Catalina:
¡Lo odio!
Max:
Wowowo, cálmate, ¿a quién odias?
Catalina:
A mi profesor de arte, es un hijo de puta.
Max:
No me creo que la pequeña Cat este expresándose de esa manera, me gustaría verte ahora.
Catalina:
Esto es serio.
Max:
Bien. ¿Qué pasó?
Catalina:
Me puso 1.0 en la nota final.
Max:
Has de ser pésima dibujando.
Catalina:
Bueno... no es que dibuje súper wow, pero ese no es el caso. Resulta que se me insinuó, hizo lo mismo con una compañera pero al parecer ella si se dejo... porque iba peor que yo y sacó 9 como nota.
Estoy molesta.
Max:
¿Te quería follar para ponerte buena nota?
Catalina:
Eso dije.
Max:
¡Qué hijo de puta! Ahora soy yo quién está enojado.
Catalina:
Lo que me tranquiliza es que dejaré de verlo en unas semanas.
Max:
No te tienes que tranquilizar nada, Catalina. Alejate de él.
Catalina:
¿Crees qué lo quiero cerca mientras me mira cómo un enfermo pervertido? Además es imposible, tengo más clases con él.
Max:
No vayas. Lo digo enserio, Cat. Ese tipo no se quedará quieto contigo. No cuando dices que te mira todo el tiempo. Habla con alguien.
Catalina:
No es tan fácil, no tengo pruebas para acusarlo, es de los profesores más respetados acá, apenas la tiene contra mi y la otra chica.
Max:
Esto es una mierda.
Catalina:
Ni que lo digas.
Max:
Mantente alejada, tanto como sea posible.
Catalina:
Sí. Gracias.
Max:
Me preocupo por ti, Juancha.
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En línea
Short Story¿Qué puede impedir que te enamores de alguien con quien solo te comunicas a través de mensajes, llamadas o videollamadas? En realidad, nada lo impide. Hoy en día, las amistades a distancia pueden volverse sorprendentemente profundas. A través de con...
