Príncipes En Fuga

Capítulo VII

Me doy vuelta de aquí para allá en mi cama, intentando en vano dormir. Desde la última vez que vi a Dafne, hace ya 1 semana, no he logrado comunicarme con ella. No responde ni mis llamadas ni mis mensajes, simplemente me deja en visto, y recibido con suerte. ¿Quién entiende a las mujeres? Honestamente no he tenido mucha experiencia intimando con ellas, desde pequeño la única mujer cercana a mi ha sido mi madre pero, ella no cuenta. Eso sí, a lo largo de mi vida he tenido que lidiar con el tipo de mujer trepadora, la típica mujer irritante e inicua, las superficial chillona insoportable, que solo se fijaba en mi título para que mágicamente me transformaba en el hombre de su vida. Tratar con ellas es todo un arte, debería dar clases o recibir un premio por ello. 

En fin, al fin y al cabo aunque hubiera querido, no podría haber tenido nada con nadie. La inflexibles normas de Condell, prohíben rotundamente relaciones no autorizadas y sin promesa de matrimonio, en lo que concierne a los miembros de la familia real en sociedad. Son normas anticuadas, lo sé pero, tampoco me han afectado en los más mínimo, cosas como el amor para mi son innecesarias, una fachada, un eufemismo creado por el ser humano para ocultar su verdadera naturaleza, quien  sabe, a lo mejor todo eso es una mera ilusión. Lo sé muy bien, ver el maldito matrimonio de mis padres ha sido más que suficiente. Los maltratos del Rey hacia mi madre, sus infidelidades, sus golpes, tanto así que mi madre perdió la memoria. Yo tendré que caer en lo mismo, un matrimonio forzado bajo una fachada: Amor.

En fin, aunque parezca de otro mundo, debido a las costumbres y leyes de mi país jamas he estado con una mujer. A mis 25 años soy virgen hasta de los labios. Bueno, lo era hasta hace 1 semana. Perdí mi primer beso con Dafne, ella y yo intercambiamos nuestros "primeros besos". Debo decirlo, fue una experiencia única, las sensaciones, las vibraciones, las emociones y las miles de descargas que provocó UN solo beso de Dafne son algo que hasta este momento siento recorrer por todo mi cuerpo, últimamente ese calor se ha estado concentrando en un lugar del que no me siento orgulloso de que esté, mi pequeño Marcus no sabe aún que ese beso no se repetirá, porque lo que es mi cerebro, lo comprende perfectamente. 

Cuando por fin logro conciliar el sueño, abro los ojos de un momento a otro, miro a mi alrededor y por la claridad que hay en la habitación deduzco que ya amaneció. La noche me pareció demasiado corta, pero descansé lo suficiente como para tener la mente trabajada. Me siento poseído por una fuerza sobrenatural que hace que de un brinco salga de la comodidad de mi cama hacia la ducha y posteriormente el ropero. A una velocidad increíble me baño, visto y salgo del edificio. 

No sé a donde voy, que estoy haciendo, que o quien estoy buscando. La posesión que anteriormente sentí no se marcha y guía mis pasos hacia un lugar desconocido, en realidad soy consiente de cada paso que doy pero, solo del movimiento, el tiempo se convierte en algo abstracto, siento que pasa por sobre mi sin siquiera darme cuenta de su continuidad. Hasta que mis paso se detienen y por fin después de mucho tiempo recapacito y me caigo en cuenta de todo lo que me rodea. Estoy en una especie de plaza, no, más bien de un parque, uno muy grande a decir verdad. El sol está en lo alto del cielo, los aspersores están encendidos, los perros corren, los niños juegan, los vendedores cantan una sinfonía anunciando su producto y las parejas alrededor son felices. Es el cuadro perfecto para algún sitio idílico. 

Siento mi estomago rugir, el no haber desayunado algo antes de salir me está cobrando factura. Tanteo los bolsillos de mi pantalón, con la esperanza de que en mi tenencia me haya acordado de tomar mi billetera o algo de dinero. En mi bolsillo delantero de lado derecho, encuentro un billete rosado algo arrugado, me acerco al primer puesto de comida que encuentro y pido lo más común del "Completo italiano" No sé que será un completo pero si es italiano, debe ser bueno. Espero alrededor de 5 minutos y me entregan una salchicha en un pan alargado con varias cosas encima. Palta, tomate, y lo que yo supongo que es mayonensa. No se ve para nada mal por lo que lo muerdo. ¡Delicioso! No sé que tiene de italiano pero está muy rico.