¿Y si adopto?

27. Llegó el mércoles

Narra Stana

Cuando me desperté vi que Nathan ya no estaba en la cama, pero enseguida supe donde estaba, y no pude evitar reírme.

Nathan estaba tirado en el suelo con Andrew encima suya, y Emily le estaba pintado la cara con mi maquillaje, Nathan estaba guapísimo con el maquillaje 😂.

Después de que Nate pusiera pucheros, conseguí quitarle todo el maquillaje, desayunamos y nos fuimos de camino al set.

–Chicos, ahora vamos al trabajo de los papis y allí va haber mucha gente que os quiere conocer, eso sí, cuando estemos trabajando habrá que portarse bien, ¿vale?

–Vale Papi-dijeron al unísono.

Allí, la primera que nos esperaba era Tam, que estaba ansiosa por conocerles.

–¡Hola!-le dijo Andrew.

–Hola pequeños, yo soy Tamala, pero me podéis llamar Tam. Soy amiga de vuestros papis.

Ellos, como siempre hacían cuando acababan de conocer a alguien, le dieron un abrazo a Tam, y puede ver como la cara de Tam se llenaba de ternura.

Después, entramos al estudio y, Andrew y Emily iban corriendo, deseando verlo todo.

Nos encontramos con Susan, y se comportó como una verdadera abu, les empezó a dar piruletas y achuchones, simplemente le adoro.

Después vimos a Molly:

–¡Stana! Que bien, por fin habéis llegado-dijo Molly corriendo hacia nosotros.

Los peques le dieron un abrazo, y es que ya le habían cogido mucho cariño.

–¿Queréis que me los lleve a que conozcan a Jon y Seamus mientras os  visten?-dijo Molly.

–Vale-dijo Nathan.

Nate y yo nos fuimos a vestuario y peluquería. Cuando acabamos nos dirigimos al set y allí...

Nos encantó la escena.

Seamus llevaba a Andrew a caballito y Jon llevaba a Emily, y llevaban un tubo de plástico en la mano con si fueran espadas. ¿Pero como tenemos unos amigos tan maravillosos?

Finalmente, la batalla la ganaron Emily y Jon. Lo más gracioso es que estábamos todo atentos a ver quien ganaba.

Mientras grabábamos, Marlowe les dejó jugar con algunas cámaras y "ayudar".

Cuando acabamos de grabar estuvieron con July un rato, mientras nosotros nos cambiábamos. Después nos unímos a ellos, y Emily no paraba de preguntarle a July que era lo que tenía en la tripita.

–Pues aquí tengo una nena como tú-le dijo July tocándole la nariz.

–¡Que guay!-dijo Andrew.

De repente los dos se bajaron de las sillas, como leyéndose la mente, y se apollaron sobre la barriguita de July, que ya se notaba bastante, ya que estaba de 7 meses. Todos comenzamos a reírnos al ver la cara de concentración de los peques al intentar escuchar a la nena que tenía dentro.

Se ve que Sarah dio una patadita, porque se inmutaron y se empezaron a reír.

En un momento, me pareció ver pasar a Molly por el pasillo llorando, así que le dije a Nathan que iba a verla.

Cuando entré en el pasillo, vi como ella entraba en su camerino, y efectivamente estaba llorando. Llamé a la puerta:

–¡Dejadme!-dijo llorando.

–Molly, soy Stana.

–Lo-lo siento, pasa.

Entré y vi que estaba tumbada en el sofá, así que me arrodillé en el suelo, delante de ella, apartándole el pelo de la cara.