Capítulo 37. Amenaza

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Ji yong


- ¡Esta noche es el último concierto! - anunció Daesung - ¿Qué deberíamos hacer para celebrar?

- ¿Dormir? - preguntó Seung hyun. Daesung le tiró una almohada.

- Podríamos ir a los clubes - sugirió Seungri.

- ¿Què te parece Ji yong? - me preguntó Daesung.


- Claro, suena genial - murmuré. Young bae miró por encima de mi hombro - ¿Qué estás leyendo? - preguntó.


- Un borrador del comunicado de prensa sobre mi relación con Sarah - respondí - pasando la página - Yang lo envió antes.


- ¿Cuándo se llevará a cabo? - Preguntó Seung hyun.

- Lunes - respondí serio.


- No suenas muy emocionado - comentó Seung hyun.


Suspiré fastidiado - Es un poco ... no se - dije - arrojando el comunicado sobre la mesa - Pusieron dos fotos mías y ninguna de ella. Uno pensaría que estoy anunciando una nueva fragancia o algo así .


- Entonces, crea fotos para ella - sugirió Young bae - ¿Has hablado con Sarah?


- Un poco, pero no quería que tuviera que preocuparse por eso - dije tocándome la cara.


- Esto se trata tanto de ella como de ti - dijo Seung hyun con una mirada sospechosa - Da la casualidad, que tengo una idea.....


Horas más tarde...



- ¿Una sesión de fotos? - Sarah se sorprendió .


Asentí - Sería una excelente manera de presentar nuestra relación con los medios. ¡Además será muy divertido!


Mi preciosa frunció el ceño - No lo sé, Ji yong. Nunca he estado muy cómoda en un estudio.


- Podemos hacerlo como quieras - le prometí - Podemos hacerlo afuera, o aquí en el hotel, lo que sea que te parezca bien. ¿Qué piensas? - esperaba ansioso que aceptará.


Sarah puso su cara de reflexión - Está bien - cedió - pero sin burlas - Me reí por su carita graciosa y me dio un puñetazo en el brazo -¡Hablo en serio....Ji yong! - Insistió.


- Está bien, lo prometo - me reí entre dientes - Vas a estar hermosa - la cogí por la cintura y la abracé..




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Miré mi reloj y suspiré - ¿Dónde están? - me pregunté - mirando hacia arriba y hacia abajo del vestíbulo de nuevo. Las puertas del ascensor se abrieron y Ji yong salió, solo.


- ¿Dónde está el fotógrafo? - pregunté - Pensé que vendría contigo.


Ya que saldremos a la ciudad, le pedí que se quedara un rato - respondió Ji yong, deslizándose sobre sus gafas de sol - Él va a hacer algunas tomas sinceras de nosotros antes de ir al parque. ¿Qué te parece?

Asentí y salimos juntos del hotel.
Se sintió bien estar de vuelta en Seúl, el aire de principios de la primavera me hacía sentir despierta y alerta. La enorme ciudad ya se sentía como en casa y comencé a relajarme, tomando a Ji yong del brazo mientras caminábamos por la acera. Se había vestido muy casualmente, luciendo una chaqueta con capucha, una camiseta estampada y un pantalón pitillo negro.
Con su gorro y gafas de sol se mezcló perfectamente en la multitud - Esta es la salida más tranquila en la que hemos estado - comentó - mirando a un grupo de chicas que no nos prestaban atención cuando pasábamos.


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