25. Juegos

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 Cuando abrí mis ojos lo primero que vi fue ese azul escandilante, después de besarnos nos quedamos dormidos, ahora él me abrazaba, mi brazo estaba sobre su abdomen y mi mano sobre su pecho trazando pequeños circulitos, sus dedos jugaban con mi enredado cabello.

– Buenos días Aria – dijo y reí, después de tantos conflictos al fin estábamos juntos.

– Hola – susurre con una sonrisa. – Mierda- exclamé levantándome, recordando que el profesor Kurt quería hablar conmigo, tomé mis botas negras y comencé a dar saltos para encajarlas en mis pequeños pies, Luke rió.

– ¿Qué haces? – dijo.

– Tratando de ponerme mis zapatos, dah.

– ¿Para qué? – y se sentó en la cama sin dejar de sonreír.

– Para ver al profesor Kurt.

– No puedo creer que hayas caído, solo quería fastidiarte a ti y a Birds – comenzó a reírse acostándose de nuevo en mi cama.

– ¿Era mentira? – exclamé entrecerrando los ojos acusadoramente, Luke solo asintió.

Estúpido rubio.

Tome una almohada y se la lance, él se sentó de nuevo abrazándola, esta vez solo miró al suelo.

– Tus pies son muy pequeños Aria – se burlo mordiendo su labio del lado que estaba su perforación.

– ¡Claro que no! – me defendí.

– ¿Qué talla eres de zapatos? – preguntó levantándose para poner sus pies frente a los míos, era mucha la diferencia de tamaños.

– Soy cinco – respondí por lo bajo, está bien mis pies eran muy pequeños, él comenzó a reír.

– Esa era mi talla cuando tenía como tres años. – yo me sonroje así que comencé a hacerle cosquillas y cayó al suelo carcajeando sin parar – Aria detente – suplico entre risas, ya estaba empezando a llorar, así que comencé a reír y tomo ventaja de mí acostándome en el suelo y comenzando a hacerme cosquillas a mí.

________

Ahora nos encontrábamos en un barco, de camino a un pequeño archipiélago, donde cada aspirante a Protector debe realizar su entrenamiento especial.

Yo no debería estar aquí, ya que después de todo apenas complete una semana en mi entrenamiento normal. Pero gracias a la recomendaciones de Michael, diciendo que tengo el potencial suficiente para comenzar de una vez, me encontraba en este barco llamado Gwen (sí aquí le ponen nombres a estas cosas, luego la rara soy yo) junto a Birdy, Calum, Michael, Luke, el prof. Kurt y nuestra nueva entrenadora, una mujer joven de unos 30 años, ex protectora y ahora ciega por culpa de una misión de infiltrada en M.A.C.E.

El viaje fue corto, arribamos en otra isla mucho más pequeña, tenía un sendero que llevaba a una selva tropical, Luke encabezaba la caminata y gracias a su poder la vegetación se abría ante nuestro paso hasta que nos encontramos con 3 cabañas gigantescas. Una de estas era para las chicas, otra para los chicos y la tercera y más grande era para los profesores.

Birdy y yo subimos los pequeños peldaños, toda la cabaña era de madera resistente, era un alivio para mi, tenía una acogedora sala de estar con una chimenea, cocina, lavandero y unas 6 habitaciones con 2 literas cada una, parecía como un campamento, solo que nosotras no nos divertiríamos sino que aprenderíamos a patear traseros

– Aria. – me llamó Birdy con sus maletas en la mano en la puerta de una habitación. – ¿Cómo lo haces?

–¿Cómo hago qué?  – pregunte confundida colocando mi mano sobre su hombro.

Magnetic. | 5sosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora