso.- seque las lágrimas de su cara. -Vamos a desayunar.

Nos fuimos a la mesa y serví lo que hice.

Comimos muy alegres, nos dábamos miradas seductoras.

Terminamos de comer y me despedí, debía ir a trabajar.

-¿Nos Vemos al rato?.

-Si quieres...- Le di un beso en su mano y me di la vuelta.

Maneje veloz a mi casa para bañarme y salir a mi oficina.

No era un criminal, tampoco era un tipo de traficante, era mas bien un cobrador... Si había deudas yo me encargaba de que seas pagadas, si necesitaban un trabajo como eliminar a alguien que estorbara mis hombres y yo nos encargamos de cualquier molestia y crecimos día con dia hasta ahora tener un puesto y poder en la gente de Gotham.

Hoy podía ser un rival digno de Oswald o cualquier tipo de Gotham.

Llegue a la oficina y entre.

-Señor Acertijo, tenemos bastantes trabajos hoy. - menciono uno de mis hombres.

-¿Como cuales?.

-Deudas atrasadas, una dos tres ¡Cuatro!, Aterrorizar a Mmh Diez personas-

-De acuerdo, empezamos con las deudas- extendí mi mano en señal de que me diera los datos.

-Valla, Primero esta... Ofrecen la mitad del dinero si logran que pagen... Ve tu y esos tres hombres de ahi-

**********
Pase la tarde firmando papeles y recibiendo cheques de pagos.
No podía concentrarme, en mi mente estaba Oswald principalmente, temía por alguna tonta razón que pensaría si yo tuviera algo con Angélica. Y por otro lado me gustaba pensar en que podría causarle celos y se diera cuenta de que soy yo a quien ama.

Mi celular sonó sacándole de mis pensamientos.

*inicio de llamada*

-¿Si?-

-Hola Ed, quería ver si cenamos juntos.

-Buena idea Angie, paso por ti a las...-Mire mi reloj- A las 7:30 estaré en tu casa.

-De acuerdo, Te mando un besito.

-Gracias, aquí lo recibo linda.

*Fin de llamada*

Creo que lo mejor es intentar las cosas con alguien más y ver que pasa.

Termine los papeleos, y la mitad de los trabajos encargados.

Salí para casa de Angélica.

Estaba después de 10 minutos manejando afuera de la casa.
*inicio de llamada*
-Estoy abajo linda.

-voy para allá- se escuchaba emocionada.

-Bien, te espero aquí- Quite mis lentes y talle mis ojos por él cansansio
*fin de llamada*

Cerré mis ojos, para descansar un poco.

Me quede dormido.

No se exactamente cuanto tiempo paso, supongo fueron unos cuantos minutos.

-Ed- dijo con voz triste.

Abrí mis ojos y la mire.

-Disculpame Angélica, vamos- Me acomode en él asiento.

-Vamos, entremos.

Me gusta que entienda bien, y me cuide, me procure.

Entramos a su casa, o departamento. Me llevo a su cuarto y me acosté en la cama.

Ella hizo lo mismo y me acaricio la cabeza hasta quedarme dormido.

Desperté y ella me estaba abrazando.

-Buenos Dias Eddie- dijo tierna.

-Buenos Días Bonita.

-¿Te parece si salimos a desayunar?- preguntó tomando un mechón de cabello mio.

-Bien solo me visto.

Ella se arreglo y salimos.

Fuimos a un restaurante común, pedimos sopa y pollo.

Estábamos comiendo y ella me coqueteaba.

-Ed- esa voz me hizo sentir electricidad por todo mi cuerpo.

Me gire para verlo, venia con Ezra.

-Oswald, Que sorpresa - Hice un ademán de felicidad.

En él fondo lo sentía, pero no podía dejar que vieran que si lo hacia.

-¿Que Haces por aquí? -Preguntó mostrando una sonrisa fingida.

-Supongo que Comiendo, es mas que obvio

- Que sorpresa que sea en mi restaurante

-Perdón, ¿Tu restaurante?- No podía creerlo.

- Si, mi nuevo imperio... Toda la cadena de estos restaurantes me pertenecen
-Oswald, Ya- Ezra lo tomo del brazo.

-Fue un gusto- sonrió y entraron una oficina.

-Parece que no le alegró mucho verte aqui- Dijo Angélica mientras movía con la cuchara su sopa

Al parecer ella no sabia de lo que Oswald sentía por mi.

-No Linda, pero terminemos de comer y largemonos de aquí.

Terminamos de comer y pedí la Cuenta.

Me la entrego Oswald.

-Espero que hallan disfrutado su estancia en mi restaurante- Sonrió falsamente.

-Si, Vamos Amor- dije levantándome

Él abrió la boca al escuchar a la Palabra amor.

Salimos y nos fuimos.

Narra Oswald

Después de un día ajetreado, con firmas de papeles y depósitos, compre una cadena de restaurantes, había bastantes, uno aquí en Gotham, dos en New York. Uno mas en San Francisco, y en New Jersey.

Era una gran oportunidad para salir de él negocio de crimen.

Llegue a la casa en la noche y Ezra ya estaba dormido.

Me gustaba verlo dormido.

Bese su frente y me recoste a su lado para dormirme.

Desperté antes que él, como siempre.

Le pedí que me acompañara a ver él nuevo lugar y él acepto.

Entramos y me encontré a alguien que no quería ver...

Ed.

¡I Hate You! But... I love you. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora