El lunes ya había llegado, entré a la clase sintiéndome mejor que nunca, había dormido cual bebe él fin de semana completo por las tardes lo que había ayudado a recuperar el tiempo perdido, mi celular sonó llamando la atención del profesor
—¿necesita contestar señorita Parker?- miré la pantalla, el nombre de “Ed” apareció y negué apagando el celular, —de acuerdo, sigamos- murmuró y siguió explicando como se llevaba acabo la fotosíntesis, había estado ignorando las llamadas y los mensajes de Ed durante todo el fin de semana donde me preguntaba como me encontraba, ¿no dijo él mismo que mejor?, no había ido a casa y no había entado nada más para acercarse que sus mensajes o llamadas
—Buenas tardes- murmuró una voz que me hizo paralizar, mordí mi labio y me negué a mirarlo, continúe leyendo
—Buenas tardes, ¿puedo ayudarlo?- preguntó el profesor
—Me pregunto si puede dejar salir a la joven… Parker- dijo como si no recordara mi nombre, —La directora la busca- informó y maldije en voz baja
—Señorita Parker, vaya y mañana me entrega su trabajo- dijo el profesor y asentí, guarde mis cosas ya que no tardarían en dar el timbre y sería tiempo del descanso
—¿Qué quieres?- pregunté después de salir y alejarme un poco, sabía que no me llamaba la directora
—Quiero saber si estas bien, ¿Por qué no me has respondido?- preguntó mirándome directamente, —¿tan ocupada estas con tu noviecito que no puedes ni responder un “si”, o un “okay”?- bufó con su mirada llena de coraje
—Ni siquiera voy a responderte porque estoy molesta, no fui yo quien cancelo los planes, si hubieras ido a casa como lo prometiste tu mismo lo hubieras comprobado- dije y me di la vuelta comenzando a caminar
—¡fui!, ¿lo olvidas?, ah claro, supongo que no recuerdas porque estuviste besándote con ese imbécil- protestó y rodé los ojos
—Alexis, Edwardo, su nombre es Alexis- corregí, —y no nos estábamos besando, dios, no lo hicimos, ¿de acuerdo?, además, no solo me refiero a ese día, dijiste que haríamos algo el sábado y el domingo, pero claro, me dejaste plantada- recordé
—¿no se besaron?- murmuró y su ceño se relajó un poco
—¿es lo único que dirás?- negué y me giré, su mano me detuvo y me hizo girar
—¿Por qué no lo besaste?- ¿Qué?, fruncí el ceño y negué
—No entiendo a que viene tu pregunta-
—¿Por qué no lo besaste?, después de que me fui, o antes, no lo sé, ¿Por qué no lo besaste?-
—No es mi novio Ed, y yo no ando besando chicos así por la vida solo porque tengo la oportunidad- dije y me miró como si tratara de analizar algo
—Más sin embargo querías que te besara- murmuró y mis ojos se abrieron
—¿Qué?, dios, no, además, ni siquiera de eso estamos hablando- alegué y comencé a caminar, su mano me detuvo
—Tienes razón, soy un idiota, ni siquiera se porque me interesa, es tu vida y puedes hacer lo que quieras con ella- dijo y sentí una patada en el estomago que me sacó todo el aire,
—Exacto, no tiene por qué importarte- escupí y me giré caminando hacía la cafetería, esperé que me detuviera pero, ¿Por qué habría de hacerlo?, al llegar la mano de Alex me llamó y asentí caminando hacía él, mi bandeja ya estaba en la mesa por lo que agradecí, Ed entro poco después seguido de un montón de chicas emocionadas, él sonrió y se encogió de hombros
