3. Eleuteromanía.

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Jonas observa detenidamente a la chica. Es idéntica a la chica que dibujó.

La misma mirada,


El rostro,


Incluso el color de cabello...

Ella está a un metro de distancia observando a Jonas con rostro confuso.

Del mismo modo, el chico silencioso se encuentra así mientras revisa su dibujo, encontrándose con el retrato de ella.

Es tal la curiosidad que él siente que no se resiste a preguntar.

—¿Eres ella?

La chica está más aturdida pero después capta a que se refiere con la pregunta que le ha hecho.

Es como si el dibujo fuera un espejo, reflejando claramente su rostro.

Lo primero que ella piensa es sobre si aquel chico la conocía o la acosa, o tal vez ha visto una fotografía suya... Pero ella no acostumbra a tomarse fotografías.

—¿Eres Aurora? —cuestiona Jonas en tono ansioso. Su curiosidad está a flote.

Ella no sabe de qué modo reaccionar. —No, ese no es mi nombre.

Es bastante notorio la desilusión en Jonas.

El dibujo y aquella chica son idénticos, pero no son la misma persona.

Sabe que es mejor no decir nada más, sus suposiciones instantáneas son incorrectas. Claramente, se ha confundido de persona.

¿En serio creí que podría dibujar a una persona y esa persona existiría?

Esto podría ser una coincidencia, una casualidad, pero una de las cosas que él ha aprendido es que las coincidencias y las casualidades no existen, pero las causalidades si lo hacen.

Sin embargo, esto parece ser un error, nada más que una confusión, y Jonas debe...

—Siento esto, al parecer te he confundido.

—Está bien—responde ella a la vez que se encoge de hombros—. Buen dibujo por cierto.

—Gracias —Jonas mira más allá—. Me tengo que ir.

Rápidamente sale del lugar, hasta que en un par de minutos está afuera del edificio con el dibujo en su mano derecha.

La tarde ha empezado, y necesita caminar por cualquier lugar para tranquilizar su mente y para familiarizarse con el entorno.

Cuando estaba en aquellas cuatro paredes pensaba constantemente en si algún día podría caminar libremente, quería sentir el viento en su rostro, sentir frío... Y ahora siente todo esto, pero también está confundido.

No sabe a qué lugar dirigirse, simplemente camina. Pasa el tiempo, siendo primero minutos hasta que pronto es una hora y esto se refleja en el cielo.

Cuando las lámparas que alumbran las calles están encendidas y cuando los anuncios de los establecimientos están encendidos, Jonas está bastante alejado. Es de noche.

Se detiene frente a un parque, más bien delante de una banqueta de color verde situada adelante de un árbol de tamaño imponente.

Jonas es la única persona del lugar desolado y amplio.

Por supuesto que se siente de una similar forma a cuando estaba en esa habitación atrapado. Se sentía solo.

Jonas (Occulta Mea)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora