Amores Peligrosos FLOZMIN

Capítulo 29

"Verdades que salen a la luz"

Jazmín

— ¿Y, como estaba? — preguntó flor llegando a mi lado una vez colgué el teléfono.

—Sorprendido, preocupado...— dije mencionando la reacción de Lucho al recibir mi llamada.

—No es para menos, pude conocer bien a Lucho, se cuán importante eres para él. Y siempre que teníamos la oportunidad de charlar no había momento en que no te nombrara. Te admiraba—

— No soy alguien que merezca admiración de nadie amor—

—Estas equivocada... ¡Yo te admiro!, simplemente...por ser como eres—

Suspiro profundamente cabizbaja.

—No sabes lo que dices...— niego.

La oigo bufar en forma de protesta.

—Si lo sé, detesto cuando te tiras abajo, todo el tiempo. Es... ¡horrible!

—Lo siento, lo siento. Discúlpame— suplique buscando el contacto de sus manos me fueron negadas.

—Siempre pides disculpas, pero ya es momento de que te perdones a ti misma y empieces a valorarte. Te veo abajo— dijo por último cuando la vi desaparecer por la puerta de la habitación.

—¿Problemas en el paraíso Jaz? — era la voz de Estefany. —Creo que ella tiene razón, deberías escucharla—

—Es lo que intento, pero por lo visto estoy fracasando— frunzo el ceño mirando hacia la ventana. Siento como sus brazos rodean mi cintura por la espalda y su respiración choca contra mi cuello.

—Soy testigo de que las cosas te costaron un poquito mas que a los demás, aun así, recuerdo como cuidaste de mí, yo siendo tan solo una niña y tu una adolescente en pleno proceso de cambios. Te debo mucho, contaras conmigo siempre—

Sonrío de lado acariciando su brazo.

—Aún no sé cómo lo logre, tan solo con mirarte puedo ver un buen logro en mi vida, creciste tan fuerte y hermosa. La que te debe mucho soy yo, eres de lo poco bueno que tengo y no me imagino perderte—

—No me vas a perder, tu sí que eres dramática, ¿no? —sonreímos. —Cambiando de tema, ten, hace unos minutos llego esto para ti— frunzo el ceño cuando desde su bolsillo saca un sobre blanco entregándomelo.

—¿Quién lo ha dejado? — pregunto con el ceño fruncido.

—No lo sé, en cuanto abrí la puerta ya no había nadie. Vamos ábrelo— insistió aferrándose mas a mi mirando con intriga el sobre en mis manos.

—Está bien— asentí abriéndolo y sacando el contenido que estaba dentro.

"Ten cuidado de mirar atrás, puede que no te guste lo que veas"

Esas eran las palabras que estaban escritas en aquella hoja de papel. Por más que intentaba releerlo una y otra vez no lo lograba comprender su significado.

«¿Quién podrá haber sido? Sera que...»

En la parte de atrás había al más escrito, pero no se alcanzaba a leer.

—No puede ser...— dije con la voz débil.

—¿Qué, que dice Jazmín? — me observaba fijamente ante el cambio facial de mi rostro.

Trague saliva con dificultad mirando un punto fijo en la pared con mis ojos bien abiertos y la respiración irregular. Esas palabras...eran muy similares a una persona lo suficientemente conocidas, generar confusión y temor tan solo en una frase podía ser obra de...