~ Capítulo 35: El 'monstruo' escondido en las sombras de mi calabozo ~

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Contra toda expectativa aquí les traigo el capítulo 35 de esta webnovel. La verdad me gustaría hacer que todos aquellos habladores que dijeron que TDG terminaría antes de que esto sucediera no pudieran leerlo. Pero que le vamos a hacer, soy un Dios generoso, la bondad de mi corazón llega hasta niveles insospechados y he decidido perdonarlos. uwu

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[Punto de vista de Roderique]

De algún modo me las arreglé para sobrevivir...

Jadeando y resoplando, miré hacia atrás y vi a los diablillos muertos en el piso. Sólo unos pocos pedazos quedaron después de que los atacara. La batalla fue dura, pero aún no acababa. Sin ningún soldado que me ayudara y torturado por la complejidad de este maze infernal lleno de trampas y monstruos, ahora me encontraba frente a un peligro incluso mayor. Algo estaba entre las sombras ante mí, un terrorífico monstruo permanecía oculto, ¡esperando por el momento oportuno para saltar y abrirme la garganta!

"¡Muestrate!" Grité a las paredes de acero.

Era como si mi propio reflejo se estuviera burlando de mí, señalando mi fracaso con esos ojos acusadores. Eso me enfermaba, pero hice mi mejor esfuerzo por ignorarlo, por mirar a otro lado.

"¡Grrr!" El terrorífico gruñido se mantenía viniendo de aquí y de allá, ahora, este estaba detrás de mí.

Me giré para mirar pero no había nada allí, sólo los diablillos muertos.

¿Cómo termine en esta situación? Sacudí mi cabeza e intenté calmarme.

¿Qué pasó? Me pregunté a mí mismo mientras me recargaba en la fría pared y miraba hacia el techo. Mis dedos se aferraban fuertemente a la empuñadura de mi espada e intentaba recordar que es lo que había pasado en esta última hora.

Después de bajar por la escalera, esta se desvaneció así como así. Mi señor Dankyun no estaba preocupado por esto, pero ahí había algo que lo enloqueció, algo que lo hizo gritar. ¿Qué era eso? ¡Ah, sí! Los cuerpos de las dos exploradoras el'doraws que él había enviado antes que a nosotros para que encontraran este maldito calabozo. Ellas estaban puestas en la entrada como un macabro regalo de bien venida. Uno de los cuerpo estaba empalado y quemado, el otro estaba con la cabeza atravesada y con sus huesos destruidos. Creo que el mensaje burlón que estaba en la pared también tuvo algo de culpa en su enojo. Mi Señor se quedó detrás en la entrada para asegurarse de que ninguno de nuestros soldados se atreviera a intentar huir. Esto nos incluía a sus leales comandantes. Con respecto a las dos mujeres, lo que sea que las haya matado aún estaba dentro de este maze, estaba seguro de eso.

Dejé salir un suspiro y miré hacia mi izquierda y a mi derecha.

"¡AAA!" El grito de un soldado se escuchó en algún lugar, perdido entre los reflejos de las paredes de este maze infinito.

Tragando saliva, me forcé a mí mismo para ir en esa dirección. Más de la mitad de nuestras fuerzas ya habían sido devoradas por la locura de este maze. Diablillos, lobos, ratas, verracos, harpías, trampas, ilusiones y ese monstruo que acechaba en la obscuridad se podían encontrar por todo este lugar.

¡Esto no tiene sentido! ¡Absolutamente nada de sentido! ¡No se supone que un calabozo así de joven sea tan difícil! Grité en mi mente.

"Suspiro..."

Mirando al suelo, recordé las órdenes de mi Señor Dankyun: "Encuentren la salida de este maze. ¡AHORA!"

Después de eso nos dividimos en tres grupos. Todos los tres comandantes de Rango Emperador tomamos caminos diferentes a través del maze y matamos todo lo que estuviera en nuestro camino. Mientras tanto, Dankyun permanecía en la entrada y esperaba nuestro triunfante regreso.

Reencarné como una Academia MágicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora