Le di las indicaciones de mi casa y no hablamos mucho de camino, solo cundo estuvimos estacionados fuera de mi casa y el paro la camioneta se dio la vuelta para mirarme.
-me gustaría que saliéramos otro día, no quiero que pienses algo erróneo de mi, te quiero conocer... mejor.
No supe que decir, me quede callada un largo minuto mirándolo, ¿que se supone que uno debe decir cuando te dicen eso? ¿Dónde quedaba katley en todo esto?
-me das tu numero-volvió a hablar.
-o claro.
Le di mi número y él me dio el suyo, no se demoro mucho en registrarlo.
-bueno, te estaré llamando, nos vemos-cuando se acerco pensé que me besaría pero en vez de eso me dio un simple beso en la mejilla.
-hasta luego, Adam-baje y comencé a caminar en dirección a mi casa con las mejillas coloradas.
Cuando entre a la casa subí las escaleras, a esta hora mis padres debían estar en el trabajo y mi hermana probablemente este en el cuarto o habrá salido de compras con Alejandra.
Entre en la habitación, sip ella fue de Compras, me tire en la cama y deje la mochila en el suelo solo me quede hay viendo el techo, deje Salir todo el aire que tenía en mis pulmones.
Bese a un chico, DOS veces en menos de un día, y no era cualquier chico si no el hermano de veintidós años de Emmica que tiene una "relación complicada" con una chica que lo engaña.
-mierda-dije a la nada.
***
Abrí los ojos de golpe, un teléfono estaba sonando en algún lugar, tarde un momento en darme cuenta que estaba en mi habitación y que era mi teléfono el que sonaba, comencé a buscar mi móvil, seguro era Adam el que me estaba llamando...
-no pensé que me llamarías tan pronto
-y cuando pensabas que lo haría, donde mierda te metiste te he buscado por toda la casa y claramente no estás aquí-era Emmica, me atragante y carraspee antes de hablar.
-Emmica
-y quien más, ¿donde estas?-se escuchaba molesta
-te dije en la mañana que me venía a mi casa, bueno fue como a las dos de la tarde, espera ¿recién despertaste?
-sí, no te escuche de seguro estaba durmiendo...
-claramente
-bueno solo quería saber dónde estabas, y si estabas bien, nos vemos el lunes... cuñada
-Emmica...-pero colgó antes de que pudiera decir nada más.
Para cuando Alison llego yo ya tenía casi todas mis cosas en la otra habitación, ella entro.
-iugh te vez sudada y cansada, hubieses esperado a que llegara-llevaba puesta una de mis blusas térmicas y un short corto, sus piernas eran tan largas y esbeltas, mire mi pantalón de buzo y mis gordas piernas, ñee.
-me las he arreglado sola-solté mi cabello y lo volví a atar en un rodete.
-me cambio y te ayudo-fue corriendo a cambiarse, terminamos cerca de las nueve de la noche nuestros padres habían llegado a eso de las seis pero se fueron a las siete a su "noche de matrimonio" lo hacían dos veces al mes, salían a comer y a divertirse solo los dos como matrimonio, era adorable.
Las dos estábamos sentadas en el suelo de mi nueva habitación, las paredes se veían vacías bueno la verdad la habitación se veía demasiado grande sin la cama de mi hermana al lado, pero me encantaba.
-mañana deberíamos ir de compras, tu habitación se ve muy... ¿poco acogedora?, podríamos comprar una lámpara linda y unos cuantos cuadros... o una alfombra-dijo Alison apuntando la fea alfombra que mama tenía en esta habitación, lo bueno es que esta habitación también tenía baño propio.
-sí, quiero un espejo y unos adornos.
-¿pizza y películas?-cada vez que mis padres se iban a su "noche de matrimonio" nosotras teníamos algo así como una "noche de hermanas"
-claro, ¿hoy sales?-ella suspiro rendida y asintió.
-sí pero más tarde
-¿Qué es lo que haces sábado por medio?... espera ¿tienes novio?-si mi hermana tenia novio y no me lo había contado le sacaría los ojos.
-no tengo novio... bueno hay un chico que me gusta pero no es mi novio... con respecto a donde voy no te lo diré-se quedo callada un momento- por ahora.
-bueno, solo prométeme que te cuidaras.
-claro que lo hago hermanita.
Vimos las dos primeras películas de la saga crepúsculo y comimos mucha pizza, me fui a acostar y por costumbre entre a la ahora habitación de Alison, mi cama no estaba ahí.
-mierda-me di la vuelta y me fui a mi habitación, esta se veía grande y ordenada, me encantaba.
Me fui a la ducha estaba sudada y agotada, cuando termine de ponerme el pijama limpio los ojos se me cerraban del cansancio, me tire en la cama y a penas alcance a tocar la almohada mis ojos se cerraron.
-Isabela- abrí los ojos un poco- ya me voy.
Estaba arreglada, se veía guapísima.
-cuídate-dije con voz pastosa.
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perdición
Roman pour Adolescentsisabela tiene un pasado que quiere olvidar, un trauma que necesita superar pero la vida le enseñara que eso no es nada fácil. actualización todos los viernes y sábados. -cualquier tipo de plagio sera notificado y se tomaran las medidas correspondie...