Virgin Blood (+18) (AU Death Note L x Light / Vampiros / Licántropos)

17. Cuando insolencia y persuasión van de la mano.

En sus años como inmortal Lawliet no recordaba haber sufrido tanto estrés. Habían pasado varias semanas desde que Light comenzase su vida como vampiro y lo que debería de haber sido un proceso sencillo con el transcurso del tiempo, había terminado siendo una pequeña pesadilla.

Ya de por sí, el japonés era un chico presumido y guapo, que siempre había alardeado de su atractivo. Sin poderes vampíricos simplemente había sido una persona coqueta y humana, ahora era una especie de bastardo de Satanás que se aprovechaba de su reciente poder descubierto: la persuasión.

¡La de cosas que estaba consiguiendo gracias a su sonrisa afilada y esas manos delineando cada trocito de piel expuesto de Lawliet! Ahh... sus jodidas manos y su lengua lamiendo centímetro a centímetro el cuerpo del moreno... Podría haber sido agradable y algo que muchos desearían. Pero Lawliet temía cuando Matt y Mello llegaban con Light casi atado, gruñendo y maldiciendo porque no había podido conseguir sus objetivos cada vez que salía del apartamento. Véase el morder a los incautos mortales que trabajaban en la empresa o abalanzarse como un maldito psicópata contra todo el que se le cruzaba por delante.

Beyond se encontraba en un estado de nerviosismo palpable, porque Light se había convertido en un inmortal con unos poderes muy superiores a los suyos; uno que solía ridiculizarlo a menudo y el que por supuesto, ya no sentía ningún tipo de miedo hacia él. Tuvo que soportar que Near le acariciase el cabello a menudo, intentando consolarlo y echándole en cara burlón que parecía un niño llorón al que le habían quitado algún tipo de juguete. ¡Beyond deseaba retorcer el cuello de ese maldito japonés! A pesar de que su lindo trasero parecía mas firme ahora con la inmortalidad.

Encima y para aumentar su malhumor, Beyond había esperado vengativo que Noir y Nieve huyesen despavoridos ante el nuevo estado físico de su dueño. Algo que curiosamente no había ocurrido. Los gatos lo seguían allá donde iba, tumbándose en su regazo o ronroneando cuando Light los abrazaba y besaba sus cabecitas sonoramente. ¡Estúpidos animales! Para todos fue una sorpresa inesperada que los mininos pareciesen no haberse visto afectados porque ahora Light fuese un inmortal más, llenándolo de mimos y maullando con ternura cuando el chico los llamaba para que acudiesen a su lado.

―Algún día estrangularé a esos estúpidos gatos ― había farfullado Beyond, una de esas noches en las que Lawliet trabajaba hasta muy tarde.

Lo que no esperó fue que Light, presto y sigiloso, se colocase tras su espalda y lo sujetase con fuerza de la cintura, clavándole las uñas. Su aliento frío le rozó la oreja, erizando el vello corporal de sus brazos como hacía tiempo que no le ocurría.

―Ni se te ocurra tocar a mis gatitos o seré yo el que te estrangule a ti, ¿de acuerdo, chico lindo? ― susurró con malicia, mordiéndole la oreja al menor de los Lawliet y lamiéndole la mejilla con tanta rapidez que Beyond tuvo que parpadear confuso, sin saber que mierda estaba ocurriendo.

Light, sonriendo con inocencia, se ató mejor la bata de seda negra que solía usar para dormir junto a sus bóxers interiores, ceñidos con perfección a sus estilizadas piernas. La inmortalidad había esculpido su cuerpo de una manera exquisita, algo que todos habían notado.

Se alejó de Beyond, guiñándole el ojo y adentrándose en la zona del jacuzzi, aprovechando que había conseguido que Lawliet cambiase de lugar uno de ellos para que no tuviese que tomar baños bajo el sol. Aquel astro de luz que ahora lo molestaba de una forma horrible, avivando su malhumor como ninguna otra cosa. Había heredado poderes de Lawliet, claro, pero habían descubierto que la luz solar lo afectaba muchísimo más que a su creador.

Así que relamiéndose el labio con una risa de demonio en la boca, se desnudó para meterse entre las burbujas del jacuzzi, suspirando de placer y sirviéndose una copa de sangre fría que Near había dejado a su disposición. Lawliet no tardaría en llegar al apartamento.