34. La Carta A Papá Noel

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Narra Emily

Después, cuando llegamos a casa, papá y mamá nos habían preparado unas cartas para escribir a Papá Noel. Nosotros nunca lo habíamos hecho.

Al final sólo cogimos una carta y la escribimos entre los dos, mientras pápa, mamá y Molly nos miraban desde la cocina con una sonrisa.

Después de un ratito, al fin acabamos la carta:

Querido Papá Noel,

Andrew y yo nunca te habíamos escrito. Todas las navidades nos quedábamos en la central, allí todo era triste, no nos daban abrazos, solo nos teníamos el uno al otro.

Ahora tenemos todo lo que queremos, unos papás, una "hermana", un perrito, una primitiva pequeñita, y una gran familia. Tenemos todos los abrazos que queramos y somos muy felices. Queremos que los tengamos siempre a todos. Queremos que Sarah sea muy feliz, como nosotros lo somos ahora. 

También queremos que tú, Papá Noel, seas muy feliz y que tengas cuidado cuando vayas en el trineo. Dales muchos besitos a todos tus renos y también a Mamá Noela. Te dejaremos algo de comer para que tengas energías.

Así que lo único que queremos es que todos los niños de este mundo tengan una familia como la nuestra, porque eso querrá decir que son los niños más felices del mundo.

Gracias Papá Noel,

                Te quieren Andrew y Emily.

Cuando acabamos de escribirla, Andrew la metió en un sobre y se la dimos a mamá. Ella estaba en el comedor y, junto a Molly y papá, habían sacado un montón de cajas. Andrew, Rex y yo, nos asomamos a una de ellas y vimos que eran, ¡los adornos de Navidad!

Narra Nathan

Ya era momento de decorar la casa. Cuando los nenes, Molly y Rex, que no podía faltar, estaban sacando las cosas de las cajas, Stana me dió la carta que habían escrito los pequeños. Yo la dejé en la cocina.

Después de una media hora, Stana venía de la cocina con los ojos llorosos, ninguno se había dado cuenta, salvo yo. Así que me acerqué a ella y volvimos a entrar en la cocina.

–¿Que te pasa cariño?–Le dije.

–He leído la carta de los pequeños.

–¿Y que ponía?

Después de decir aquello Stana me pasó la carta, la leí y, guau. Yo también estaba llorando. Cerré la carta y la dejé en la encimera.

– ¿Cómo pueden ser tan maravillosos?–me preguntó Stana.

–No lo sé. Estoy sin palabras, son increíbles.

–Somos tan afortunados. Esta es su primera navidad con una familia y vamos a hacer que se lo pasen en grande, se lo merecen y haremos que sean sus mejores navidades.

–Si.

Salimos de la cocina y lo único que nos salió hacer fue correr hacia los peques y abrazarlos como nunca.

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¿Os ha gustado el capítulo?
Espero que sí, a mi me encanta y ni es porque sea mi historia 😃

Gracias por leer!! 😘

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