Capítulo 28

2.1K 166 2
                                    

—¿Qué haces aquí? — le cuestionó mientras me acerco a él. No puedo creer que esté aquí.

—No lo sé — dice Christian mirando mi vientre para luego alzar la mirada hacia mis ojos —Sofia me llamo — me explica — y cuando me di cuenta ya estaba en un avión camino aquí.

—¿Que te dijo Sofía? — le cuestionó.

—Quiero dormir — no contesta mi pregunta, tomo aire no quiero pelear no me hace bien.

—Bien pues busca la habitación que más te guste o ve a un hotel pero sal de mi habitación que yo también tengo sueño — pasó por su lado, tomo mi pijama y me voy nuevamente al baño.

Terminó de cambiarme y me miro al espejo, después de tantos meses recién se preocupa por su bebé, desde que se fue ni siquiera a llamado una vez.

Mis ojos pican pero me controlo no voy a llorar, salgo del baño y no puedo creer lo que veo.

—Pero que demonios — susurro sin entender.

Christian a alzado las cobijas mientras está sentado sacándose sus zapatos.

—Te dije que te fueras — le digo molesta, camino así él y me paro frente de él — aun hotel o otra habitación — pero él ignora — ¡Christian! — le gritó pero él solo se pone de pie creí que se iba ir pero no.

Se saca la camisa, mierda. Le doy la espalda no quiero verlo así se que no podré controlarme.

—Quiero que te vayas — le digo entre dientes furiosa pero no responde — Christian largo — me giro.

Ahí está de pie desnudo solo usando su bóxer de color negro, mis ojos no pueden evitar recorre todo su cuerpo. Sus músculos, dios lo miro a los ojos.

Mis ojos vuelven a bajar sus labios, deseaba tanto volverlos a sentir. Mi mirada ya no solo me su gran cuerpo si no también aquellas cicatrices  de las que fui culpable.

—No traje nada de ropa — habla — espero no te incomode que duerma así — niego con la cabeza.

—No, duerme como quieras — me alejo de él — voy a otra habitación — me acerco al velador del lado de mi cama y tomo mi pastilla con un vaso de agua — descansa — sin más salgo para ir otra habitación.

Antes que logré abrir la puerta Christian me detiene abrazándome por la espalda.

—No te vayas — me pide. Niego con la cabeza.

—No me hagas esto — le pido — mañana te vas arrepentir y me va doler tu rechazo — una lágrima cae por mi mejilla.

—Solo quiero dormir a tu lado, nada más por favor — me súplica.

Sabía que no tenía que aceptar, que mañana se iba arrepentir y que eso me iba a dolor pero deseaba tanto sentirlo, dormir entre sus brazos. Él me abraza más fuerte y su calor.

Y acepte.

Me acuesto a mi lado y le doy la espalda me cobijo, las luces se apagan siento como la cama se hunde cuando él se acuesta. Se acerca a mí y me abraza, la calidez de su piel se extendió por todo mi cuerpo.

Nos quedamos así  en silencio disfrutando el momento.

—¿Porque? — susurra en mi oído.

—¿Porque, qué? — cuestionó.

—Por que lo hiciste — no otra vez, no quiero pelear no quiero sus malditos reclamamos.

Pero no puedo controlarme.

—Por que soy una zorra — digo con dolor.

—No digas eso — me dice molestó, me río por sus palabras.

—Pero si es la verdad ¿No? — digo molestas mientras hago mis manos en puño.

—Hanna basta — me susurra furioso — no me refería a — se queda callado — a él — Christopher — si no que porque te fuiste ese maldito mes.

—Necesitaba estar sola, entender que habías vuelto — me giro y lo miro a los ojos — que me odiabas, que Christopher me había engañado, que todos esos años habías vivido un infierno por mi culpa — las lágrimas caen — no querías verme Christian.

—No debiste irte — me dice.

—Hubiera cambiando algo — asienta con la cabeza — ¿Qué hubiera cambiado Christian?

—Que yo no dudará que eso bebé es mío — sus palabras me dolieron.

—Tu crees que yo me fui de viaje a coger — trato de controlar mi enojo.

—Estabas con Erik — me dice molestó — te fuiste con él de la fiesta de Sofía, pasaste la noche con él — estaba furioso, me fulminaba con la mirada — y no atrevas a negarlo.

—No lo niego — le digo — me fui con él y pase la noche con él, pero no me acosté con él.

—¡!No mientas! — me grita y se pone de pie rápidamente, me siento en la cama — Dime la verdad, puede ser de él ese bebé.

—¡No! — le aseguro pero sé que no me cree, me pongo de pie y me acerco a él — es tuyo te lo juro — me mira de esa manera que detesto.

—Es mejor que me vaya — va a coger su ropa y empieza a vestirse.

—No te vayas — le pido me pongo delante de él, pero me ignora y se cambia — Christian — le suplico, él se sienta en la cama y se coloca sus zapatos.

—No debí venir acá — susurra para él mismo.

—No te vayas — le pido — te necesito — sus manos se hacen puño, alza la mirada y sus ojos solo había odio.

—¿Qué? No as encontrado un nuevo amante — eso me dolió y mucho, di un paso atrás como si hubiera dado un golpe mientras mi vista se nubla por las lágrimas que se llena en mis ojos.

—Ten una buena noche — le digo antes de caminar pero el me detiene poniéndose de pie delante de mí.

—Hanna lo siento, es que cuando — intenta disculparse pero no se lo permito.

—¿¡Que sientes!? — le cuestionó furiosa — a ver venido o decirme la que realmente piensas de mí — pasó por un lado de él y me encierro en el baño.

Caigo al suelo y rompo en llanto.

Tengo que olvidarlo.

Hanna - El pasado vuelve- (+18).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora