Esta noche se ha inundando nuestra
habitación
en silencio,
y en el siniestro vi como flotaba
la ropa interior de encaje de nuestras
inseguridades
como los cuerpos heridos de la batalla de
Normandía,mientras dos osos polares que se paseaban
A la orilla de nuestra cama
murmuraban todas las carencias de amor
que tememos reconocer,
como el mitómano
que conociendo la mentira
se convence mil veces así mismo
que es verdad.