Capítulo 6: cuidado

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Al momento de que dijo que sí, yo muy emocionado le digo que vayamos a comer afuera, esta es la primera vez que saldremos juntos.

Cuando abro la puerta, ageha se emociona por salir a comer conmigo.
Ageha en todo el camino me agarra fuertemente del brazo, me sentí tan bien de que tuviera esos detalles conmigo, me sentía afortunado.

Estuvimos caminando por horas para poder encontrar un restaurante decente, pero desafortunadamente, todo estaba cerrado. Ageha ya tenía hambre y me lo hacía saber apuntando su pana.
-Jesús: ya lo sé pequeña, pero que hago, todo está cerrado
-ageha: kii
-Jesús: bueno, lo mejor será ir a casa a comer, te preparare algo de fruta, te parece bien
-ageha: si

Decepcionado y hambriento, ageha y yo nos regresamos a la casa, pero... en el camino, ageha se detuvo por un segundo ya que un aroma bastante familiar atrajo a ageha.
-Jesús: vaya, sí que vuele muy bien

Ageha y yo seguimos el aroma, el aroma nos llevó a un restaurante bastante raro, pero se veía bastante agradable, era una combinación rara.

-Jesús: quieres comer aquí ageha?
-ageha: sí

Al momento de entrar al restaurante, pude observar que no era tan popular, ya que apenas tenían clientes.
En cuanto nos sentamos ageha y yo, un empleado bastante raro nos atendió de una manera bastante peculiar.

-¿?: nyeh heh heh, hola humanos, bienvenidos a mi humilde restaurante, me presento, soy el gran papyrus, y este es mi restaurante, el cielo del espagueti

El trabajador que nos atendía parecía ser literalmente un esqueleto con un traje bastante raro, me sorprendió un poco pero no tanto, sabiendo que existen criaturas bastante peculiares como ageha, no me sorprendería que existieran cabras parlantes, flores que hablan y etc.

-Jesús: eh, disculpa, que usted no es el que sale en los paquetes de espagueti de la marca nyeh heh heh?
-papyrus: si, es el espagueti que yo mismo he creado, gracias a mis dotes de cocina Nyeh heh
-Jesús: pues deje felicitarlo, tanto a mi como a mi acompañante nos gusta mucho tu espagueti, de verdad nos gusta mucho tu espagueti
-Papyrus: ¿enserio? *se emociona*, caray, sabía que le gustaba a mucha gente, pero se siente bien que me lo digan en persona Nyeh, muchas gracias humano,
-Jesús: jeje bueno, nos podrías traer dos órdenes de espagueti por favor
-Papyrus: claro que sí

En ese momento, papyrus llama de la cocina a un tal sans, creo que era su hermano ya que en cuanto salió, vi que ambos tenían bastante parecido entre ellos, aparte ambos eran esqueletos.

-Papyrus: sans, podrías traer dos órdenes de espagueti por favor
-sans: he he, claro que si bro,
-papyrus:... pero es para hoy
-sans: oh vamos hermano, no creo que los clientes *lo interrumpe papyrus*
-papyrus: ¡SAANS! Deja de ser flojo
-Jesús: eh... (Esto se puso raro)
-ageha: kii?

Luego de que los hermanos discutieran, se disculparon con nosotros y se fueron a la cocina a preparar los espaguetis

-Jesús: vaya, sí que son raros
-ageha: si
-Jesús: pero se ven agradables
-ageha: si

Luego de esperar 10 minutos, por fin había llegado la comida, pero de una forma rara, de la nada sale sans con los platillos.
-sans: tengan "bone appetit"

Desde el fondo de la cocina, se pudo escuchar que papyrus estaba gritando sans en voz alta.
-sans: he he
-Jesús: oye, de verdad son esqueletos? O son disfraces?
-sans: de hecho, el termino seria esqueleto mágico y si, si lo somos, porque la pregunta, acaso te impresionamos?
-Jesús: la verdad un poco, pero no tanto, ya había visto otra criatura antes que ustedes, una criatura bastante hermosa
-ageha: jiji *Se sonroja*
-sans: he he, bueno, los dejo solos pares de tortolos
-Jesús: he espera *se desaparece sans*
-ageha: kii?
-Jesús: oh bueno, déjalo ageha, mejor hay que desayunar, que ya me muero de hambre
-ageha: sí

el efecto del cariñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora