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—Deja de llorar, odio que llores y lo sabes —Muerdo mí labio, y cuando me disponía a limpiar los rastros de lágrimas, él alza su mano derecha, colocando la en mí mejilla, y la otra también.

Con sumó cuidado limpia esos rastros en mis mejillas, su esta fruncido y puedo sentir él viento soplar en dirección opuesta a mí, sus manos frías hacen que mí piel se relaje, cuando ya limpio mí rostro sus manos bajan a su pecho para cruzar sus brazos, yo suspiro y le sonrió.

—¿Qué haremos ahora?—Preguntó uniendo mis manos al frente mío, este lugar parecía un bosque de película de terror, da miedo.

—Hablaremos, recuerda que tengo que decirte algo importante —Él desvía su mirada, observando a su izquierda, Oh Kamisama bendito, ¿me dirá lo que espere tanto tiempo? Estoy nerviosa, mis manos sudan, rápidamente las limpio en mí pantalón.

—Entonces hablemos —Le sonrió, él gira su rostro y ahora que la luz de la luna nos alumbra puedo ver sus facciones, más fuertes, esta más alto, antes eramos de la misma estatura, ahora es más alto que yo, no tanto pero es una diferencia.

—Bien, vamos —Descruza sus brazos y pasa por mí lado, rápidamente muevo mis piernas hasta estar a su lado, ambos caminamos en silencio, las hojas secas suenan a cada paso quedamos, yo observo todo, árboles viejos y grandes, alto también, sus ramas son fuertes.

Suspiro y ladeó un poco para poder ver lo de reojo, esta serio, ¿estará nervioso? Suspiro y observó al frente, hay un lago por lo que alcanzo. ver, el agua refleja la luna, y hay una roca enorme, no puedo aguantar mí asombro, jamás había visto este lago.

—Nunca había visto este Lago —Mí asombro es evidente cuando me detengo, él hace lo mismo, siento su presencia a mí lado.

—Porque cazan a los que intentan venir aquí —Tragó saliva, ¿cazan? ¿me mataría acaso? No, él no lo haría, por inercia me alejó un poco de su lado, Vegeta gira su cabeza observando me.

—Bulma, yo no te haría daño, y lo sabes, aquí nadie había venido porque los lobos los cazan pero como estoy acá contigo, no lo harán —Al decir la primera oración había nostalgia en su rostro, y me sentí muy estúpida.

—Lo siento Vegeta, ¿podemos acercarnos?—Intenté sonreír, él asintió.

Ambos volvimos a caminar hasta él lago, llegando a la gran roca que queda a la orilla, miró al frente, como los árboles rodeaban todo él lago, es un paisaje natural, quería sentir la brisa, así que me quite mí chaqueta, al hacer lo Vegeta se acerco y se sentó sobre la roca, yo lo imité, sentando me a su lado, su pierna rozo la mía, y me sentí nerviosa.

—Vamos, dime —Él asintió.

—Pues, ya sabes que siento todo esto, pero tuve que hacer lo —Yo asintió, estoy entusiasmada —Pero ahora necesitó un favor tuyo, y es de suma importancia, por eso te escribí, porque no puedo volver a la cuidad y que me vean, todos creen que morí —Mí esperanza, mí ilusión, todo cayo a un posó sin fondo, mí sonrisa se disminuyó, y él dolor creció en mí pecho.

Continuará..

Pobre Bulma.💔

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