Hush Hush: Reverse

Daga oscura

Narra Patch

Mis ojos se abrieron en sorpresa y una de mis cejas se elevó hacia arriba, no pude evitar mirar hacia Nora quien me miraba algo temerosa, seguí su mirada para darme cuenta que no me miraba a mí y tampoco a Darla su mirada estaba sobre la pequeña daga azulada en su mano, me moví suavemente metiendo mis manos en los bolsillos de mis pantalones mientras me recargas en el auto y la miraba

-Debo admitir que te pareces demasiado a tu madre... y un tanto a... - reí y moví mi cabeza mientras miraba a Nora quien ahora me observaba con la boca abierta, de cierta manera estaba alegre de poder tener de nuevo a la chica que, si era mi Nora junto a mí, pero estábamos rodeados de tantos enemigos que no sabía si podía confiar en ella siquiera - ¿qué? -Les dije mirándolas- no esperaban que me echará en sus brazos y la abrazarla llorando por la hija que nunca supe que tenía ¿no?

Nora prácticamente corrió hacia darla para retenerla mientras le daba ligeros empujones para alejarla de mí, yo me estaba divirtiendo un poco, o al menos eso creían ellas, claro que quería ir hasta ella y abrazarla, disculparme por dejar que tuviera una madre así y por dejar que toda su vida la viviera lejos de ambos... pero ella no lo aceptaría así y no estaba dispuesto a humillarme.

- ¿Han terminado? - dije cuando Nora por fin pudo hacer que se tranquilizara.

-¡Eres un patán como todos! -grito Darla por encima del hombro de Nora hacia mí y sin poder evitarlo me reí, entonces ella se dejó venir hacia mí, mi vista se enfocó en su rostro furioso y después en la daga que ahora sostenía Nora lejos de ambos, antes de poder siquiera mirarla de nuevo su puño impacto contra mi mejilla y después un par de golpes contra mi pecho, tome sus muñecas con fuerza y gire deteniendo la contra el auto, sus ojos negros me miraban con odio, pero eso era sólo una máscara, bajo el odio podía ver el dolor, entonces cuando por fin se tranquilizó la solté y me retiré un poco frotando mi mejilla.

-Bueno, sabes pelear muy bien... - le dije y miré a Nora quien me miraba furiosa, ella la había dejado a propósito, no sé qué esperaba que hiciera cada parte de mi gritaba que la abrazara, así como que fuera al maldito lugar donde estaba mi hija, la hija de Nora y la tomará de igual manera en mis brazos, pero ninguna era la opción correcta.

Darla se giró hacia la carretera alejándose unos pasos mientras frotaba sus muñecas, pero yo había notado por qué se giraba una lágrima corrió por su mejilla, pero la limpio rápido.

-Tenemos que irnos... ellos están cerca- susurro y se giró caminado hasta Nora, extendió su mano exigiendo que le diera la daga, pero Nora en su sano juicio y por una bendición guardo la daga ella misma, Darla frustrada, camino hacia la puerta del auto para subir, pero me moví más rápido que ella.

- Mi auto, mis reglas, y yo conduzco -ella frunció el ceño, pero terminó subiendo en la parte de atrás, Nora subió en el copiloto a mi lado y suspire conduciendo rápido por la carretera hacia las afuera de la ciudad. - ¿A dónde vamos?

- No planearas llevarlo a la base ¿o sí? -dijo Darla con desdén a mis espaldas, Nora la ignoro y yo le dirigí una mirada severa, no sabía por qué, pero sentía bien hacerlo y ella sonrió un poco al igual que yo, pero sólo fue un segundo antes de que volviera a su habitual cara de gruñona y mirara a Nora - ¡Es peligroso! No podemos llevarlo

-Tenemos que ir por Vee-fue lo único que dijo Nora y podía sentir como todo esto la había cambiado, pero era la forma en la que mantendríamos a todos a salvo.

Di la vuelta y volví al apartamento de Vee, pero apenas llegamos no pude evitar mirar la extraña camioneta aparcada fuera del edificio, algo nada usual al igual que una presencia extraña, baje del auto y me acerque a la entrada al escuchar las puertas del auto abrirse mire a Nora quien estaba a punto de bajar, Darla ya estaba a mi altura.