Me levante bastante pronto y con mucho sueño ya que me había acostado hace apenas cinco horas.
Lucia me llamó a las nueve y media para irnos al voluntariado. Terminé de prepararme y salí de casa para que ella me recogiera.— Buenos días— Comentó mientras entraba al coche.
— Serán buenos para ti—. Respondí cerrando la puerta del coche.— He dormido cinco horas,y me da que tú también, pero haciendo otras cosas—Ella rió.
— Que va, solo dormimos y creo que vamos en serio, me ha invitado a cenar con su madre, su hermano y la novia de su hermano. Creo que él... — Dejó de hablar al ver mi venda mientras me quitaba la chaqueta. — ¿Qué te ha pasado?
— ¿Esto?— Pregunté señalando la venda. — No es nada, me quemé con la sartén ayer.
— Normal, no sé por qué cocinas si no sabes— Comentó arrancando el coche y reímos.
Me dolía tener que mentir a Lucia, ella era una de mis mejores amigas.
Veinte minutos más tarde llegamos al Cerro, nos esperaban una hora y media de voluntariado. Dio la casualidad de que coincidimos con los chicos, los cuales iban a entrenar.
— Buenos días señoritas— Comentó Antoine haciéndonos una reverencia, le devolvimos el saludo al francés.
Lucas paso por delante de Lucia y depositó un Casto beso sobre sus labios para después guiñarme un ojo en forma de saludo.
— A trabajar chicas.
— Lo mismo digo, Capi.
— Yan— Lucia llamó al belga que pasó corriendo y este freno en seco. — ¿Han venido las chicas?
— En las gradas están— Anunció antes de irse al campo.
— Buenos días,voluntarias— Lucia y yo nos dimos la vuelta y vimos a Josema.
— Vas tarde, uruguayo— Le dije sonriendo
—Lo sé— Rió— ¿Luego venís a tomar algo con los demás?— Las dos asentimos y él sonrió para después irse corriendo al campo.
La hora y media siguiente estuvimos organizando papeles, guardando conos...
— ¿Vamos ya? — Preguntó Lucia y asentí.
Salimos a los pasillos y justo salían los chicos de los vestuarios ya vestidos.
— Las chicas nos esperan en el bar— Les dije a todos al leer el mensaje que me había mandado Pau hace unos minutos.
Íbamos todos hacia la puerta hablando hasta que Josema me agarró del brazo con delicadeza y tiró de mí.
— ¿Qué pasa?
— ¿Qué te pasó en la muñeca? — Preguntó mirando a tal.
— Nada, me quemé con la sartén.
— A Lucía se lo habrás colado, pero a mí no.
— Es la verdad— Comenté sin si quiera mirarle a los ojos.
— Carla, cuando mentís no miras a los ojos—. Mierda, me pilló— ¿Qué pasó ?
Bufé y me quité la venda con cuidado, sabía que no iba a parar hasta que no le dijese la verdad, y cuando lo vio su cara fue un poema.
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El amor es un arte. (Jose maria Giménez)
FanfictionA ella, una voluntaria normal del club de su vida, y ha hecho muy buena amistad con los jugadores, no sabe lo dura que se le va a hacer la muerte de alguien muy cercano, va a tener muchos problemas, muchas depresiones. Pero siempre va a tener ahí a...