Lo sé. Me vi raro. ¡Pero estabas considerablemente cerca! ¡¿Cómo podía reaccionar después de tenerte a esa distancia?!
Tu fragancia era como la esencia de tu ser, de los colores con los que impartías el gusto por el arte, el cómo transformabas escenarios a un mundo casi irreal, mágico.
Tus cabellos saltaban y en parte, uno de tus rizos se removió ante mi respiración.
Dejé de respirar, hasta que pude.
Estabas cerca, demasiado y, pude hablarte, pero preferí callar.
Alzaste el rostro en cuanto la canción cambió a I See You de MISSIO y regresé al estado en el que mi mente solo capturo tu rostro, el corazón estaba a punto de salirse de mi caja torácica y de nuevo, olvidé cómo se suponía que respiraba o, al punto de preguntarme, ¿Qué era el oxígeno en un momento como ese?
Te veía, tú me veías.
Apreté los labios y supe que alcanzabas a escuchar parte de la canción. Vi la comisura de tus labios en el intento de una sonrisa, hasta que arrugaste la nariz y giraste la cabeza.
Hasta ahí llegó mi momento.
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Última parada ✔
Teen Fiction«La historia comienza, cuando dos personas que ni soñaban con conocerse, terminan encontrándose. En el instante menos esperado, pero en el momento indicado.»
