A los 15 años podía presumir de una larga lista de chicos conquistados alrededor de los 20 años. A los 18 años comenzó con hombres sobre los 25 años.
Entonces tomo un poco de seriedad para la universidad donde conocio su primer novio de su misma edad, Light Yagami, un chico maravilloso que aun asi no le hacia sentir plena pero si decente para presentar a su familia.Desde pequeña fue algo coqueta, con un corazón renegado, o por lo menos es lo que se decía a si misma frente al espejo rizando sus cabellos. Siempre odio la inocencia asi que huia de ella, una bebé cazando hombres y esquivando las flechas de cúpido.
-Señor Yagami-Ella decidió buscarlo al salón encontrando con una tentadora caza-No se le olvide es el encargado del proyecto.
Misa Amane, la chica mas sexy de la escuela, vistiendo siempre de negro ropa ajustada, sonrío al proyesor Lawliet, nunca lo conocio personalmente, tampoco es que hablaran de él y si escucho de él fue por Light. Pero estabá feliz, ciertamente no era guapo pero su cuerpo no estaba nada mal, lo escaneo sin descaro guiñandole un ojo mientras se colgaba del brazo de Light saliendo juntos de la escuela.
-Light, amor, ¿me pasas el número de tú profesor?
-Claro, ¿para qué lo necesitas?
-Takada me pidió lo consiguiera.
Llegó a su casa arreglandose para salir, siendo viernes toca salida. Se puso un vestido ajustado sobre la rodilla con tacones azules, una cola alta y un abrigo disimulando con sus padres. Con la figura de una muñeca. Le mando un mensaje a Lawliet citandole en un bar seguido de emoticones de guiños.
La vida le ha dado tantos limones que regala limonada.
-Hola profesor-Saludo sentandose en la misma mesa-Oh, soy Misa Amane.
-Se quien eres-Contesto con una pequeña sonrisa-La chica prodigio de su clase, muy tonta a mi parecer.
-No me importa si crees que soy tonta, en lo absoluto-Sonrío pidiendo una bebida invitada por la casa dada sus visitas semanales de siempre, le acaricio la mano a Lawliet quien no la retiro.
-¿Qué planea señorita Amane?
-No estamos en calidad de profesor y alumna, usted ni me da clases-Se encogio de hombros-¿Por qué vino siendo un número desconocido?
-Vi tu foto.
Ella sonrío coqueta, procedio a inclinarse hacia el robandole un beso que el siguio.
"Vive mientras seas jovén, no vayas persiguiendo el amor", tal vez mal interpreto el consejo que le dieron a sus 14 años, y para esa edad sabía que quería ser o por lo menos aspiraba a ser una perra de chicle, es decir, un chica que no se dejará, pero tuviera a el que quisiera comiendo de su mano y se quedaria pegada en su memoria.
Pasarón dos meses, ¿se enrrollo con Lawliet? Oh claro que lo hizó, continuó con Light de todos modos, no tenía problemas después de todo es la señorita labios de licor, te haces adicto a ella sin importar que sea mala.
Poco después se enteró que su maestro era casado, una lástima pues supo que estaban pasando por una mala situación y ahora vino ella y la terminó de arruinar.Ahora tenia 21 años, metiendose con un profesor de 36 años. Ya había terminado con Light quien andaba con Takada desde hace un año. Ella siguió como siempre, buena amigo de ambos, y "novia" del profesor.
En esos tres años, cupido la tomo distraida.-Te amo Lawliet.
-Tú nunca dices lo que realmente sientes-Le contesto agarrando su cabeza con pesar-Creo que debemos dejarlo hasta aquí.
-¿De qué hablas?-Pregunto Misa confusa-Cree en mi, ¿por qué nunca lo has hecho?
No mentía, suena poco creible pero en verdad se enamoro de él o lo más cercano a ello, por algo ha sido con quien más ha durado, le ha dado más fidelidad de la que le dio a Light, entonces cuál es la causa para que dude de ella, ha dado todo lo que se puede en una relación, considerando es su primera relación seria sin cortar a Light que fue por apariencia.
-Misa, tú sabías que estabá loco por ti, cada cosa que haces me enamora más, eres todo lo que necesito pero no puedo olvidar todas las veces que me has engañado, no soy un jovén, soy un adulto.
-Claro que no-Respondió tranquila acariciando su rostro-¿Engañarte? Jamás se me pasaría por la mente, en verdad te amo, y me duele lo que dices.
-Me hiciste muy feliz, pero no hay nada en ti que pueda seguir amando a pesar de ser tan jovén...una lástima.
-Está bien-Respondió sin mirarle.
25 años y de regreso a la vida de siempre y sin embargo no dejaba de pensar en su profesor, que le enseño a querer, sonaba tonto, aun asi siempre lo supo, no quiso reconocer sus sentimientos más por el hecho de caer en el sufrimiento del amor, pero al final no pudo evitarlo y si bien logro dejarlo pasar enredandose con ciertos caballeros, en su corazón seguía estando Lawliet.
Fumando en un bar con una copa de whisky a lado buscando su proxima presa. La nostalgia le invandio, alcanzo a apagar su cigarro alcanzó a apagarlo, las lagrimas inundaron sus ojos, mientras su boca se abria impactada sin saber que decir, sintio la calidez recorriendo su cuerpo cuando vio a Lawliet entrando al lugar, aun se veía igual a pesar de tener 40 años ya. Si cuerpo se veía poco trabajado pero le pareció igual de atractivo que la primera vez, se levanto de su asiento caminando hacia el, lo abrazó sin pensarlo dos veces. La realidad es que ella consiguió su nuevo número y luego de un tiempo insistiendo consiguió hacerlo ir.
-Por favor, creeme, no he dejado de quererte, abrazame, quiero sentir tus brazos rodenadome otra vez, creeme-Lo miro con las lagrimas inundadas de lagrimas.
-Misa...-Susurro besandole la coronilla correspondiendo el abrazo, la separo al minuto-Tengo algo que decirte.
-¿Qué?
-Me comprometi hace tres años, ahora estoy casado, tenemos un hijo-Mostro su mano con su anillo-Y ella espera otro.
-No conocía tú corazón, solo buscaba regalos para ti, verme bien para ti, pero nunca pense en lo que en verdad querías-Musito luego de un rato-Lo siento, no es lo que debi haber hecho.
-¿A qué viene todo esto?
-Te amo.
Lawliet la miró un largo rato, acarició su mejilla asintiendo en comprensión, tomaron asiento en una mesa para dos, la musica permitió darles la privacidad de hablar.
-¿Cómo fue tú día?, ¿has comido?, ¿estás cansado?-Solto Misa repentinamente-Debi preguntarte eso en vez de pedirte salir a fiestas o de comprar, pero era tan feliz contigo y no pense más que en mi misma.
-No tiene sentido que digas esas cosas ahora, eres jovén, tienes una larga vida por vivir, vivela, tús amigos, Takada y Light me han enviado invitación a su boda, no mires el recuerdo-Se levanto del asiento dispuesto a irse.
-Ha pasado tiempo, incluso ahora, y es por ello que no quería que me clavaran la flecha-Se levanto al mismo tiempo que él-Abrazame una vez, abrazame como si volviese a ser la chica que te hacía reir con solo oir su voz.
El era su todo, ¿por qué nunca se lo hizó saber?, creyo que estaría bien, creyo que las relaciones son mejores con sexo. Lo necesitaba en su vida, no sabía que hacer sin el, su amor, su todo, que tonta fue, tuvó que estar lejos de él para darse cuenta, y no hizó muchos intentos por recuperarlo, ahora es demasiado tarde, ahora es de esa manera
"Te amo, creeme".