37.

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Después de pasar el resto de la tarde fuera regresamos, besé sus labios y entré a casa, mamá y papá estaban sentados en la sala y cuando me miraron fruncieron el ceño

—¿Dónde estabas?- preguntó mamá y pude percibir el esfuerzo para mantener el control que hacía

—Estaba con Ed- dije firme, él había enfrentado a su mamá por mi, ¿Por qué no habría de hacerlo yo?

—Ya te hemos dicho que…

—No quieren que me junte con él, que no quieren que seamos amigos, lo sé, pero no puedo hacerles caso, no en eso, porque no somos amigos, somos novios, estamos juntos y vamos a estarlo por mucho tiempo- aseguré, los ojos de mamá se abrieron y vi en ellos algo que no esperaba, miedo, no, terror, —lo quiero y él me quiere, y soy feliz a su lado así que seguiré con él, me gustaría tener su permiso pero si no me lo dan no me voy a detener- aseguré y caminé hacia mi habitación, listo, lo había dicho, estaba hecho, suspiré relajada y corrí hacia la cama, me tiré allí y saque mi celular

“Feliz viaje feo, espero tu mensaje cuando llegues, te quiero. ”

“horrible, muchas gracias te avisare cuando llegue, te quiero más. -Al” después de eso me quede plena y plácidamente dormida.

Me desperté con el sonido de mi celular

“¿vienes a desayunar a casa? Pd: no hay nadie. –Ed” sonreí y me puse de pie

“30 minutos y estoy allí” envié y corrí hacia el closet, saqué un par de jeans y una blusa de manga corta con cuello V, un conjunto de ropa interior voló a mi y miré mi celular que acababa de sonar

“15, así que date prisa. –Ed” reí y corrí hacia el baño, 10 minutos después me encontraba vestida, me paré frente al espejo y peiné mi cabello con los dedos, golpeé mis mejillas un poco y sonreí, tomé mi celular y salí de la habitación, en la sala me encontré a luke viendo TV, —¿A dónde?- preguntó y sonreí, —uhgg, no te tardes- dijo y asentí, besé su mejilla y caminé hacia la casa de Ed, quité el seguro sin problema y entré en completo silencio, lo encontré en la cocina preparando el desayuno

—14 minutos- dijo y abrí los ojos sorprendida

—¿Cómo…

—Tu olor- dijo y llevé mi nariz a mis axilas, —me refiero a tu colonia camila, es deliciosa y me he vuelto experto en ella- aseguró mirándome son una sonrisa, me acerqué a él y besé sus labios, —siéntate- señaló la mesa y lo obedecí a prisa, unos minutos después llego con 2 platos y se sentó a  mi lado, colocó su mano sobre mi pierna y besó mi hombro sobre la blusa antes de comenzar a comer, él me daba a mi y yo, bueno, yo también me daba a mi.

—Dios, tu vas a cocinar cuando nos casemos- solté y mis ojos se abrieron cuando me di cuenta de lo que dije, mis mejillas se pusieron rojas y esperé escuchar su risa pero lo encontré mirándome sorprendido

—¿quieres casarte conmigo?- preguntó confundido

—Bueno… no ahora- dije y sonrió, llevó sus manos a mi mejilla y me acercó a él, besó mis labios y suspiro

—He soñado con eso desde que era niño, siempre quise que tu fueras las madres de mis hijos mila, y me hace feliz saber que aún después de mis idioteces quieres pasar el resto de tu vida conmigo- señaló y sonreí

—Te quiero ed- asegure y sonrió, se acercó y me besó de nuevo, una y otra y otra vez más, —¿Por qué me estas besando tanto?- pregunté alzando una ceja, —es decir, no me molesta pero no me suena bien- señalé y suspiró

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