El clima ésta mañana amaneció nublado, el cielo estaba gris y hacía frío. Parece que iba a llover muy fuerte, por lo que era imposible ir a trabajar a la obra, tendría que ir a la empresa directamente. No quise molestar a Alessia así que tomaría un taxi. Cuando estuve a punto de salir del edificio comenzó a lloviznar, me apresuré a entrar en un taxi que se aproximaba, no quería mojarme con la lluvia y luego resfriarme. Entré a mi oficina y como si me estuviera esperando, Eve entró tras de mí para decirme que Glenn estaba esperándome, así que fui de inmediato. Cuando estuve frente a la puerta de su oficina toqué antes de darme paso.
– Adelante.
– Buenos días, Eve me dijo que querías hablar conmigo. – Su cara estaba muy seria, lo cual me preocupaba, el semblante de Glenn siempre lucia tranquilo y confiado.
– Si, siéntate por favor.
– ¿Pasa algo?
– Savannah, quiero que seas honesta, esto es muy importante así que por favor sé sincera conmigo. ¿Qué hace tu firma en una cuenta bancaria totalmente desconocida para mí, donde está transferido parte del dinero de la obra de la que tú estás encargada? No puedo acusar a nadie más porque sólo tú y yo tenemos acceso a cualquier tipo de información de esa obra debido a que es la más importante y tú fuiste la última en entrar al sistema la semana pasada. ¿Puedes explicármelo, cometiste un fraude en mi empresa?
– ¡No! ¡Por Dios Glenn, claro que no, sabes que yo no sería capaz de hacer eso! – Dije levantándome de golpe de la silla, las palabras de Glenn me cayeron como un balde de agua fría, no me lo esperaba. No podía creer que me acusara de robar tan horriblemente.
– Savannah, lo siento pero no sólo depende de mí creerte y dejarlo pasar, a pesar del poco tiempo que llevas trabajando aquí confío en ti y sé que tú no lo harías, pero como ya te dije, no sólo depende de mí.
– Entonces ¿qué va a pasar? ¡Te juro que no soy culpable de nada y mucho menos de un robo, por Dios! Tampoco he firmado nada extraño que yo recuerde. – Me sentía desesperada, ¿cómo pudo pasar esto? Sin duda alguien entró a mi oficina e hizo todo esto desde mi computadora para inculparme porque sólo Glenn y yo podemos accesar, pero no fui yo.
– Por ahora no podrás venir a trabajar, al menos hasta que investiguemos lo que pasó. Lo siento, no puedo hacer nada.
– ¡Pero no es justo! Es como si ya me dieran por culpable. – No puede ser, apenas estoy comenzando y ya me metí en problemas.
– Sé que no fue tu culpa pero es lo que tengo que hacer, esto es muy serio, los clientes podrían demandarnos ya que esto los perjudica a ellos también y si descubren que es tu firma estarías en problemas, es mejor que te mantengas alejada. – No sabía qué era peor, pero supongo que Glenn tenía razón. Me sentía devastada.
– Está bien, me iré, entiendo. Gracias por confiar en mí.
– No te preocupes, te ayudaré, no quedará así.
Salí de ahí más que triste, decepcionada. No lo sé, todo era muy raro, la última vez que tuve acceso al sistema fue el viernes, así que tuvieron que haber hecho este fraude el fin de semana, nadie del personal iba el fin de semana a la empresa. No me cabe la menor duda, alguien quiere echarme el muerto encima, pero... ¿por qué?.
– ¿Qué haces aquí tan temprano, olvidaste algo? – Preguntó Alessia al verme llegar tan pronto al departamento.
– No, ojalá fuera eso. Ya no tendré que ir a trabajar... – Mi tristeza podía palparse con las manos. Le dije a Alessia lo que había sucedido e intentó subirme el ánimo de infinidades maneras pero nada funcionaba. Me contó lo que pasaba entre ella y Jordan, como lo pensé, pasaron la noche juntos y comenzarían a salir. Se notaba lo contenta que estaba, ya era hora que esos dos hicieran algo. Desafortunadamente yo no podía dejar de pensar en lo que pasó en la empresa ¿y si me despedían? O peor ¿Y si iba a la cárcel? ¡No! ¿Qué diablos iba a hacer? Tampoco quería estar sin hacer nada hasta que sucediera un milagro, todos pensarían que yo lo hice y no fue así. Esto es horrible ¡¿por qué tuvo que pasarme justamente a mí?! Sólo debía confiar en Glenn y esperar que todo se aclare.
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Incluido En Mis Planes
RomantizmSavannah Munz es una muchacha sencilla, humilde, lista y testaruda que acaba de terminar sus días de universitaria para entrar en el mundo de los negocios como Ingeniera Civil y está muy emocionada por la nueva vida y responsabilidades que ahora ten...