Escribe en mi corazón

Capítulo 24. Mariposas a la vista...

Empezó la reunión en la suite del Sr. Yang, estaban todos los chicos de la banda, parte del Staff y algunos ejecutivos. La reunión giraba entorno a la culminación de la gira y el regreso a Corea. Estaba al tanto de todo y seguía escribiendo..a estas alturas me llevaba bien con todos, el staff, bailarines y ejecutivos...

Se programó la presentación para tres fechas más en Japón, la demanda era exitosa y así culmino la reunión.

Hasta mañana - me despedí mientras Young bae salía por la puerta y la cerraba.

Ji yong bostezó y levanto las manos.

...-Creo que yo también me voy.

-¿Tan pronto? -pregunté, extrañada, poniéndome de pie

- Pero si todavía es temprano, aceptaste que te entrevistara ahora..- dije un tanto nerviosa..

-Bueno, es que tengo cosas que hacer y tengo de prepararme - dijo - mirando su reloj..

-¿Qué cosas? - de pronto, me acordé de lo que dijo Seungri y la invitación de Kiko..Un leve calambre empezó a revolverme el estómago.

-No me digas que tienes una cita ¿verdad?

-¿Cita? Ah, sí, una cita - me dijo en tono burlón.

-Debiste haberme avisado ayer, habría programado la entrevista con Seung hyun....Bueno no te preocupes.....solo me confirmas antes..por favor - dije ... volvía esa sensación de fastidio que me atormentaba....

-....¿Te importaría si fuera a una cita? -Ji yong acercó su cara para mirarme de cerca, mostrando su sonrisa torcida.

Se la aparté, enfadada, empujándola con una mano, y me crucé de brazos.

-Para nada -mentí..

-No me digas que estás celosa - soltó

Empecé a sentir mis mejillas calientes...

-No... no estoy celosa -mentí, girando la cabeza hacia el otro lado. Ji yong movió su cuerpo hasta que tuvo mi cara a la vista.

-Sí, sí que lo estás, reconócelo.

Sin saber por qué, me puse tan nerviosa, que me empezaron a temblar las manos. Un temor invadió mi mente como un meteorito. El temor a que sospechara algo que ni yo misma entendía, que no podía explicarle, y la reacción que se produjo en mi cerebro fue el de ponerme a la defensiva.

-¿Y por qué iba a estarlo, Ji yong? - le dije, tranquila. ¡No digas tonterías!

-Vamos, Sarah. No me digas que no te molesta, aunque sea un poco, que vaya a una cita - insistió, algo enfadado.

La palabra cita retumbó en mi cabeza, produciendo eco, y me rechinaron los dientes.

- Si quieres, puedes ir a tu cita tranquilamente. Por mí, no hay ningún problema...como si nunca salieras con todas las chicas -le dije, enojada- ¡No me importa lo más mínimo!

-¿Ah, sí? - ahora parecía molesto - Pues no iba a ir, pero ahora puede que vaya.

-¿Pues vete.. ya? - le grite, mirándole furiosa - Llegarás tarde, y no querrás que se te adelante otro y te la espante, ¿verdad?

Mis palabras rabiosas hicieron que el rostro de Ji yong se enojara aún más. Sus cejas se arquearon tanto hacia abajo, que produjeron una profunda sombra en sus ojos.