Hanna - El pasado vuelve- (+18).

Capítulo 23

En ese instante me di cuenta del dolor que yo le habia causado, lo que habia sentido al ver aquellas fotos donde estaba Christopher y yo. El dolor tan horrible que le provoque era el mismo que yo estaba siento ahora.

-Hanna - Sofía está delante de mí luce hermosa - veniste.

-Claro que si - trató de sonreír y le doy un abrazo - como iba a faltar.

-Lo siento - me susurra en el oido, me separo de ella mientras la miro sin entender su disculpa - ¿Estás bien? - hace una pequeña señal hacia su hermano.

-Tu tranquila y disfruta de la fiesta - le digo, ella sonrie su amiga la llama - ve disfruta tu fiesta, yo estoy bien - aseguro.

-¿Segura? - asiento dudando se va, regreso a ver a Christian que  se capta de mi presencia, noto que se pone tenso. Dejo de verlo y busco Kathe pero nada así que decido alejarme un poco, del lugar no se como pero llegó al despacho.

No prendo la luz, está claro por reflejo de la luna, suspiró y mis ojos se llenan de lágrimas al recordar a Christian. ¿Quien es esa mujer? ¿Ya me olvidó? ¿Me odia? Que estúpida pregunta, claro que me odia.

Mis manos van a vientre y ahora como se lo digo, querrá escucharme tiene que saber que vamos hacer padres.

-¿Qué haces aquí? - es la voz de Christian, limpio las lágrimas de mi rostro y me doy la vuelta.

-Sofia me - pero él interrumpe.

-Ya sé que te invitó, pero creí que ibas a tener la - se queda callado - como decir sin ofenderte - aún está enojado - creo que eso es imposible no - sonríe - mañana es la cita del divorcio - me quedo fría, no tenía idea - por tu rostro no sabías, es mañana a las tres más vale que estés ahí.

-Tanto te urge - le digo algo molesta.

-Si, necesito estar libre para poder casarme con una mujer que si me ama de verdad - abro mis ojos a no vas poder, duele y mis ojos se llenan de lágrimas.

-¿Casarte? - le pregunto aún sin comprender sus palabras.

-Si, pero creo que no tengo que darte explicaciones - me siento mal, pero aún así me paro fuerte me estoy mareando un poco.

-No tienes - le digo - pero puedo hacerte una pregunta - necesito saber.

-¿Qué?

-¿La amas? - la solo idea de pensar que él amaba a otra mujer me dolia, no dijo nada lentamente se acercó a mí. Sus ojos eran los mismos de antes su brillo en esos ojos marrones, su mano va mi pecho y sujeta el collar que me dió. La ilusión de que todo vuelva hacer como antes me invade.

-Si la amo - entonces jala el collar arrancándole de mi cuello -  no debes usarlo - lo bota al suelo -  no faltes mañana, quiero que salgas de mi vida de una vez por toda - sin más se va.

Caigo al suelo las lágrimas salían de mis ojos una tras otra mientras, dolía y mucho pero es lo que merezco ¿No? Esto es lo que merezco. Levanto el collar del suelo, la ama se enamoró de ella, me olvidó ya no siente nada por mi, cómo podría seguir amándome después de lo que a tenido que vivir por mi culpa.

Todo es mi culpa, todo es mi culpa yo hice que todo ese amor que sentía por mi se convirtiera en odio.

Me sentía muy mal, me dolía la cabeza y me sentía algo mareada, intenté ponerme de pie pero no puede toda daba vueltas. Me quedé ahí por un momento e intenté ponerme de pie nuevamente, me costó pero lo conseguí.

Aún mareada intenté dar unos pasos para salir de ahí, un pequeño dolor en mi vientre hizo que me detuviera en la puerta, mi mano se posa en vientre he intento tranquilizarme esto no se hace bien a bebé, debo calmarme.

Respiró hondo por varias ocasiones una vez que siento que he mejorado un poco continuo caminando, voy directo a la salida tengo que ir a casa y descansar.

Salgo me siento muy mal, bajo las gradas poco a poco pero todo da vueltas y casi caigo al suelo unas manos me sujetan.

-¿Estás bien? - esa voz ¿Erik?.

-Erik - susurro alzó mi rostro y lo miro, siento otro dolor en mi vientre no, por favor no mi bebé - Llévame al hospital, por favor Erik llévame - me dolía mucho.

-Hanna Cálmate, llamo a Christian - niego con la cabeza - ok, te llevo al hospital - me carga entre sus brazos y me lleva a su auto. 

Una vez que vamos en camino el dolor aumenta y sabia que eso no era una buena señal, entonces sentía un líquido entre mis piernas tocó - Estoy sangrando, no mi bebé.

-Cálmate Hanna ya llegamos - me tranquiliza pero no puedo no quiero perder a mi bebé, no lo puedo perder no por favor ya no más.

-Ya no más - digo entre lágrimas - ya perdí a Christian, no me quieres a mi bebe, no mi bebé  no por favor.

-Hanna cálmate, no le hace bien ¿Estás segura que no llame a Christian? - insiste.

-No, no lo llames por favor.

-Esta bien cálmate, ya llegamos - me dolía mucho todo estaba tan borroso, mis ojos empezaron a cerrarse.

(..)

Abro mis ojos mis manos van a mi vientre - ¿Mi bebé?

-Esta bien - es Erik se acerca a mí estaba sentado en una silla - la doctora dijo que todo estaba bien con el bebé, que algunos casos el sangrado es normal - asiento.

-Gracias - se lo agradezco.

-Estube tentado de llevarte al hospital de tu esposo - no este no su hospital - pero creí que traerte a otro era lo mejor - asiento - ¿Están enojados?

-Nos vamos a divorciar - como es que no lo sabe.

-Guau no tenía idea, hace mucho tiempo que no veía a la familia Johnson, sin contar que Christian no es muy cortez cada vez que ve - se encoge los hombro.

-Y que esperabas intentaste violarme - le digo molesta.

-Lo siento quise disculparme y no me dejaron, lo siento estaba drogado no sabía lo que hacía - se disculpa.

-Se que estabas drogado pero aún así te detuviste cuando te lo pedí por eso no te denuncie - le digo con una sonrisa - mi vida hacido un jugo de diversiones, una montaña rusa mi adolescencia fue la mejor amigos, fiestas y mi familia - una lágrima cae - después Carlos me hizo un infierno que jamás podré olvidar por más que lo intente, luego Christopher fue una época de paz, después era tranquilidad y temor días podía dormir tranquila otros no, viví así por años hasta que Christian llegó a mi vida - me quedo callada por unos segundos - me hizo muy feliz, demasiado. Luego creí que había muerto fue un infierno e intenté seguir con mi vida y no sé si fue un error o ¿No? El volver a casarme el de intentar volver hacer feliz, pero ahora estoy pagando el precio - Erik solo m observa  sin entender nada - yo me entiendo - le digo con una sonrisa, ni si quiera sé porque he dicho yo esto.

-Si, debes descansar - asiento.

-Gracias, por todo - le agradezco.

-Es lo mínimo que puedo hacer - dice con una sonrisa. Me acomodo he intento dormir un poco mañana va hacer un día muy duro, demasiado.