9. Viaje

25.1K 1.6K 223
                                    

Se supone que esta era la decisión más lógica, segura y correcta.

¿Entonces porque sentía una presión sobre mi pecho?

¿Por qué sentía que un ataque de pánico me dominaría en cualquier momento?

¿Y creía que cometía un gran error?

Ugh.

Luke me había prometido que solucionaríamos la situación con mis padres cuando llegáramos a la Academia. Estaba preocupada ¿cómo tomarían esto? ¿Se los diría yo misma? El señor y la señora Mason se iban a molestar mucho si no me veían en casa cuando llegaran, podrían castigarme aún estando tan lejos.

En fin, ya no quería pensar más en esto.

Los tres nos dirigimos al aeropuerto una vez terminada la charla, un jet nos esperaba.

La famosa Academia estaba ubicada en una isla justo en el medio del Triángulo de las Bermudas, y resulta que su fama se debe a las distintas maneras de protección que tiene nuestro destino para no ser encontrado.

Ahora nos encontrábamos en el pequeño jet privado llamado Cindy (¿qué rayos?), como sea, era elegante, con sus decoraciones en blanco y negro, y bien equipado con asientos cómodos, bebidas y comida. Dylan no paraba ir de un lado a otro tragando lo que se le atravesara, había tomado muy bien la decisión de dejar Edimburgo con nosotros, iba revisando cada cabina, mueble, gaveta, que encontrara, mis nervios estaban a flor de piel ya que como se sabe, el jet era de metal.

Luke se sentó a mi lado y sostuvo mi mano, lo cual no ayudo a relajarme mucho. Pasaba sus dedos sobre mis nudillos y cuando volteaba a verlo me sonreía tranquilizadoramente.

Agradecía haber logrado tomar un baño, porque ahora estaba sudando más que un futbolista.

No tuve tiempo de empacar una maleta, me dirigía fuera de mi hogar, de mi país con tan solo mi teléfono y mi ipod en un bolsillo, ambos sin batería.

Llevaba puesta ropa de Luke, después de una pequeña discusión donde insistí en no usar su franela de Joy Division, (ya que apenas escucho su música y a menos que ames una banda o artista no llevas una camisa de él), termine con sus pantalones negros y una franela de All Time Low, todo me quedaba gigantesco.

- ¿Sabes? - dijo sin soltar mi mano - Cuando te conocí me lleve una gran sorpresa.

- ¿Por qué? - exclame confundida.

Él me soltó y se levanto, fue hasta el final del pasillo, volvió con aquel sobre amarillo que vi en el mueble de su habitación, me lo entregó y tomó asiento de nuevo.

Lo abrí interesada ¿qué era esto?

Las expresiones dejaron mi rostro cuando comencé a leerlo.

«Aria Elizabeth Hilary Mason

Edimburgo. Escocia. Reino Unido

Fecha de Nacimiento: 24 de junio de 1996.

Padres: Layla Jane y Ernest Jay Mason

Hermano: Nathan Edward Mason

Se sospecha que la joven posee una las siguientes habilidades descritas a continuación: Telepatía, Control del Metal o Control de la Electricidad.

Primera generación ya que en la familia del individuo no se presenta ningún antecedente de habilidades particulares, línea pura.

Activista y Ecologista.»

Estaba la dirección de mi casa, el año que cursaba, mi instituto, el trabajo de mis padres, quien era mí mejor amigo y en gustos e intereses describían "ballet y pintura".

Era un resumen de mi vida, estaba impresionada, hasta que vi la foto archivada.

Era de hace dos años. Mi cabello color caoba iba suelto, estaba sonriendo tontamente, unos grandes anteojos cubrían mis enormes ojos y las numerosas pecas que decoraban mis mejillas, llevaba mi franela ahora extraviada de los Arctic Monkeys y estaba libre de perforaciones, deslice mis dedos por la foto, me veía tan diferente que parecía tomada siglos atrás.

- Esperaba encontrarme con esta chica - señalo el rubio interrumpiendo mis pensamientos. - En vez de ella, conocí a una hermosa hippie - añadió acariciando mi rostro con sus dedos. Me sonroje.

Que no soy hippie.

- Me gusto donde dice: Ecologista - sonrió sincero, la vegetación era lo suyo, y a mí me gustaba cuidar de la naturaleza. Yo solo besé su mejilla agradecida, Luke me había ayudado mucho y seguía a mi lado apoyándome.

- Yo también me lleve una sorpresa - y me removí en mi asiento para verlo mejor.

- ¿Enserio?

- Sip, pensé que el chico nuevo sería aburrido - él rió. Eso era lo mío, provocar sus melodiosas carcajadas, así que lo abrace y revolvio mi cabello lila. - Pero terminó resultando emocionante

Luego de un rato Luke y Dylan se habían dormido, si les era sincera, normalmente era igual de inquieta y curiosa que mi amigo. Así que me levante y revise todo el jet, comí maní, me serví una copa de vino.

Estaba aburrida, quería entretener mi mente para no pensar en casa, así que busque por todos lados un cd o algo para poner música o conectar mi ipod o celular. Nada.

Me acosté en el piso con los pies apoyados en un asiento, comencé a hacer trenzas en mi cabello y tararear una canción de Nirvana.

Hasta que de repente oí unos gemidos soñolientos y antes de que pudiera levantar mi cabeza y visualizar quien era el zombie durmiente, sentí como tropezaban con mis piernas.

Los labios de Luke rozaron los míos, había caído justo encima de mí, nuestras narices se tocaron. Verlo a esa distancia tan corta, era, era...

Él bajo aun más su cabeza hasta que nuestros labios se unieron, un beso tierno, sus labios eran suaves, oh Dios, coloque mis manos en su cuello y lo atraje aun más hacia mí, sus dedos revolvían mi cabello, me encantaba cada vez jugaba con el piercing debajo de mi labio, y que mis labios tocaran su arito negro. Nos separamos para respirar.

- Lo siento - susurraron sus labios cerca de los míos formando una sonrisa, con algo más oculto tras ella, este momento me pareció eterno, el rubor cubrió toda mi cara, comencé a reír nerviosamente, Luke apoyo su peso en un brazo, y se levanto ofreciéndome su mano.

- Atención pasajeros, entraremos en el triángulo, por favor mantenerse sentados con sus cinturones de seguridad bien colocados, habrá mucha turbulencia. - anuncio el piloto desde unos altavoces.

- Ven - me jalo a unos asientos junto a una ventana. - Quiero que veas la vista de la Isla. - abrochamos nuestros cinturones y las turbulencias comenzaron.

- No veo nada - grité apenas me pude oír sobre el ruido.

- ¡Espera! - señalo la ventana, cuando los movimientos bruscos acabaron, pude visualizar una hermosa isla a lo lejos, quede boquiabierta.

- Bienvenida a tu nuevo hogar - sonrió emocionado.

Magnetic. | 5sosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora