Infiltrada entre Vampiros

capítulo 30

No sé cómo explicar todo lo que sucedió hace tan solo horas, todo pasó de manera tan rápida que no me dio tiempo para asimilar las cosas. Todos estábamos charlando de manera tranquila, estaba a punto de contarle a los demás sobre mi nueva "relación" entre Mila y yo, estaba esperando sus reacciones pero antes de que todo comience, antes de que abra la boca para decir algo... fue cuando todo sucedió.

Horas atrás

Caminaba de un lado a otro pensando y pensando sobre la noche anterior, cuando oficialmente Mila de una manera repentina y sorpresiva expresó lo que siente por mí; ella fue sincera, jamás creí que ella haría algo así, la verdad pensé que me tomaría bastante tiempo lograr que esto pase pero ella lo hizo posible de una manera tan fugaz, con palabras que sé que salieron de su corazón, me transmitió una ternura que no pensé ver en ella y luego su sonrisa, fue mi parte favorita, su sonrisa radiante, bella, perfecta y la que selló ese hermoso momento después de aquel beso.

Olvidé por completo hablar con Max, además cuando regresamos él ya no estaba; ahora en la tarde reuniremos a todos para poder contarles lo que pasó, lo que sentimos y lo que comienza entre la Rubia y yo, estoy consciente de que a algunos no les va a agradar la noticia pero por una vez en mi maldita vida quiero ver el paisaje desde otro ángulo, no quiero ver desde su perspectiva y tan sólo por esta vez quiero ver desde la mía y hacer algo por mí mismo, quiero intentar algo con Mila, así sea que su padre sea un cazador que luego quiera mi cabeza o porque a Erica, Wade, Cam, Jean o a cualquier otra persona no le agrade Mila; ella comenzó y lo acepto, comenzó con el pie izquierdo, no nos agradó a ninguno de nosotros pero al final hasta yo caí rendido ante su belleza y rudeza, algo contradictorio pero ella puede manejarlo a la perfección, el punto es que aunque suene egoísta o mal, haré lo que mi corazón dicta, siempre lo he hecho pero esta vez será por mí mismo.

Salgo de mi "habitación" carpa, hoy mismo nos iremos de aquí, volveremos a nuestro antiguo hogar ya que esta zona no es la mejor para los niños; todo cambiará ya que tenemos algunos tratos con grupos cazadores, sólo es una tregua, luego concluiremos nuestro plan y al final cualquiera de nosotros podrá tener la cabeza del Líder de adorno, obviamente yo estaré completamente excluido de esa lista donde todos quieren la cabeza del psicópata, tampoco soy un sádico y mucho menos quisiera ver la cabeza de un loco observarme en las noches.

Veo y algunos ya han comenzado a desarmar las carpas, yo pienso hacerlo de una vez pero antes camino hasta donde se encuentra la Rubia que me observa con una sonrisa amplia y de brazos cruzados.

- ¿necesitas ayuda? - pregunto y ella niega.

- puedo sola o acaso no crees en mis habilidades - dice en tono pregunta mientras alza una ceja, río y niego.

- sinceramente creo en tus habilidades de defensa pero no estoy seguro de tus habilidades desarmando carpas - respondo viendo cómo ha estado luchando y al final se ha detenido, al parecer la señorita no es buena en todo y no puedo evitar burlarme por eso, he descubierto que su ego es demasiado grande y también su punto débil.

- Matty puedo sola, o acaso crees que puedes hacerlo mejor que yo - su tono desafiante y burlón me hacen sonreír.

- soy el mejor en todo, claro que puedo rubia - ella ríe mientras achina los ojos.

- vaya, luego la egocéntrica soy yo - comenta - pensé que ya no sería tan sólo rubia - espero a que continue, sé que quiere decir pero prefiero que ella misma lo diga - pensé que sería tu rubia, pero bueno mientras más libertad... - se encoge de hombros, río y niego rápidamente, verifico que nadie esté cerca ya que no deben vernos en estos tratos tan comprometedores hasta que les digamos, espero que no se lo tomen tan mal.