Capítulo 34.

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Matt trató de quitarse la jeringa que estaba en su cuello, pero no pudo, sus manos temblaron y la vista comenzó a nublarse.

—Nico, pide ayuda —su voz sonaba cansada.

—Que gracioso hablas, Matt, y que patético eres, ya no hay tiempo de pedir ayuda.

Javier entró a la casa y se encontró con Nico tratando de salir por la puerta de la cocina.

—¡Aléjate de mí! —gritó Nico tomando un cuchillo.

Javier comenzó a reír, pues un cuchillo no era una buena elección contra un arma,

—Tú decides, Nico, ¿Quieres dormir o quieres morir?

Nico sin responder nada, solo se giró y golpeó el cristal de la puerta de vidrio, esta no se rompió, así que lo volvió a intentar, y esta vez si, pero muchos vidrios quedaron incrustados en su mano.

Nico comenzó a llorar, Javier aprovecho el momento para inyectarlo, el chico con la jeringa aun en su cuello se tiro al suelo.

—No quiero morir, no estoy listo, por favor no.

—Nunca se puede estar listo para la muerte, Nico, pero te puede llegar de sorpresa.

—El estará tan feliz, por fin acabará con estos putos y seremos libres.

—¿Libres? —preguntó Javier confundido.

El chico no recibió respuesta.

—¿Quién es el siguiente?

***

Grupo: Curso de inglés.

Camila: Esto es horrible.

Pablo: Demasiado, tú eras sospechosa, por eso ahora estás aquí.

Camila: ¡No digas eso! Yo jamás sería capaz de matar a alguien.

Paola: Eso no lo sabemos, nadie sabe lo que el otro piensa.

Vicky: Tienes razón, pero tampoco es que todos vayan a ser sospechosos.

Amber: Todos lo son, ya lo había dicho.

Luis: Ahora no puedo confiar ni en Vicky.

Vicky: Incluso podría ser Pablo, recuerdo que Paola llegó a sospechar de él.

Paola: En si fue una estupidez, Vicky, era una locura mía.

Vicky: Tal vez tú eres, y cuando supuestamente estás buscando al asesino, aprovechas para irte deshaciendo de personas.

Ana: Como lo hizo con Ana, tú la mataste Paola.

Paola: ¡Eso no es verdad!

Pablo: Váyanse todos a la mierda, y espero mueran por estúpidos, si no quieren hacer nada, solo siéntense en su cama a esperar que vayan por ustedes.

Luis: ¿Me estas amenazando? Wow, Pablo es el asesino.

Alexa: No sé, quizá lo es y por eso no quiso ayudar a Taylor.

Camila: ¿Hablan enserio? No me imagino a Pablo cómo un asesino.

Vicky: Convivimos con un maldito psicópata, Camila, y no nos dimos cuenta.

Camila: Yo sospecharía de Manuel y de María.

Vicky: María está muerta, no cuenta.

Luis: Eso no lo sabemos, recuerda que, si Amber pudo fingir su muerte, ella también.

Vicky: Entonces, ¿Ahora también hay que sospechar de los muertos?

Paola: No, Amber odiaba a María, por eso la mató.

Pablo: No malinterpreten lo que digo, es que me jode demasiado lo estúpidos que pueden llegar a ser, Paola y yo tratamos de ayudar y salen con estas cosas, culpándonos injustamente.

Camila: Entonces es Manuel, él me daba miedo.

Paola: ¿Por qué?

Camila: No sé, igual es medio rarito, yo lo tendría en el primer lugar de sospechosos.

Paola: Yo te invoco, Manuel, responde, sé que estás leyendo los mensajes.

Pablo: Lo está, porque él siempre se opone a querer encontrar al culpable.

Manuel: Estaba camino a casa de Matt.

Camila: Nunca me caíste bien, Manuel, me das miedo.

Manuel: ¿Y por eso soy el asesino?

Camila: Si, por eso.

Pablo: Yo ya no puedo con esto, ha sido una larga semana como para que no tengamos nada de pistas.

Vicky: No lo están haciendo bien, solo intentan evitar muertes, no están buscando pistas realmente.

Paola: Lo intentamos aquel día en la escuela, el profesor lo intento y solo conseguimos que Alejandro muriera.

Pablo: Lo único que sabemos es que Amber le pidió a alguien que matará a María, pero quién es ese alguien.

Vicky: Yo también mataría a María, si fuera mi hermana.

Pablo: ¿Qué mierda dices?

Vicky: Comprendo a Amber, no es la mala aquí, no merece ir a la cárcel.

Paola: ¿Estas bien?

Vicky: Perfecta

Paola: Tu no dirías algo así, y menos defenderías a Amber.

Javier: Ya no busquen pistas, pronto lo sabrán.

Camila: ¿Por qué, Javier?

Javier: ¿Por qué ahora soy de los malos?

Camila: Si, ¿Por qué lo haces?

Javier: Lo hago para sobrevivir, Camila, no quiero morir, mi vida no puede terminar a los 18 años, me falta tanto por vivir.

Camila: También a nosotros, no estés con ellos Javier, yo también estoy asustada de morir.

***

Fuera del grupo:

Amber y Javier se encontraban en casa de Vicky, ya habían hecho el mismo proceso que hicieron con los demás integrantes.

—Debí poner otra cosa, como que me gusta ser azotada o algo así, Paola se dio cuenta que no era Vicky.

—Amber, ¿Tú por qué lo haces?

—¿Hacer qué? ¿Ser su ayudante?

Javier caminó hasta ella con su celular en la mano.

—Si, ¿Por qué? —las manos de Javier ahora estaban temblando pues estaba nervioso.

Amber no respondió nada, tan solo desvío su mirada a Vicky quien estaba en el suelo con una jeringa en su cuello.

Psicópata En WhatsappDonde viven las historias. Descúbrelo ahora