Capítulo 38

12.9K 927 579
                                    

Los chicos del grupo, se encontraban amarrados en el sótano de la casa de María, incluso estaba Raúl, quien hace un tiempo se había salido del grupo.

—¿Felices? —la voz de Amber sonó en el pequeño sótano lleno de polvo y telaraña. —Ahora no están solos, tendrán compañía, aunque no por mucho tiempo.

La mayoría de los integrantes ya se encontraban despiertos, tratando de comprender como fue que terminaron ahí.

—A mí no me interesan estos estúpidos, solo déjame ir, Amber.

—Ay Raúl, no podrás salir de este sótano con vida, nadie lo hará.

Ari trataba de zafarse de las sogas débilmente, lo único que estaba consiguiendo era lastimarse.

—Amber, tienes que dejarnos salir, por favor, no sé qué mierda ganas teniéndonos aquí —Ari temblaba de frio.

Amber rio ante Ari, y se alejó un poco, trayendo consigo la cubeta nuevamente llena de agua fría.

—Era una tortura que mi madre no pudiera pagar buenos servicios en esta horrible casa, esta agua fría es con la que todas las mañanas tenia que ducharme, era un infierno al inicio, poco a poco, María y yo fuimos acostumbrándonos a no tener nada, no tener lo mismo que ustedes —Amber agacho su cabeza un poco, y prosiguió. —¿Saben por qué ninguno de ustedes supo que María era mi hermana? Yo se lo pedí, le pedí que no dijera nada que nos pudiera relacionar, muchos de ustedes sabían que la rara vivía en esta pocilga, pero no iba a permitir que supieran que también era mi casa.

—¿Esa es tu excusa? ¿Solo por no tener las mismas cosas que nosotros? ¿Por eso nos estas matando?

—No Pablo, solo quiero que entiendan que, si no me importo matar a mi hermana, con quien viví tanta miseria, menos me importará matarlos a ustedes, así que ahorren sus palabras porque no los voy a dejar ir, nadie saldrá con vida de esta casa —la chica cargó la cubeta de agua fría, y se dirigió a Pablo. —¿Quieres un baño, sigues lleno de sangre de Javier?

—Aleja esa mierda de mí, no vas a salir viva tu tampoco Amber, te pasará lo mismo que a Javier y a Milena. No sé qué intentas ganar haciendo esto, ya mejor ríndete.

—Yo ganaré la posibilidad de salir de aquí, esos estúpidos solo eran un uso para acabar mas pronto, Pablo, no entiendes que tu vas a morir y yo no, ¿No te queda claro? Yo podré irme e iniciar de cero alejada de esta ciudad de mierda, y ustedes no.

—Pero eso no es vivir, te vas a lamentar toda tu vida, Amber ayúdanos, ahora que ese imbécil no está aquí, puedes ayudarnos a escapar —mencionó Paola.

Amber comenzó a reír nuevamente, tomo un pequeño tablero de una mesa y lo puso en la pared que estaba enfrente a las sillas.

—Él está aquí, está amarrado con ustedes —dijo Amber riendo. —Por si no sabes, esto se llama estrategia, además es divertido.

Ari, Tyler y Raúl comenzaron a visualizar a todos los que estaban amarrados a las sillas, no podían creer que en verdad alguien de ellos fuera a ser el asesino.

—¿Es un chico?

—Eso ya lo sabes Ari, tuviste una visita de él.

—¡Ay Dios mío! El único que se me ocurre es Manuel.

Amber sonrió y camino al tablero que tenían los nombres de los hasta ahora sobrevivientes.

—¿Para qué es eso? —preguntó Tyler.

—Habrá un pequeño juego —dijo Amber tomando la cubeta y arrojándola a los chicos que aún permanecían dormidos, entre ellos Luis, Manuel y Carlos.

El primero en despertar Carlos, luego Luis.

—¡No quiero morir, ahhh!

—¿Dónde estoy? —preguntó Luis algo confundido.

—Estas a un paso de tu muerte, querido.

***

Flashback:

Amber regreso a su casa, después de tener casi todo listo para deshacerse de su hermana la rara.

—¿Con quién hablabas? —preguntó María.

Amber siguió caminando sin hacerle caso a su hermana.

—¿Era Manuel? —preguntó María nuevamente.

—No te importa.

Amber caminó hasta las escaleras para llegar a su cuarto, al llegar tomo su celular, pues ya tenía un mensaje de su amigo.

Mensajes:

Te amo, Amber, con esto me haces la persona más feliz del mundo.

***

—Si pueden observar, aquí están todos los nombres de ustedes, el juego consiste en que un nombre irá desapareciendo cada cinco minutos —dijo Amber sonriendo. —¿Alguna sugerencia?

Todos comenzaron a mirarse entre sí, pues al parecer ya no había nada que pudieran hacer para salvarse.

—¡Yo tengo una sugerencia! —gritó Ari. —¡Quiero que el primer nombre sea el de Manuel!

Ari observó a Manuel con algo de odio.

—¡Idiota! ¿Por qué yo?

—Manuel, tú eres el psicópata, de eso no me queda la menor duda.

Amber se acercó al nombre de Manuel y lo retiro del tablero.

—No Ari, yo no lo soy, tienes que creerme, ¡Amber, por favor no! —Manuel comenzó a gritar mientras jaloneaba la cuerda con la cual estaba amarrado.

Los chicos observaban a Manuel con algo de lastima, en la mente de algunos les parecía buena idea, ya que Manuel encabezaba la lista de los sospechosos.

—Todo indica que eres tú, lo siento.

Amber comenzó a acercarse a Manuel, con un gran machete en una de sus manos.

—Esto será divertido.

—¡Amber, por favor no! ¡No lo hagas por favor!

Amber mientras sonreía golpeó a Manuel fuertemente en la cabeza, la cual se partió en dos en la parte superior.

La sangre comenzó a resbalar por el rostro de Manuel.

—Lo mismo que yo hice con María —dijo Luis mientras comenzaba a reír. —Seguiré amando la expresión que hizo María cuando el cuchillo entro en su cabeza.

Flashback:

Mensajes:

Luis: Te amo Amber, con esto me haces la persona más feliz del mundo.

....................../........................

Hola, espero que les haya gustado el capítulo.

¿Ven? Ana tenía razón.

Psicópata En WhatsappDonde viven las historias. Descúbrelo ahora