3. Se suponia que ibamos al instituto.

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Primera parte: preludio.

Pasó esa noche y también pasaron las seis siguientes con la misma tranquilidad.

Entonces llegó el lunes por la mañana, a las 6:30 a.m Bruce despertó a Natasha y ella se limitó a gruñir, levantarse, estirarse y caminar hacia la habitación de Hope. Esta dormía intranquila y le sudaba la frente.

Cuando Natasha iba a despertarla esta se removió y habló en sueños.

-No somos monstruos... - sonaba como si intentase convencer a si misma - papa... papa... Mike, él...
Natasha apoyó su rodilla en la cama y la despertó moviéndole el hombro. Hope se despertó sobresaltada para después gruñir y darse la vuelta.

-Cinco minutos más, mamá.

Natasha se quedó paralizada. Sabía que la chica lo había dicho de manera automática y sin pensar, pero, sin embargo, era la primera vez que le llamaba mama.

-Hope, vamos, tienes que ir al instituto - le dijo - es tu primer día.

-No quiero - se quejó ella - odio el instituto.

Natasha suspiró y salió del cuarto. Volvió a entrar tiempo después con su móvil en la mano y lo dejo encima de las cajoneras después levantó un dedo y presionó un botón. Empezó a sonar música muy alta.
Hope comenzó a quejarse.

-No se va a apagar hasta que tú te levantes a apagarla - le dijo.

Natasha caminó hasta la puerta y cuando iba a salir escuchó que Hope decía:

-Eso es chantaje.

Bruce y Natasha estaban sentados en la mesa desayunando cuando Hope entró ya vestida. Llevaba unos vaqueros nuevos, una camiseta blanca con la bandera de New York en el pecho, una chaqueta negra pero seguía llevando las mismas deportivas grises y viejas.

-Odio el instituto - gruñó mientras se echaba cereales.

-Yo también lo odiaba - dijo Bruce.

-¿Tú? - preguntó Natasha con una sonrisa pícara.

Bruce alzó las cejas.

-Odiaba a los chicos y educación física más concretamente.

Las dos se rieron con ganas mientras que Bruce se esforzaba por mirarlas mal mientras sonreía.

Poco tiempo después los tres se preparaban en el coche para poner rumbo al instituto.

-Yo conduzco - dijo Natasha - si conduces tú llegaremos tarde.

-¿Perdona? ¿Me estás llamando lento? - Natasha giró la cabeza dando a entender que si - bueno, pues si conduces tú nos estrellaremos.

-Anda calla y no te vuelvas verde - le dijo ella para meterse en el asiento del conductor.

Una vez los tres montados en el coche avanzaron por diversas calles de la ciudad.

Cuando pasaban por al lado del Big Ben y Bruce les daba una clase muy aburrida de historia (según Hope) sobre cómo se creó, cuánto tardó en construirse y el importante avance que supuso, algo golpeó el morro del coche haciendo que el coche saliese volando, diese una vuelta de campana, Bruce saliese disparado y, finalmente, el coche terminase boca abajo.

Hope sintió como si miles de cuchillos le atravesasen por cada cada milímetro de su cuerpo. Empezó a ver una serie de puntitos amarillos y rojos y le costó bastante darse cuenta de que estaba boca abajo.

-¡Hope! - gritó Natasha - Hope, tienes que salir de aquí. ¡Vete!

Tanteo a ciegas con la mano en busca de el botón para desabrocharse el cinturón, al encontrarlo lo apretó y cayó, de cabeza, contra el techo del vehículo.

Sintió un fuerte dolor al clavarse montones de cristales en las palmas de las manos para incorporarse e intentar salir. Empujó con ambas manos la puerta del coche pero esta no se abrió. Se dio la vuelta para golpear la puerta con las piernas y le dio una patada a esta que salió volando lejos del coche.

Salió arrastrándose del coche, se levantó y se limpió los cristales de la ropa. Se volvió hacia el coche para mirar a Natasha y cuando iba a acercarse un rugido hizo que se diese la vuelta.

Hulk estaba golpeando un coche con una farola.

-¡Corre! - gritó Natasha - corre, por favor.

Sin embargo Hope no podía dejar de mirar a Hulk, este se cansó del coche y la farola y miro a su alrededor en busca de otra cosa que aplastar. Hulk se la quedó mirando y rugió.

-¡HULK APLASTA! - rugió.

Hulk hecho a correr hacia ella y se preparó para pegarle un puñetazo en la cabeza. Hope no supo de donde sacó el valor, ni los reflejos pero se agachó y le propinó un puñetazo a Hulk en la boca del estomago, haciendo que saliese volando para estamparse contra un edificio.

Hope, con la boca abierta por el desconcierto, se miró la mano mientras abría y cerraba la palma de la mano. Escuchó el gemido de dolor de Natasha al intentar sacar sus piernas de donde las tenía atrapadas.

Corrió hacia el coche y se arrodilló. Agarró la puerta con la mano derecha y se sorprendió al arrancarla de cuajo con mucha facilidad.

-¿Cómo haces eso? - preguntó Natasha intentando soltarse.

-No lo sé.

Agarró el volante del vehículo que apretaba las piernas de la mujer y lo doblo de manera que le liberase las piernas y solo tuviese que desatarse el cinturón, que había sobrevivido al accidente y había terminado en perfecto estado.

Cuando Natasha finalmente salió del coche, con ayuda de Hope, miro a su alrededor, todo el caos que estaba creando Hulk, para volverse finalmente hacia él.

-¡Eh! - le llamó- ¡grandullón! - Hulk se volvió hacia ella, reconociéndola - cuánto tiempo, ¿eh?

Se acercó a él y extendió su mano, Hulk posó la suya sobre esta y, de repente, su cuerpo se encogió hasta dejar de ser verde y volver a ser Bruce.

Los tres salieron de allí con velocidad antes de que llegase la policía y llegaron al apartamento. Ninguno había hablado por el camino y Hope no cambió las cosas y se dirigió, en silencio, hacia su habitación, para tumbarse en la cama.

Bruce se había sentado en el sofá mientras Natasha rebuscaba en el frigorífico para volver con dos cervezas en la mano. Le tendió una a Bruce y se sentó a su lado.

-¿Cómo estás? - le preguntó Natasha.

-¿Es una pregunta trampa? - le preguntó Bruce - Hulk ha vuelto, después de dos años he perdido el control.

Natasha bebió un trago.

-Bueno, hemos tenido un accidente de coche - le dijo - si no perdieses el control me asustaría.

Bruce negó con la cabeza.

-Lo siento - le dijo - y vosotras, ¿como estáis?

-Bien y no gracias a mi - Natasha volvió a beber - no sé cómo Hope fue capaz de repeler a Hulk el tiempo suficiente para ayudarme a salir del coche. Todo ha sido muy confuso.

Justo en ese momento aporrearon la puerta y un hombre gritó:

-¡Señores Banner y Romanoff! ¡Servicios especiales de la ONU! Sabemos que están ahí, si no abren la puerta la tiraremos abajo.

Natasha se levantó y le hizo una seña a Bruce para que se mantuviese en silencio. Después le empujó para que se tumbase en el suelo delante del sofá y se quedase quieto, de manera que no se le veía. Luego caminó hasta la puerta y abrió.

Nada más hacerlo tres hombre lo apuntaron con sus armas.

-¿Cómo es que siempre termino con todo el mundo apuntándome? - le preguntó al que estaba colocado delante.

Hope Máximoff || Vengadores Infinity WarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora