Like a girl; Ereri

22. ¿Quién es Rivaille?

¿Quién es Rivaille?

[Levi. A]

Unté un poco de pegamento sobre algunos centímetros del extenso papel blanco que habíamos pegado con mucha cinta adhesiva en la pared que quedaba afuera de la oficina del director. Luego coloqué el papel china que Hanji, junto con otras chicas se habían encargado de adornar y pegarle un montón de diamantina de colores. Después de lo que a mí me pareció una eternidad, al fin íbamos a colocar el periódico mural de ese mes. El equipo de porristas sobresaliendo en la columna de deportes, parecía que eramos los únicos que se preocupaban por hacer el trabajo lo más presentable posible, los trabajos de los demás equipos eran algo que nos debería avergonzar a todos los del club de periodismo.

—Te estás yendo chueco de la raya del margen, enanín.

Me gritó desde abajo la cuatro ojos, me giré lentamente, con mucho cuidado, temiendo que en cualquier momento me fuera a caer de las escaleras en las que me habían obligado a treparme para pegar el ridículo decorado rosa con un montón de brillitos. Le enseñé el dedo medio a Hanji y volví a mi peligroso trabajo de pegar su decorado estúpido, intentando irme lo más derecho que podía y al mismo tiempo tratando de mantener el equilibrio sobre las viejas escaleras de metal que sentía flojas y a nada de romperse.

Nuevamente Hanji, Marco y yo eramos los únicos que se encargaban de la pesada tarea de pegar todos los reportes en el amplio espacio que le concedían a los de periodismo para exponer su trabajo e investigación del mes. Hanji sostenía las escaleras para evitar que se movieran de más y yo cayera, Marco recortaba todos las hojas con la información que pegaríamos a continuación y yo estaba tratando de no morir en el intento de pegar el margen por los bordes del enorme papel en blanco que abarcaba la mitad de la pared.

Al terminar de pegar todo el maldito y llamativo decorado rosa, baje con mucho cuidado de las escaleras y me encargué de desquitar mi mal humor contra Hanji, golpeándola en el hombro. De inmediato se quejó entre lloriqueos y reclamos, la ignoré por completo y me senté a lado de Marco a quien aún le faltaban un montón de recortes.

—Te ayudo.— Dije, tomando las otras tijeras que nadie estaba ocupando.

—Gracias.

Marco sonrió con agradecimiento y Hanji de inmediato se nos unió, aunque en realidad sólo estaba sentada cómodamente viéndonos trabajar mientras que ella mordisqueaba una barra de chocolate.

—Cuéntame el chisme, Levinano— Exclamó de pronto, tras un largo silencio. Levanté la mirada y enarque una ceja sin saber de qué "chisme" hablaba.— ¡Argh! Acerca de lo que pasó en la bodega de gimnasia entre Eren y Mikasa.

Estrujé el papel que acababa de recortar entre las manos y la regañé con la mirada, luego, con la cabeza señalé a Marco de manera disimulada, ésta idiota olvidaba que aunque el pecoso fuera amable con nosotros, no dejaba de ser amigo de Jean. Hanji ahogó una protesta en su garganta e hizo una rabieta silenciosa; Marco levantó la mirada de sus recortes y nos sonrió ampliamente, entendiendo el por qué yo no había dicho nada y por qué Hanji parecía molesta y muerta de la curiosidad. Se colocó de pie y le pasó las tijeras a la cuatro ojos, para luego recoger el montón de recortes que ya estaban listos para ser pegados en el periódico mural.

—Eren siempre es un tema de controversia, ¿verdad?— Preguntó con cierta incomodidad, Hanji y yo asentimos al mismo tiempo.— Bueno, supongo que mejor iré allá a pegar la información y así ustedes pueden hablar tranquilamente y yo no me meto en problemas.

—Gracias y disculpa— Agregué antes de que se fuera, pero Marco sólo encogió los hombros con despreocupación y se alejó de nosotros. Lleve la mirada de vuelta a Hanji y negué con la cabeza en un gesto de desaprobación.— ¿Tu curiosidad no podía esperar?