Enredada en tus cintas

Capítulo 23: Padres

Las luces se apagaron y los gritos se encendieron, todo estaba listo para comenzar el show de nuestra amistad. La Caro admira esta banda desde el 2014, sufre un buen por la demora de su tercer disco, son muy colgados pero los ama igual. Aunque no me gustan demasiado, grito con todas mis fuerzas cuando sale el rubiecito. La Caro sale muy emocionada del concierto, trae mucho dinero y se compra un montón de cosas para decorar su cuarto, no sé de dónde sacará tanta pared. Pepe nos estaba esperando afuera, lo saludo de un beso en la mejilla, siento que debió ser en los labios, pero muy romántico. Paramos en un Mc Donnald’s para comer algo, la Caro parecía nuestra hija, se comportaba con la misma energía de una niña pequeña después del concierto.

Nos sentamos a comer y Caro interrumpe el silencio que habitaba en la mesa.

—Oye Pepe, ¿y tus papás? —pregunta curiosa—.

—Oye si, nunca me has hablado de ellos —agrego—.

—Mis papás viven muy cerca de acá, los llamo seguido pero por el trabajo no he podido ir a visitarlos —explica—.

—Pero igual en las tardes no tenemos nada que hacer —digo—. Podríamos ir a visitarlos.

—No lo creo, son personas muy ocupadas —responde con seguridad—. Oye está muy rico esto, las hamburguesas de acá han mejorado mucho —cuenta cambiando de tema bruscamente—.

La verdad trato de evitar pensar mucho, solo me invento un sinfín de teorías que al final son falsas, quiero disfrutar a Pepe y quizás todavía no es momento para el que conozca a sus padres, aunque el ya conozca a los míos. De igual forma, Pepe nota mi disgusto sobre mi cara.