Capítulo 19.

275 11 0
                                    


Llegué al Pent-house, por primera vez el cansancio me invadía todo el cuerpo , sólo quería llegar, acostarme en mi cama y cerrar los ojos, aunque la idea de dormir y darle paso a mis pesadillas , me da escalofríos ; me saqué la ropa hasta quedar sólo en ropa interior , moví las sábanas frías y me recosté , suspiré y cerré los ojos  , más no pude sacarme ese momento de la cabeza.

La manera en como me besaba y me acariciaba , sus labios sobre los míos , rozando nuestra piel, los sonidos que salían de nuestras bocas , sus ojos negros unidos con los míos . Todavía puedo sentir sus labios recorriendo mi cuerpo , casi puedo palparlo, tocarlo de la manera en que lo quería hacer , hasta puedo escuchar su voz siseando o susurrando mi nombre con su ronca y masculina voz que me vuelve loca con sólo escucharlo .

Pero sin duda, lo que menos me dejaba descansar , era la forma en me entregué , lo que sentí y me recorrió en el momento . La sensación tan familiar , me hizo estremecer , me dió escalofríos ya que , tanto tiempo sin sentir aquello hizo estragos en mi interior  y a la vez, la sensación tan nueva que sentí, era una sensación que jamás había sentido y quería que se volviera a repetir .

Pero también estaba esa punzada de dolor , esa punzada de traición, porque sentí algo, algo distinto , algo inigualable , algo que quiero volver a sentir . Y quiero volver a hacerlo , pero no debo, no debo hacerlo , es como si lo estaría traicionando , no puedo romper la promesa que le hice hace ya años, no puedo hacerlo , no debo .

<< Sí puedes hacerlo >> .

No, no puedo .

<< Sí, sí puedes >> .

¿Sí? .

<< No sé, dímelo tú >> .

No juegues conmigo .

<< Sí, sí puedo >>.

<< Lo estoy haciendo >>.

Cállate.
No puedo hacerlo .

<< Sí puedes, claro que puedes, ¿Quién te lo va a impedir? >> . 

Nadie.

<< Exacto , nadie >>.

<< Puedes hacer lo que quieras >>. 

Lo que yo quiera .

<< Pero... ¿Estás consiente de lo que dices? ¿Estás consiente de que piensas traicionarlo? >>.

Pero... Tú misma dijiste que puedo hacer lo que quiera .

<< Claro que puedes, ¿Quién dijo que no? >> .

<< Sólo... Simplemente sentiste algo por aquel hombre de ojos negros >> .

<< Y aunque sólo sea "atracción" , nadie sabe lo que puede pasar >> .

<< Además... Tú también lo sabes>> .

Yo no sentí nada .

<< Lo acabas de decir, querida>> .

¡Deja de jugar conmigo! .
¡Ya basta! .

<< ¿Te digo un secreto? ... Ya lo estoy haciendo >> .

Abrí los ojos y me levanté de allí , el cansancio había aumentado , pero no pensaba quedarme allí , empecé a caminar de un lado a otro , con una mirada encima de mí.

La Jefa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora