Mila
No sé por cuanto tiempo permanecí inmersa en las profundidades de la oscuridad, la soledad y el frío que me congelaba hasta lo más profundo de mi ser, aún así no sentía miedo, no sentía tristeza ni coraje, estaba vacía por dentro. Pero aún así sabía que estaba viva, podía escuchar el ligero y débil latido de mi corazón, como un pequeño martilleo, breve y corto, cada vez más ligero; Fue ahí cuando sentí el calor envolverme, el frío se desvaneció y ahora el calor llegaba, sentí sus labios sobre los míos, sorprendentemente cálidos o tal vez yo estaba tan fría que sus labios eran tibios para mí, poco a poco volví al mundo, aquel infierno del que no podría escapar, no si aún estábamos en guerra, con mi hermano al mando y mi padre desaparecido. Abrí los ojos y lo primero que pude ver fueron sus ojos oscuros, él me besó y me trajo de vuelta, y si se lo preguntan… No fue Matt quién lo hizo.
Si no Max.
Con su mano rodeó mi cintura y me ayudó a levantarme, me mostró una media sonrisa y me invitó a caminar lentamente hacia su auto. Me negué.
- ¿qué haces aquí? - pregunté abrazandome a mí misma a causa del frío de la noche, admito que no logro tener las fuerzas suficientes para discutir o pelear pero Mila Wells nunca se mostrará débil aún así estandolo.
- recuerda que te ayudé y sigo haciéndolo, sólo ven conmigo.
Niego nuevamente, él se acerca a mí pero yo retrocedo.
- también recuerdo muy bien que estabas del lado de Peyton, que piensas acabar con los cazadores y seguir con toda esta batalla - me acerco lentamente hacia él, demostrandole que no me siento intimidada - a pesar de haberme golpeado la cabeza tengo muy buena memoria.
Él suspira pesadamente, da un paso hacia adelante y luego me observa directamente a los ojos, parece estar desesperado, impotente y sin saber que hacer con su propia vida y yo estoy realmente en la misma situación. Puedo ver la impotencia en sus ojos, el coraje, el hecho de querer hacer algo y que todo salga mal; muerdo mi labio inferior.
- Max… por qué todo es tan difícil - digo en tono pregunta, estoy cansada.
- así es la vida, nada es fácil - responde.
Se supone que debo estar alterada, el líder intentó asesinarme pero sólo logró dejarme inconsiente, no tengo idea de dónde rayos esté Peyton o que esté haciendo… dónde estará Matt, son tantas cosas pero ahora sólo quiero detenerme un poco y pensar, desahogarme, descansar de todo esto.
- Mila, esto no va a estar bien…
- creeme lo sé, todos estamos en problemas y tengo muy claro que muchos saldrán heridos o peor. - suena muy pesimista pero es la verdad.
Max me observa de una manera penetrante, y asiente lentamente dándome la razón.
- lo que sucede es que… no me refería a eso.
Luego de un tirón me acerca a él y sin previo aviso sus labios están sobre los míos.
No tengo idea de cuanto tiempo pasó, no me dió tiempo a reaccionar, el mantiene su agarre firme hasta que puedo mover mi brazo y apartarlo de un empujón, su mirada arrepentida no se hace esperar y se planta en su rostro, yo por otro lado no digo nada, ahorro todos mis insultos y sólo subo al auto dejando a Max de pie, me observo en el espejo y puedo notar el calor que ha subido a mis antes pálidas mejillas ¿qué rayos me pasa? Ahora sin duda alguna necesito ver a Matt.
Max llega a mi lado, me enderezo y luego de unos minutos trato de hacerle entender que esto no tiene que pasar otra vez.
- ¡¿qué rayos te pasa Max?! - exploto, golpeo su pecho molesta, llevo mis manos a mi cabello irritada - ¿cómo piensas decirle esto a Matt? Porque si no lo sabes, yo lo amo, estoy con él y no pienso cambiarlo por nadie.
Mis palabras son directas, firmes y duras, pero no puedo permitir esto, es decir, eso estuvo demasiado mal y no sé cómo decírselo a Matt.
- lo siento… sólo que cuando estabas inconsiente… yo… solo quise besarte ¿ok? Estuvo mal lo sé, no volverá a pasar.
Río sarcástica - obviamente no volverá a pasar - me acerco a él - ya que si lo vuelves a intentar serás hombre muerto - lo amenazo, él asiente, me incorporo en mi asiento - más te vale que no olvides, que soy una cazadora - él me observa confundido y algo dolido, me limito a mirar al frente.
Luego un recuerdo fugaz llega a mi mente, me siento mareada, confundida y sólo recuerdo algo, más bien alguien, Brett.
- mi hermano… - murmuro - debo buscar a mi hermano, también le tendieron una trampa.
- no puedo ir contigo - se encoge de hombros - lo siento pero él y yo no nos llevamos muy bien, ya me entiendes.
- enserio, no me sorprende - molesta bajo del auto, volteo por última vez - no es por nada Max, pero… Matt no es un cobarde, como tú.
Sin decir algo más cierro la puerta con fuerza, del suelo recojo mi arco y flechas, y me adentro al bosque en busca de mi hermano.
Matt
- caminaba sola por la noche, había salido de fiesta y estaba muy ebria - ríe - todo estaba borroso y no tenía ni idea de donde estaba mi auto, pero luego una silueta apareció y me atacó tan rápido que no me dió tiempo para gritar, la verdad soy diferente a otros vampiros que creen que por el hecho de ser seres sobrenaturales son mounstruos, yo tomo mi fuerza y mi habilidades como un regalo, no todos podemos tener esta suerte - murmura - puede parecerte irónico recordando el hecho de que en tiempo atrás fuí una cazadora, ahora sé lo que se siente ser cazado - murmura.
La luna nos ha acompañado en esta caminata tan tranquila entre Peyton y yo, hemos conversando mucho y ahora puedo decir con seguridad que es una chica no tan mala, sólo se defiende como todos nosotros, asiento ante su historia.
- bueno - murmuro.
Luego dejo de caminar al notar algo, dos cuerpos entre las ramas secas, observo a Peyton y sin esperar nos acercamos, descubriendo que ambos están gravemente heridos y al verlos también los reconozco.
Brett y Sleyter.
Holaaa hermosas❤
Aquí les dejo un nuevo capítulo :3
Espero que les guste♡
¡Nos leemos pronto!
Besos y apapachos♡
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Infiltrada entre Vampiros
VampirSECUELA DE LA 1era y 2da TEMPORADA DE ADOPTADA POR VAMPIROS -Todo es diferente ahora... -Ni siquiera podemos ocultarnos... - esta vez es diferente... - somos nosotros contra ellos... Nunca pensamos que alguna vez pasaría esto, que después de tantos...