Ratón de Biblioteca ★2★ [EN HIATUS]

XL

–¿Entonces soy tu pareja?~–dijo la chica colgándose del cuello de Ruki.

–Beatrix, sólo lo dije por como te miraba ese mocoso– él dió un paso atrás–No quisieras a ése rondandote, ¿Verdad?

–No, pero tú me emocionaste– recargó su rostro en el hombro contrario, rozando su nariz contra su cuello.

El teléfono de Ruki comenzó a sonar.

–Apaga eso– dijo ella orillandolo a la cama–Tal vez solo sea Kou que quire cenar...

Él sacó el móvil de su bolsillo y miró la pantalla.

–Es tu padre–Beatrix se sentó en la cama con un puchero.

–Reiji! ¿Ya está todo bien, están en tu mansión?– dijo Ruki.

–Las cosas están estables, pero deseo que siga escondida mi princesa–dijo el padre sin mas–Solo recuerda que ella es la futura reina.

–Claro que cuidaré de ella, pero ¿Que sucedió?

–Richter peleó por nosotros y logramos escapar, incluso Shin está con nosotros. –suspiró pesadamente–Pero Ayato, él está molesto por qué tu te llevaste a Beatrix.

–¡Pon el altavoz!– ordenó ella, y Ruki lo hizo, y bajó el teléfono.

–¡Nena!-exclamó Reiji–Ruki cuidará de ti, princesa.

–Padre, ya no soy una niñita, puedo cuidarme sola.

–Está bien, nena.

–¿Y si buscas a una sustituta, para que se case con Ayato-kun?–dijo mirando a Ruki.

–Sabes que las cosas deben ser asi.

–Pues eso dícelo a él. Y mientras esté aquí, yo disfrutaré mi vida.

–Ruki...–el ojiazul quitó el altavoz y caminó hasta la sala, mientras que ella se molestó.–Beatrix debe cumplir con ésto, pero deseo que sea feliz. Aún no sé que sucederá, no sé si Komori esté muerto y si las cosas sean seguras. Shu envío a los ghouls a asegurarse de ello, pero Ruki, –respiró profundamente–Quiero que ella sea feliz.

–Sabes que yo veré por ella–respondió Ruki.

–Sabes lo que quiero decir.

–Le daré la libertad que ella nesecite, claro sin que ocurra un percance.

–Ruki, sabes a qué me refiero, ella te ama a ti.–el orgullo de Reiji tuvo que ser dejado fuera al decir eso.

Ruki mordió su labio sorprendido.

–Se que existe este compromiso con Ayato para mantener la paz dentro del clan, y para mantener el linaje, pero, ella tiene razón, incluso yo rompí las reglas y los planes al  involucrarme con su madre.

–Reiji, yo...

–Confío en ti. Pero cuando ella tenga que volver, ayúdale a olvidarte.

–Lo prometo Reiji.

–Y una cosa más, es probable que mi hija haya heredado los poderes de sus abuelos, tanto mi padre como de Eugenius, y tal vez los míos, así que... Ten cuidado con ella.

–Es una vampiresa, y la futura reina, ¿Que no tiene derecho de hacer lo que le plazca con una víctima?

–Quiero decir que tengas cuidado tú, si es como su progenitor,– rió sádico como si estuviera orgulloso de ello–No sé que cosas no te haría.

Ruki alzó la vista hacia ella que parecía una simple chica, leyendo recostada boca abajo en la cama.

–¿Sabes con quién estás hablando, cierto?

–Claro, pero es una Sakamaki, una vampiresa pura...

–Maldito Reiji....

–Adiós Ruki, no trates de contactar, yo lo haré cuando sea necesario.

Después de ello, colgó.

El hombre solo suspiró y se recargó en el sofá, y continuó observando a la chica.