Like a girl; Ereri

48. Y el sol brilló de nuevo

Y el sol brilló de nuevo

[Eren. J]

—Hey, Jaeger.

Inevitablemente, Armin y yo volteamos al mismo tiempo, casi en una perfecta sintonía cuando aquella voz tan conocida pronunció mi nombre. Farlan Church estaba allí frente a nosotros, una mirada llena de determinación que parecía retarme y aún seguía odiándolo. Eso no había cambiado. Desde el incidente con el beso, Farlan ya ni siquiera había intentando acercarse a mí y era algo que había agradecido mucho. Podría no estar enojado por completo con Levi, pero Church sin duda, era una cosa aparte.

Armin arrugó la frente en un gesto que yo reconocía como preocupación genuina. Supuse que él esperaba que iniciara una pelea con Farlan o algo, sin embargo, estaba un poco cansado y ya ni siquiera tenía fuerzas para recriminarle por algo a ese idiota. En cambio, entorné los ojos y con voz cansina, me animé a preguntar:

—¿Qué quieres, Church?— Enarqué una ceja inquisitiva y escuché que Armin tragaba saliva con fuerza.— ¿No has tenido suficiente?

—Nada de eso, quiero hablarte de Levi.

Armin ahogó un jadeo ante el atrevimiento de Farlan, pero Church se mantuvo firme ante aquella resolución con la que venía armado. Apreté los ojos en lo que parecía ser un gesto demasiado exagerado y cuando finalmente los abrí, suspiré.

—Sí, no— Exclamé con seriedad, no quería escuchar el clásico discurso de que lucharía por mi ex novio o algo parecido, era demasiado trillado.— Besaste a mi nov... ex novio cuando aún estábamos juntos, ya lo sé. Que ahora tienes tu gran oportunidad, también lo tengo claro. No necesito saber el resto.

—¡No se trata de eso, cabeza hueca!— Alzó la voz, resultando ser algo tan extraño porque Farlan nunca alzaba la voz, al menos nunca lo hizo en mi presencia. Pronto agregó:— Ganaste, ¿de acuerdo?

Farlan alzó ambas cejas hasta que estas casi rozaron con el inicio de su rubio cabello de pollo. Tenía aquella expresión que se parecía a la de alguien que ha hecho el descubrimiento del siglo; tuve que fruncir el ceño en total confusión ante su revelación a la que no le encontraba sentido alguno. Siempre había sido demasiado distraído, no había nada que se pudiera hacer al respecto. Volteé a ver a Armin, cuestionándole con la mirada lo que el otro rubio estaba tratando de decir, sin embargo, me encontré con que mi amigo estaba igual de confundido que yo

Gesticulé con las manos mientras preguntaba:

—¿Ganar? ¿Ganar qué?

—Levi no me ama, te ama a ti— Respondió en un murmuro, su expresión había cambiado a algo más suave mientras decía:— Eres todo sobre los pensamientos de Levi.

Esta vez, él parecía molesto y puede que por primera vez, no lo culpara por sentirse de esa forma. Levi inspiraba este tipo de sentimientos en la gente, la necesidad de protegerlo aún cuando se tenía la certeza de que no era necesario. Levi siempre había sido demasiado fuerte para necesitar que alguien lo cuidara. Pestañeé al darme cuenta de que Farlan estaba aquí, no para decirme que había sido un tonto por haber dejado ir a Levi y que ahora tomaría la oportunidad que yo había dejado ir. No.

Él estaba aquí para decirme que había sido un tonto por haber dejado ir a Levi y que debía darme prisa y regresar por él, antes de que fuera demasiado tarde. Aunque me hubiera encantado hacerlo, las cosas no podían ser así de sencillas. Actualmente yo era una masa enorme de problemas que parecían acrecentarse, quería tener a Levi a mi lado pero no deseaba en lo absoluto agobiarlo con mis problemas. Ni siquiera podía dedicarle el tiempo que en una relación sana se debe invertir, amaba a Levi pero no era justo.