Capítulo 3

1.2K 78 9
                                    

"Una mala idea"

Por unos minutos viajamos en silencio, mi hermano perdido con la vista en la carretera y yo pensado en todo y a la vez en nada.

—Si no quieres hablar de lo que paso con mama esta bien, pero...escuche todo— rompió el silencio.

—Me alegro que no preguntes, gracias— digo seca.

—Oye, no te la agarres conmigo tampoco— protesta a la defensiva.

Suspiro negando.

—Esta bien, lo siento. No me esperaba la discusión con ella, al menos no en este momento y menos de ese modo, me tomó por sorpresa— confieso sincera.

—¿Crees que fue un poco dura?—

Niego.

—No, tal vez me merezco eso y mas—

Asiente.

—Comprendo lo que dices, pero no quiero que te estés castigando todo el tiempo, que mereces y que no— reclama algo molesto.

Lo miro con atención.

—¿En que momento creciste tanto?— digo asombrada ante la sabiduría de sus palabras.

—¿De verdad quieres una respuesta a eso?— me mira de reojo con una leve sonrisa.

—Oh, ya entiendo. Temes herirme, esta bien, no te presiono— ambos reimos.

—Mira, es aquí. Señorita "del Río" hemos llegado— sonríe, abre la puerta de su lado y baja del vehiculo energico. Voltea el auto y abre la puerta de mi lado extendiendo su mano—

Frunzo el ceño cruzandome de brazos.

—Es enserio Lucho?— niego. —Eso no van conmigo, sal—bajo del auto por mis propios medios y lo miro divertida.

—Eres cruel, sabes?— me mira fulminante.

—Lo sé, lo soy— asiento orgullosa de mi.

—Disculpa, he olvidado que eres toda una chica ruda, ¿no es así?— ambos reímos.

—Entremos de una vez, antes de que me arrepienta de haberte acompañado, lo único que me falta es tener que cuidarte durante toda la noche— bromeo.

Ríe.

—No te preocupes, sé cuidarme solo para que sepas—

—Ah sí? ya veremos entonces, anda vamos— tomo su brazo y no aventamos dentro del local.

La música era buena, el bar era bastante espacioso, y las luces acompañaban muy bien, pero puedo asegurar que había mas personas de las permitidas, incluso chicas y chicos muy jóvenes.

—Quien diría que mi hermanito frecuenta estos lugares..— río sobre su oído.

—No se porque dices eso,a mis amigos les gusta venir aquí— mira a su alrededor tratando de encontrarlos. —Allí están, ey!— hace señas con su mano. —Vamos Jaz—

Nos acercamos a un grupo de jóvenes que aguardaban sentados en una de las mesas.

—Ya estabas demorando Lucho— habló acercándose a nosotros un chico castaño de ojos azules.

Mi hermano ríe junto a él.

—Jazmín, te presento a Leo, es un poco tonto pero fuera de eso gran amigo—bromea.

Río y el rostro del chico se vuelve serio.

—Eso no es gracioso— lo mira fulminante y luego dirige su mirada a mi. —Es un placer, tu hermano me ha hablado mucho de ti— sonríe extendiendo su mano hacia mi y no dudo en estrecharla, quizas algo dudosa. ¿Mi hermano había hablado de mí, con sus amigos? eso no era para nada bueno. —Oh, no te preocupes por nada, soy muy discreto no voy a decir nada—

Amores Peligrosos FLOZMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora