𝐎𝐥𝐢𝐯𝐞𝐫 𝐖𝐨𝐨𝐝 {[ oliver wood y tu ]}

𝗱𝗮𝗱𝗱𝘆 𝗶𝘀𝘀𝘂𝗲𝘀

Una vez dada por finalizada la clase, el grupo caminó en dirección al gran comedor, donde Sophie y Marcus los esperaban.

- He dejado muy mal a Oliver, ¿cierto?-Susurró la serpiente a Theo.
- Un poco, él decía que tú lo atraías y tú dijiste que te atraía Draco.-Dijo en el mismo tono.
- Sentirse atraído y estar enamorado no es lo mismo, ¿cierto?

Theodore dejó de caminar e hice una seña a Blaise para que continuase andando junto a al platinado, quién estaba demasiado ocupado despotricando sobre Potter como para darse cuenta.

- La vida es sencilla Laur, las diferencia entre gustar, amar y estar enamorado son las mismas que entre; por ahora, por un tiempo y para siempre. Una vez hayas entendido eso, habrás entendido la vida. Sentirse atraído por alguien no es malo, pero él te hace daño, no olvides eso, bajo ningún concepto.

Ella sonrió y asintió, él tenía razón, no había nada de que preocuparse, el hecho de que pudiese oler el césped del campo quidditch en su amortentia, junto al aroma de su novio, era algo que solo ella sabría. Bueno, algo que Theo y ella sabrían.

- ¿Dónde estábais?-Preguntó Sophie alzando sus brazos al verlos.
- Me olvidé unos libros en clase.-Mintió Theo.
- ¡Buh!-Abuchearon unos slytherin llamando la atención de los brujos, quienes giraron sus cabezas.
- Sophie Mae Wood, tenemos que hablar.-Habló Oliver echando un vistazo rápido al cuerpo de la castaña.
- La verdad es que no.-Tomó un sorbo de su jugo de calabaza.
- Mamá te enviará un vociferador cuando se entere.
- ¿Qué?
- Que mamá te enviará un vociferador cuando se entere.
- No, qué quién te ha preguntado.-Sonrió la rubia haciendo que su mesa estallase en carcajadas, los alumnos que se encontraban en el comedor los miraban expectantes.
- ¿Y a ti qué demonios te pasa? Tú no eres así.
- La verdad es que sí, lo es, pero pasas demasiado tiempo romantizando todo a tu alrededor y pensando sobre el quidditch que no te das cuenta. Abre tus ojos.-Se metió Laura en la conversación sin apartar su mirada de su libro de encantamientos.
- Cállate mortífaga, a ti nadie te ha preguntado.
- ¿De qué mierda vas Wood?-Exclamó Pansy de un lado de la mesa verde.
- Mejor mortífago a traidor a la sangre.-Gritó Crabbe.

Las serpientes salieron en defensa de la francesa y esta se levantó, posicionándose en frente de él. Se acercó a sus labios con peligrosidad y lo miró a los ojos, mientras Draco apretaba sus puños con fuerza.

- No me ha preguntado nadie pero-Miró a los pantalones del chico-No pareces pensar lo mismo. Aléjate de mi y de mis amigos o me encargaré de que tus días estén contados, imbécil.
- Papá y mamá se enterarán de esto, Sophie.-Advirtió Oliver para después alejarse de la mesa de Slytherin.
- ¿Estás bien? Por merlín, mi hermano es tan estúpido.-Preguntó la rubia.
- Creo que voy a vomitar, quiero vomitar.-Respondió Laura.
- ¿Vas a llorar pequeña Delacour? ¿Qué tienes, problemas con papi?-Se burló Ginny, la cual pasaba por allí.
- Problemas con mami, para ser honestos, y realmente es algo que espero no sepas que es.-Sonrió ella con amargura.
- Metete en tus asuntos zanahoria Weasley.-Habló Draco.

« No tengo nada con él, ni quiero tenerlo, me humilla y hace daño » Dijo Laura mentalmente esperando a que Draco lo escuchase, a lo que él respondió con un abrazo por los hombros para después besar su cabeza.

|| ¡2 semanas después! ||
A La Luz salió un rumor que a la joven Slytherin le facilitó el trabajo de alejarse de sus antiguos amigos. Se contaba que tanto ella como sus amigos se convertirían en mortífagos si el señor tenebroso volvía. Para ellos no era un rumor, era una sentencia de muerte que ya tenían asumida, pero para el resto de los estudiantes, era un simple chisme más. Un viernes por la noche, mientras Laura caminaba hacia la torre de astronomía para encontrarse con Blaise, Oliver la acorraló contra la pared.

- ¿Tan rápido me olvidas pequeña?-Susurró el chico mientras sus narices rozaban.
- Oliver... Déjame en paz, por favor.
- Tus labios piden otra cosa.-La besó Wood.

La castaña quería gritar, lo empujó pero él continuó con el manoseo, rezaba a Merlín por que un profesor apareciese, pero, lamentablemente, no fue el caso,

- Para, por favor. Yo quiero a Malfoy.-Movía ella su cabeza de un lado a otro.
- No te creo, y menos eso de las 50 sombras que se rumorea, tú no eres así.-Negó Oliver.
- Estás muy confundido, tú no me conoces.-Lo apartó finalmente y siguió su camino a la torre.
- Dime una razón, una buena razón para que me aleje de ti, para que me aleje de la persona que amo, y lo haré.-Pidió el adolescente mientras la seguía.
- Tú no me amas Oliver, tú no rompes a la persona que quieres-.Quiso hacerlo entender.
- No sé que hacer cuando estoy contigo, mereces algo mejor pero yo te quiero.-La agarró del mentón.
- Si realmente lo haces, déjame ser feliz con Malfoy, por favor.-Suplicó apartando la mirada.
- Lo haces por obligación y lo sé, él no es buena persona pero tú s...-Comenzó a decir Oliver.
- ¡No digas que soy una buena persona, Wood! No tienes el derecho de decirme como soy cuando no conoces ni la mitad de mi historia, y mucho menos la de mi novio. No sabes por todo el infierno por el que ha pasado ese chico, no tienes ningún derecho a juzgarlo. Mi vida no es un cuento de hadas, ni la mía ni la de muchos más serpientes. Yo tengo problemas en casa, mientras tú tienes a la familia perfecta. Tú tienes a tu mami dándote abrazos antes ir a dormir, mientras que yo tengo a mi madre en una presa en azkaban y la única persona que trata de llenar el vacío de mis padres es la madre de Draco. No te voy a permitir que hables mal de los Malfoy, jamás, ellos me hicieron sentir en casa cuando yo no tenía una. Metete en tus malditos asuntos, es lo único que pido.-Replicó enfadada con lágrimas asomándose por sus ojos.

El chico se encontraba perplejo, no sabía nada sobre ese tema y la crudeza con la que se expresó la chica hizo que su piel se erizará.

- ¿A qué vienen eso gritos?-Llegó la profesora Mcgonagall.
- Nada, simplemente necesitaba descargar mi ira sobre un estúpido Gryffindor.-Rodó Laura los ojos.
- 30 puntos menos para Slytherin, señorita Delacour.-Avisó con molestia la bruja.

La metamorfomaga bufó y fue a encontrase con su mejor amigo.