Aria no pudo pegar un ojo toda la noche. Su primera vez no había sido tan maravillosa como todas las revistas de Cosmopolitan lo describía. No estuvo mal, pero tampoco fue la gran cosa como ella esperaba.
Trató de relajarse perdida en los tres lunares de la espalda de Q. Los había contado, ya que desde donde estaba acostada no tenía una plena visión de las estrellas, así que decidió concentrarse en los contables lunares al frente suyo.
Necesitaba una ducha larga. No le importaba si volvía a enfermarse como aquella vez que se sentía mal porque Remus, que en ese entonces la tenía ilusionada, se besó con otra chica. Necesitaba un ducha urgente. Su presencia atrás de Q, que dormía plácidamente, ya no era necesaria. Él entendería que ella no podía quedarse allí por siempre.
Cuando se levantó para cambiarse notó aquel terrible dolor en la cadera y las piernas. Apenas podía caminar. Se cambió y lanzó una última mirada a la cama. Fue una suerte, pues así descubrió una vergonzosa mancha de sangre. Con ayuda de magia, lanzó al menos cinco hechizos de limpieza a las sabanas en silencio.
El mapa del merodeador fue de gran ayuda, sin duda, pero se arrepintió de no haber pedido prestada la capa de invisibilidad de James. De esa manera no se hubiera esforzado tanto en pasar desapercibida, pero aún así logró su objetivo: salir de las mazmorras sin ser vista.
El resto del camino, se la pasó en silencio. Serían las... ¿qué? ¿2:00 am? No se sentía precisamente bien; pero había descubierto su nuevo lugar y tiempo favorito. Los desalojados pasillos de Hogwarts en la noche la dejaron entrar en un punto de calma y reflexión.
Aún no había visto su reflejo, pero ya se hacía una idea de lo terrible que se veía. Sus rizos estaban sin duda fuera de control. Sentía los párpados hinchados, ojeras colgando pesadamente bajo sus ojos. Y aunque el anterior día se estaba cuestionando si era lo suficientemente delgada, ahora podía sentir como sus huesos sobresalían su piel. Eso era: un saco de huesos en decadencia.
Nunca había sido una persona que lograba ocultar sus sentimientos y ese día era un claro ejemplo; admiraba a las personas que sonrían cubriendo una crisis existencial.
¿Por que estaba teniendo una crisis existencial? Porque había entregado su virginidad a su novio con la esperanza de responder una duda:
¿Ella también lo amaba?
Y su angustia encontró la respuesta:
No.
Había cometido un grave error al creer que al hacer lo que hizo esa noche lo ayudaría a amarlo. ¿En qué estaba pensando? Incluso podía oír la voz de Lily en su cabeza diciendo constantemente:
Te lo dije.
¡Por Merlin! Había sido una amiga terrible con Lily, debía disculparse con ella enseguida.
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Secrets ☾R. Lupin
FanfictionDónde Aria Kettleburn conoce a los merodeadores y se ve obligada a desarrollar el arte de guardar secretos. [ Harry Potter Series ] [ Remus Lupin ] [ 1975 -? ]