Capítulo 24

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Esteisy

Me fuí corriendo a mi habitación, nunca en mi vida me he sentido tan humillada, ¿por qué hoy tenía que estar desvelada y con ganas de hablarle?, encima de todo me encuentro con semejante escena. Me quedo parada mientras pienso detrás de mi puerta, cuando siento unos toques en la misma y la voz de Yeremy decir mi nombre...

-Esteisy. Por favor ábreme tengo algo que decirte.

-No tenemos nada de que hablar, tú tranquilo. Le respondo con lágrimas en mis ojos.

-Por favor, claro que tenemos algo de que hablar desde hace tiempo, es solo que no hemos encontrado el momento adecuado para hacerlo,  por favor confía en mí.

No me resistí, quería que me dijera lo que sea que me iba a decir, y más si era que tenía una relación con Marina la hiena y quería que solo fuésemos amigos. Abro suavemente la puerta y me encuentro con esos hermosos ojos marrones, me toma de la mano y saca un pañuelo de su bolsillo.

-Prométeme que confiaras en mi. Me dice dulcemente.

Yo afirmo con la cabeza, una vez hecho esto me coloca el pañuelo en los ojos vendándolo para que yo no vea nada.

Toma mi mano y cierra la puerta de mi habitación, siento como me carga en sus brazos y no dudo en preguntar mientras se comienza a mover por la casa dirigiéndose no se a que lugar.

-¿Qué haces?, le pregunto.

-Shshshs, me manda a callar, tu prometiste confiar en mi.

No me quedó más remedio que callarme y obedecer. Sentía sus brazos fuertes al rededor de mis rodillas y espalda, mientras que yo sin poder ver nada me refugiaba en su pecho.

Pase así algunos 10 minutos así, mientras que él seguía caminando sin decir media palabra. La verdad es que no me sentía incómoda, sinó todo lo contrario, me sentía sumamente protegida y no se por que.

Yeremy

La bajé de mis brazos sin quitarle mi pañuelo, se veía tan hermosa con su pijama larga de dormir, era lisa completamente, color negra que resaltaba su hermosa piel.

-Esteisy. Se que lo que viste hace algunos minutos no fue lo más agradable del mundo, pero quiero que sepas que ese beso no significó nada y nunca significará nada. No te mentiré que hace mucho al rededor de dos años tuvimos una relación, pero ella me engañó con otro y simplemente se olvidó de mí, ya después de ahí dejé mi interés por ella, solo vive para ella, es una arrogante egoísta que no le importa que te caigas frente a ella, mejor se ríe antes de darte la mano. Lleva muchos años diciendo que cambiará su forma, pero lo único que hace es empeorar, por eso la quiero lejos de mi...

Le expliqué mientras tomaba su mano y aún no le quitaba el pañuelo.

-Esteisy, me gustaste desde el primer momento en que te vi, sentí que todo cambió en mi y desde entonces solo quiero tenerte cerca. Me encanta tu sonrisa, cuando te tengo cerca mi corazón se agita a mil por hora sintiendo como si se me fuera a salir.

Le coloco su mano en mi corazón mientras palpita rápido;  quería que sintiera cuan fuerte estaba. Lo más extraordinario es que no sentía miedo. Ya no. Ví como se le dibujaba una sonrisa en su rostro quería hablarme pero no la dejé.

-Cuando me enteré de que estabas desaparecida, estaba a punto de enloquecer y más que te llamaba y no contestabas, lo peor de todo fue cuando me dí cuenta de que en realidad nunca saliste de tu casa por culpa de ese cabeza de huevo.

Mi madre se dió cuenta de lo que sentía por ti, y no sólo ella sinó todo el mundo. Me gustas y quisiera que me dieras una oportunidad. Le digo mientras paso mis manos por sus brazos y le retiro el pañuelo esperando por una respuesta dejándola ver la hermosa sorpresa que había mandado a preparar. Hace mucho que he estado planeándola, pero nunca llegaba el momento indicado. También se que a esta hora de la madrugada podría resultar algo muy comprometedor, pero de igual manera romántico. Estábamos parados dentro de un corazón hecho con bombillas de muchos colores, las cuales mis hombres pegaron en el centro del jardín donde se encontraba la piscina 2.

Enamorándome De Ti NuevamenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora