Like a girl; Ereri

30. Un viaje a Lübbenau; 1/2

Un viaje a Lübbenau; 1/2

[Eren. J]

El eco de la voz de Armin rebotaba en las paredes huecas del enorme y silencioso auditorio de la escuela, los profesores, directivos, alumnos y padres de familia, escuchaban el bien ensayado discurso. Algunos fastidiados, otros ansiosos y había quienes sollozaban ante las brillantes palabras que fluían tan naturalmente de la boca de Armin. Levi y su equipo de periodismo estaban de pie en alguna esquina del escenario, fotografiando de vez en cuando, o en el caso de Hanji, tomando vídeo para los interminables archivos de periodismo.

De vez en cuando reía en voz muy bajita al ver las muecas de fastidio que hacía Levi, desesperado porque el discurso de Armin terminara pronto y de ésta forma, la ceremonia avanzara a lo que realmente importaba: la entrega de diplomas y certificados. Pero dudaba que fuera pronto, pues yo había sido testigo de las miles de palabras que Armin había escrito para este día, desde que el director le encargó esta importantísima tarea.

—El mundo acaba de abrirse para nosotros, sé que puede ser un poco difícil, pero quiero pedirles que no nos rindamos ante las probables dificultades que se nos presenten en el futuro— Armin hablaba para la audiencia con emocionada voz, de vez en cuando sus azules ojos iban a dar con las hojas en donde venía todo su discurso.— Es normal que nos sentimos inmortales en éste momento, acabamos de graduarnos. Pero también es importante recordar que más retos se vienen para nosotros, grandes o pequeños...

Mikasa, quien estaba sentada a un lado de mí, intentaba ocultar las pequeñas lágrimas que salían de sus ojos negros como el carbón. Annie miraba con ojos brillantes a su novio, en su rostro no había ninguna expresión que detonara como se sentía, sin embargo, sus ojos la delataban por completo. Hanji grababa con una enorme sonrisa en el rostro, de vez en cuando asentía ante las palabras tan acertadas de Armin, estando en total acuerdo con cada una de ellas.

Levi seguía de la misma forma, rogando a cualquier divinidad existente para que Armin cerrara el pico y pasáramos a lo siguiente, casi podía escuchar su voz en mi cabeza diciendo "Mueve la boca y acaba con esto", imaginaba tan bien su irritada voz que incluso, hacía tanto ruido en mi cabeza como la voz de Armin en todo el auditorio escolar.

—Y por último, mi deseo más profundo para todos ustedes es que se conviertan en lo que han aspirado a ser, ¿qué mejor forma de vivir hay que esta?— Armin soltó un pesado suspiro y luego, su sonrisa se amplio.— Los mejores cuatro años de mi vida los pasé aquí, los extrañaré.

Entonces el rubio por fin bajó de la tarima y todos los estudiantes se pusieron de pie, estallando entre aplausos y ovaciones ante el conmovedor discurso de mi amigo. Periodismo hizo lo suyo tomando cuanta fotografía pudieran, mientras que Levi tomaba nota con algo de desgano y fastidio. Pronto el director comenzó a llamar a los alumnos con promedio sobresaliente para hacer entrega de certificados y diplomas, una vez que concluyó con los estudiantes de promedios brillantes, comenzó a llamar a los alumnos por orden alfabético del apellido.

Todos pasaban al frente con su toga negra y portando el birrete sobre sus cabezas con gran orgullo. No tomaba mucho en que el siguiente pudiera pasar, en realidad, sólo eran nombrados, recibían sus documentos, estrechaban algunas manos, recibían felicitaciones por parte de los profesores y luego pasaba el siguiente, y el siguiente, y el siguiente.

Los chicos de periodismo se fueron al patio en donde se haría la toma de la fotografía grupal, justo después de que los chicos sobresalientes dejaron de ser nombrados. Harían fotografía de diferentes grupos, los sobresalientes, los capitanes con su respectivo equipo, los que pertenecían a algún taller y después, la foto de generación. Estaba de acuerdo con Levi en que se hacía demasiado escándalo por cosas así. Pensaba que sólo bastaba con la ceremonia y ya, pero no para el resto, que se emocionaba al tomarse fotografías del recuerdo, o que se ponían nostálgicos al pensar que esa noche, sería su último baile en esa escuela.