𝐎𝐥𝐢𝐯𝐞𝐫 𝐖𝐨𝐨𝐝 {[ oliver wood y tu ]}

𝗺𝗲 𝗰𝗼𝗻𝗳𝘂𝗻𝗱𝗲𝘀

- ¡Draco! Hey , ¿podemos hablar?-Lo llamó Laura tratando de ocultar su felicidad al verlo.
- Hola.-Miró su uniforme de arriba abajo.-Los rumores eran ciertos.-Sonrió levemente.
- Oh sí, no vengo a hablar de eso, yo um...No sabía que bebías.-Fue directa al tema.
- No sabía que estabas en Slytherin.
- Tal vez no te guste hablar de ti mismo, pero podrías haberme dicho que estabas pensando en alguien más.-Sonrió ella con dolor.
- Puedo explicártelo.
- ¿Explicar el qué? No te preocupes, no somos nada de todas maneras.
- ¡Yo no quería! Es un maldito matrimonio arreglado. Yo no quiero casarme con alguien de quien no estoy enamorado.-Se pasó una mano por el rostro con frustración.
- Hacéis buena pareja.
- Cuantas veces debo repetírtelo, estoy enamorado de ti, joder Laura estoy tan loco por ti y no quieres verlo.
- Me confundes, por eso no lo quiero ver Draco.
- ¿Te confundo? Astoria no es la chica que me hace creer en esas tonterías muggles, ella no me hace bailar a la 1 de la mañana y créeme que por ella no me salto un día de clase para hacerla sentir mejor porque el cerdo de su novio le hace daño.
- Quise olvidarme por tanto tiempo de mis sentimientos por ti pensando que no tenía ninguna oportunidad contigo, me esforcé tanto por amar a Oliver y... ¿Que demonios se supone que debemos hacer ahora?
- Sé mi novia.
- ¿Qué?
- Sé mi novia, yo te amo, tú me amas, ¿por qué hacer esto complicado?
- Solo... Prométeme algo.
- ¿El qué?
- Seguiremos siendo amigos, siempre, sin importar lo que pase.
- Te lo prometo.
- Entonces está bien, seré tu novia.

Draco levantó su mentón y la besó con suavidad, la mayoría de sus besos solían ser desesperados por sentir el tacto del otro, pero besos como estos, donde lo único que mostraban era amor y no lujuria, eran los favoritos de ambos magos.

- No pueden besarse en los pasillos.-Sonrió Umbridge con falsedad.-A mi despacho, vamos.

Laura y Draco la siguieron, para su asombro, sus amigos también estaban allí, incluidos Crabbe, Goyle y Pansy.

- Ha llegado a mis oídos que, un grupo de estudiantes de Gryffindor practican encantamientos prohibidos en el castillo bajo el mando de Dumbledore. ¿Señorita Wood, señorita Delacour?-Habló por fin la profesora.

El rostro de la castaña cambió completamente al igual que su cabello, cosa que no pasó desapercibida para Umbridge. Laura sabía perfectamente de lo que la mujer hablaba, ella misma había sido invitada a participar.

¡ flashback !
- ¿Para que es todo esto?-Se sentó la joven en las piernas de Fred.
- El ejército de Dumbledore, vamos a practicar hechizos con Harry, ¿te apuntas?-Contestó el pelirrojo pasando su brazo por la cintura de la chica.
- No, gracias, yo no necesito aprender nada más, soy muy lista.-Rió.
- Está bien, pero no puedes decírselo a nadie.-Imitó su gesto.-Promesa de meñique.
- Promesa de meñique.

¡ fin flashback !

- Yo no sé nada.-Respondió Sophie.

Claro que lo sabía, su propio hermano formaba parte de lo que llamaban « ejército de Dumbledore » Pero había sido capaz de disimularlo y su color de cabello no la delataría. La francesa alzó la vista y notó como los ojos de la profesora seguían clavados en ella.

- ¿Y usted?-Usó un tono amable.
- No sé nada.
- Vuestra misión como miembros de la brigada inquisitorial será pillarlos y traerlos a mi despacho, el conserje os ayudará, marcharos a clase.- Los alumnos de fueron uno por uno, pero antes de que la pareja o Wood salieran, la profesora los paró.-Excepto usted, señorita Delacour.

Laura miró a Draco y este frunció el ceño, « no te quedes, es malvada. » escuchó la voz del platinado en su cabeza.

- Te veré en clase, y a ti en el comedor, Soph.-Agarró de la mano al chico.
- Necesito hablar con ella.-Comentó Umbridge.

Ambos adolescentes caminaron a clase y la francesa se sentó en una de las sillas. Draco abrió la nota que su novia le había dado y pudo leer « No dejes que pillen a las fotocopias Weasley con el grupo de Harry, no dejes que Umbridge lo sepa »

- ¿Quiere un té, querida?
- No, gracias, no soy fan del té.
- ¿Zumo de calabaza, quizá?
- ¿Mi padre le ofreció Veritaserum o tuvo que pedírselo usted? Lo que quiera preguntármelo, pregúntelo ya.
- ¿Qué sabe sobre las actividades de Harry potter y el señor tenebroso? ¿Qué sabe sobre su regreso?
- Y yo que sé, ya no sé nada sobre nada ni nadie, estoy demasiado ocupada perdiéndome en mi propia cabeza.
- Me temo que si no me ayuda... Tendré que recurrir al... Imperius.

Dolores lanzó el hechizo mucho antes de que la joven pudiese reaccionar o evitarlo.

- ¿Qué sabes sobre lo que está haciendo el señor Potter?-Repitió su pregunta.
- Que dejes de tratar de metete en mi mente, joder.
- Se acabó.-Dijo la mujer con furia.