El HILO ROJO DEL DESTINO. (En Edición)

Capítulo 10.

Albert pov.

Eran las 9 de la mañana del día miércoles y aún abrazaba a Jonny que dormía en mi pecho, dormía tan tranquilo que no quería despertarlo, pero mi brazo estaba entumecido.

-Jonny... Jonny despierta. -le susurró al oído, pero solo esconde su rostro más en mi pecho. No sé pero se veía muy tierno durmiendo de esa manera. Me siento tranquilo mirándolo dormir de esa manera.

-Albert, no hagas ruido... quiero dormir. -dice quejándose como niño pequeño, con la cara en mi pecho.

-¿oye estas cómodo? Es que me duele mi brazo, esta entumido.

-¿en serio?... mmm Pásame mis lentes. -me dice mientras se burla aún con la cara en mi pecho y señalando la mesa de noche alado de la cama con su mano derecha.

-bueno, pero levántate.

-no, pásame mis lentes. - doy un suspiro por lo consentido que es este niño pequeño y ayer me decía que yo era un bebe.

Le paso sus lentes y se los pone mirando hacia otro lado, además acomoda su cabello para que le tapara la frente, me causa curiosidad por que siempre quiere ocultar su rostro sí es un chico guapo... bueno y ¿por qué me parece guapo? Bueno es un chico atractivo.

-¿Por qué no te gusta que te vean sin tus anteojos? ¿Eres visco? -pregunto burlándome un poco.

-no, pero es un trauma de pequeño. -responde en tono molesto, parece ser que le disgusto mi pregunta.

Nos levantamos de la cama y fuimos a la cocina a preparar desayuno, bueno Jonny saco yogurt para echarles cereales. Un desayuno pequeño pero satisfactorio.

-bueno, al menos ya no está lloviendo y me puedo ir.

-ah, ¿y es que no estas gusto?

-no es eso, en la tarde tenemos clases... y quiero ir a mi casa a cambiarme.

-mmmm ya, está bien.

Después de cambiarme la ropa tome mi moto y me marche a mi casa, no sin antes despedirme de Jonny de mano.

Jonny pov.

Me quedo viendo como Albert se aleja en la calle, me siento muy feliz pero a la vez triste. Me gusta, pero no sé qué pensara de mí si le dijera eso.

-Hola!!!! -dicen gritándome en mi espalda, asustándome y sacándome de mis pensamientos.

-¿ustedes que hacen aquí? - pregunto assustado cuando me doy cuenta quien me asusto, era Bea y mis otros amigos de la banda.

-¿el que salió en la moto era Albert? -pregunta Bea en forma burlona.

-ohhh, ¿ya no eres virgen? que bien por ti, ¡felicitaciones! -me dice Cristian, haciendo una seña con sus manos. Un circulo y con un dedo de la otra mano lo introduce por el hueco de manera morbosa.

Me sonrojo y le doy un fuerte golpe en la cabeza.

-aush. Sigues siendo tan violento ¿pensé que habías cambiado? Ahora que entraste a la universidad.

-yo claro que he cambiado, pero no del todo. -y lo amenazo con mi puño y sale a esconderse detrás de Sol.

-¿y Albert que hacia tan temprano en tu casa? -pregunta curiosa Sol.

-paso la noche conmigo, pero mejor entremos. -digo mientras abro la puerta para entrar a la casa, y adentro mientras me alisto para salir les cuento todo lo que paso ayer.

-jmm, entonces parece que le gustas a tú amigo. -nos dice muy pensativo Oscar.

-es solo un amigo cercano, tiene novia y además... bueno no sé.