Odiaba la idea de hacer el trabajo de filosofía con Luke, pero no me quedaba otra.
En cuanto pude, salí corriendo de esa aula. La próxima clase que tenía era dibujo y eso es, probablemente, lo único que me entusiasma en esta vida.
Llegué la primera a clase. El profesor ya estaba allí. Me miró.
-Debes de ser la nueva ¿me equivoco?
-No. Soy Max
-Yo soy Rick
Rick tendría unos 30 años, era moreno de ojos verdes y muy alto, como Luke.
-Hoy vamos a hacer dibujo libre- siguió diciendo-. Persona, animal, objeto... pero tiene que ser algo que te defina... impresióname
-Vale- dije sonriendo
-Siéntate ahí- dijo señalando un sitio delante de él.
No me había dado cuenta hasta ese momento, pero la clase estaba prácticamente llena.
Me senté donde me dijo y saqué papel, lápiz y pinturas.
Justo en ese momento apareció por la puerta un chico.-Perdón Ricky... biología
-Anda, pasa Josh- dijo con una sonrisa, sin mirarle
Se sentó a mi lado y cogió su material. Se me quedó mirando. Que incómodo. Le miré y se puso a dibujar.
Lo que yo dibujé fue a una rosa, tirada en el medio de una calle. La intenté hacer lo más realista que pude, y me reconfortó comprobar que lo había logrado con éxito. Me llevó la mitad de la clase hacer las sombras y luces adecuadas, pero aún así acabé antes de tiempo.
Tras acabar mi dibujo, se lo di a Rick, al cual pareció gustarle, y me puse a garabatear en mi libreta.
Miré al chico de al lado. Estaba dibujando a una chica. A mi.Parecía una maldita foto de lo bien dibujado que estaba.
Me quede completamente impresionada.-Dibujas muy bien- le dije. Se sobresaltó
-Oh... gracias... tú también
-¿Porque me has dibujado a mi?-se quedó mirándome la cara
-Porque eres preciosa- me sonrojé
Hasta mi abuela se habria dado cuenta de como se comía con la mirada a el chico de chándal de la fila de al lado, pero me subió la autoestima su comentario.
-Soy Josh... ¿Y tú?
-Max, encantada
-¿Qué tienes ahora?-Miré el papel con mis clases.
-Matemáticas aplicadas- sonrió
-Yo también
De camino nos pusimos a hablar y reír como si nos conociéramos de toda la vida. Llegamos casi de primeros así que nos sentamos juntos.
-Después de esta clase hay cafetería, si quieres puedes venir conmigo y una chica más a comer
-Claro
Antes que estar sola aceptaría hasta comer con un payaso.
En ese momento entró el profesor, y mi ilusión de que me gustaran por una vez las matemáticas se murió por completo al mismo tiempo que se cerraba la puerta.
Cogí disimuladamente mi móvil y mis cascos, puse en Spotify mi playlist favorita y dejé pasar la clase.
Al salir me fui con Josh a la cafetería.
Pedimos unas hamburguesas y nos dirigimos a la única mesa libre. En ese momento tenía hambre, así que no tardé en empezar.Casi todas las mesas estaban llenas. Por casualidad, vi a Luke hablando con un chico y mirándome de vez en cuando.
Una vez le tiró a su amigo patatas a la cara. Me reí y Josh me miró extrañado, pero no dijo nada.
Unos minutos después llegó a nuestra mesa una chica, más o menos de mi altura, con el pelo teñido de rojo y una sonrisa más grande que su cara. Era muy guapa y con curvas.-Hola, soy Valerie- dijo sonriendo
-Yo Max- dije haciendo lo mismo. A parte de sonrisa fácil, era contagiosa
-Bueno, ahora que ya os conocéis...-dijo Josh-. Cuéntanos todo sobre ti
-Mmm... vale... nací en Nebraska, y me mudé de allí a los 15, después me fui a Indiana y estuve allí hasta ahora. Hace una semana que estoy aquí
-¿Cuando es tu cumpleaños?
-El 16 de diciembre
-OH DIOS MÍO, FALTAN TRES MESES PARA TU CUMPLE -exclamó Valerie-. Espero, sólo espero, que invites a tus nuevos mejores amigos- dijo señalándose y señalando a Josh alternativamente
-Oh claro que si- dije riendo. Me gustó como proclamó con esa facilidad nuestra nueva amistad.
-¿Aún mantienes contacto con tus amigos? Los de Nebraska o Indiana.
-No, la verdad... tuve tres amigas y un amigo en Indiana- no tenia pensado hablar de Cathy... ojalá que nunca
-¿Y que pasó?-preguntó Valerie
-Bueno... digamos que ese amigo fue mi novio durante un año y le pareció buena idea liarse con mi mejor amiga días antes de que yo viniese aquí -se quedaron flipando, pero yo seguí-. Y después mis supuestas amigas me dejaron de lado porque "corté con el tío más bueno del insti por una tontería"- dije haciendo comillas con los dedos
-¡Que tío! ¡Y que amigas!
-Si, bueno... después mi ex Cody me venía rogando de rodillas que volviera con él. Y una mierda. Antes me quito los ojos con una cucharilla
-Hijo de...
-Tranquilo Josh- dijo Valerie. Me reí, y ella también, parecíamos amigos de siempre.
-Y vosotros qué... ¿qué sois?
-Amigos de toda la vida, padres casados y ahora hermanastros- y se chocaron las cinco
-¿Y conoces a alguien ya?- preguntó Josh- A parte de estos bellezones, claro- dijo señalando a Valerie y a él. Me reí.
-Si... un tal Luke Abell- dije con indiferencia dándole un bocado a mi hamburguesa. Se miraron un rato- ¿Qué?- pregunté
-Te lleva mirando todo el rato
-¿Y?
-Nunca mira a las tías
-Yo diría que las mira demasiado ¿no?
-Ya... pero no se, es raro
Miré mi reloj. Ya casi era hora para la siguiente clase. Josh se dio cuenta.
-¿Qué tienes ahora?
-Educación física
-Yo también- dijo Valerie
-¿Vamos juntas?-le pregunté
-Claro
-Pues arriba, que ya es hora
Me despedí Josh, el pobre tenía otra hora de mate, y me fui con mi nueva amiga.
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Dos docenas de rosas
Teen FictionChica nueva y chico popular. Típica historia cliché. Aunque esta vez con un giro de 180 grados. Max y Luke no son como el resto. Experimentaron cosas que no se merece nadie. Y sin embargo, experimentarán cosas que todo el mundo quiere.